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Propuesta de actividades complementarias para la incorporación a la práctica sistemática de ejercicios físicos de los adultos mayores

 

*Prof. Auxiliar

**Estudiante

Institución SEDE universitaria de Cultura Física

Céspedes, Florida

(Cuba)

Msc. Bárbara Onidia Muñiz Rodríguez*

Alfredo Keveen Abalo Muñiz**

gladys@finlay.cmw.sld.cu

 

 

 

 

Resumen

          La presente investigación aborda una problemática actual en el desarrollo de la población, la atención a la calidad de vida del adulto mayor, como objetivo se tiene la elaboración de una propuesta de actividades complementarias para la incorporación a la práctica sistemática de ejercicios físicos de los adultos mayores. Para el desarrollo de las actividades se tuvo en cuenta las indicaciones metodológicas, las características físico-biológicas, psicológicas y sociales para el trabajo con el adulto mayor.

          Palabras clave: Adulto mayor. Calidad de vida. Ejercicios físicos.

 

Abstract

          The present investigation approaches a current problem in the population's development, the attention to the quality of the elderly's life, as objective one has the elaboration of a proposal of complementary activities for the incorporation to the systematic practice of the biggest adults' physical exercises. For the development of the activities one kept in mind the methodological indications, the physical characteristics - biological, psychological and social for the work with the biggest adult.

          Keywords: Elderly. Quality of life. Physical exercice.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 17, Nº 173, Octubre de 2012. http://www.efdeportes.com/

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Msc. Bárbara Onidia Muñiz Rodríguez y Alfredo Keveen Abalo Muñiz

Desarrollo

    Indefectiblemente el hombre ha de envejecer, pero es menester sea este inevitable proceso, un periodo que, lejos de constituir motivo de vergüenza, preocupación o desamparo, dignifique y enaltezca al anciano, para ello el adulto mayor debe ser óptimamente atendido, esta atención comprende varias dimensiones e implica a prácticamente toda la sociedad. El problema es más grave en los países en desarrollo, donde dentro de 25 años vivirán las tres cuartas partes de las personas de edad. El Estado no responde, la solidaridad familiar se derrumba, la ayuda mutua sigue siendo insignificante. Sin embargo, no se vislumbra ningún movimiento para combatir esta “bomba” demográfica, como expresa J. Roldán (2005). Existe la falsa idea de que el envejecimiento demográfico de un país conlleva únicamente a aspectos negativos, con frecuencia se ve a los ancianos como personas tristes, enfermas y con discapacidad. Esta falsa concepción que proviene de las generaciones del pasado está lejos de la realidad actual. La gran mayoría de los sexagenarios gozan de buen estado de salud y constituyen una generación que por primera vez en la historia llegan a la vejez con mejores condiciones sanitarias y socioeconómicas que las generaciones anteriores. En los últimos años se ha hablado mucho de actividad física y de adultos mayores; generándose un claro aumento de este tipo de practicantes. Paralelamente ha mejorado el nivel y la calidad de la práctica y la persona mayor está siendo educada para que adopte una actitud positiva hacia estas actividades.

    La actividad física es válida y tiene efectos positivos para el organismo a lo largo de toda la vida del hombre. Ayuda a mantenerse en forma, a mejorar los niveles de salud y la calidad de vida, pero es necesario adaptarla a las necesidades y posibilidades de movimiento de cada persona y cada grupo de edad. Posiblemente, el objetivo principal que motiva a un adolescente a hacer actividad física y deporte será la competición; en cambio una persona mayor practicará actividad física por otros motivos, como por ejemplo para prevenir posibles atrofias, artrosis, problemas circulatorios, para mantenerse en forma, para ocupar el tiempo libre, para estar con otros, etc.

    El envejecimiento, ¿es un fenómeno intrínseco, inevitable? o al contrario, ¿debe considerarse como un error biológico, como una enfermedad y como tal podría tratarse?

    El hombre mismo ha pasado a tener desde, principio del siglo XX hasta la actualidad, de 35 a 77 años de esperanza de vida. Y ello se debe a la mejoría de las condiciones vitales, mejor alimentación y mayor control de enfermedades.

    El concepto de envejecimiento es clave para el análisis teórico de este trabajo, existen en la literatura consultada diferentes definiciones, algunas ameritan ser expuestas:

    “…es hacer vieja a una persona o cosa. Durar, permanecer por mucho tiempo”. (Diccionario Enciclopédico Océano, 2001).

    “…concepto biológico que se refiere al conjunto de modificaciones inevitables e irreversibles que se producen en un organismo con el paso del tiempo y que finalmente conducen a la muerte”. (Enciclopedia Encarta 2008).

    “…tendencia al desorden que manifestaría un ser vivo organizado como un sistema interrelacionado de sustancias químicas inestables que reaccionan de forma secuencial”. (Pilar Point Geis, 2001).

    “… disminución progresiva y regular, con la edad, del “margen de seguridad” de nuestras funciones, que parecen tener un ritmo de crecimiento y decrecimiento propio de la especie, por tanto, genéticamente programado, pero, no obstante, ampliamente afectado por las condiciones de vida”. (Bouliére, 1990).

    “…es el deterioro de un organismo maduro, deterioro resultante de cambios ligados al tiempo, esencialmente irreversible e intrínseco a todos los miembros de la especie”. (Handler, 1990).

    Llegados a este punto, se está en condiciones de aventurar una definición del envejecimiento: esta reflejaría la tendencia al desorden que manifestaría un ser vivo organizado como un sistema interrelacionado de substancias químicas inestables que reaccionan de forma secuencial.

    En los organismos que envejecen observamos diferentes etapas: fertilización, madurez sexual, detención del crecimiento, muerte. El envejecimiento sería una continuación del crecimiento, pero si bien el desarrollo incluye los fenómenos de diferenciación, el crecimiento y la maduración que ayudarán a la supervivencia hasta que el individuo sea un adulto reproductor competitivo, los procesos del envejecimiento conducirán a una mayor dificultad de adaptación al medio ambiente y, al fin, a la muerte.

    Entre las teorías biológicas del envejecimiento que se han planteado se encuentran:

  • Teoría de la programación genética del profesor Hayflick: En 1965, el profesor Hayflick, cancerólogo de la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford (California), determinó que el envejecimiento de un individuo con origen genético está determinado en el momento mismo de su concepción. El hombre “estaría en las últimas” cuando su programa, inscrito en las moléculas de ADN, tocase a su fin. No obstante, parece que la existencia de esta programación celular no es la única causa del envejecimiento humano, dado que, de todas maneras, el hombre no vive el suficiente tiempo para agotar el programa de su multiplicación celular.

  • Teoría de la acumulación de errores de Orgel: En 1963, el Doctor Orgel, del famoso Instituto Salk de California, demostró, a través de estudios bioquímicos o genéticos, que durante el envejecimiento se producen cada vez más errores en la síntesis de las proteínas nucleares ácidas. El programa genético estaría grabado ya no en una cinta magnética, sino en un disco, que, a fuerza de girar, se rayaría cada vez más. La acumulación de errores resultante haría que al cabo de un tiempo la célula viva fuese incapaz de comprender el mensaje trasmitido, cometiendo errores y terminando por dejar de funcionar.

  • Teoría inmune del envejecimiento: El organismo va perdiendo paulatinamente la capacidad de defenderse ante invasores patógenos y ante sus propias células anómalas llevándolo a un proceso de envejecimiento, convirtiéndose este fenómeno en un círculo vicioso; al aumentar la posibilidad del organismo de no defenderse aumentan las células defectuosas y con ello el envejecimiento.

    En conclusión no existe ningún consenso científico “aun” sobre la verdadera naturaleza del proceso de envejecimiento, sin embargo, se sigue investigando sobre el tema.

    El envejecimiento funcional: se manifiesta en todos los órganos y sistemas del cuerpo humano, ello adquiere en cada uno rasgos característicos, algunos de éstos se reflejan en la síntesis que se muestra a continuación:

  • Piel: Se pierde la elasticidad debido a la degeneración del soporte de colágeno, de fibras elásticas y a la deshidratación. Las uñas se vuelven más frágiles y el pelo pierde el pigmento natural, cae con mayor facilidad y aparecen las canas.

  • Esqueleto y músculos: La falta de ejercicio acelera y empeora el proceso osteoporótico. Los huesos serán por lo tanto más frágiles y el riesgo de fractura mucho mayor. Disminución de la amplitud de movimiento articular, los cartílagos se deforman, las articulaciones, los tendones y los ligamentos se hacen más quebradizos.

  • Vista: En el cristalino pueden aparecer formas discontinuas (cataratas) con la consecuente disminución de la visión. La retina será afectada favoreciendo la esclerosis retiniana. El sentido de la vista es uno de los más perjudicados durante el envejecimiento.

  • Oído: La piel que cubre el conducto auditivo externo se atrofia, favoreciendo la acumulación del cerumen por lo que serán frecuentes los tapones de cera y la hipoacusia secundaria. Se produce la denominada presbiacusia.

  • Olfato y gusto: Disminuye el número de papilas gustativas y terminaciones olfatorias, el umbral para los sabores y olores aumenta, se vuelve más goloso e inapetente con tendencia a recurrir a una dieta monótona y poco variada con el consiguiente riesgo de presentar déficit nutritivo.

  • Aparato circulatorio: Disminución de la circulación en el retorno venoso, aparecen varices y edemas en los pies y tobillos que aumentan con el paso del tiempo. En las arterias el enemigo más temible se llama arteriosclerosis, produciendo lesiones en el endotelio vascular, adhesión de plaquetas y la formación de las placas de ateroma lo cual provoca una disminución de la luz arterial con la consecuente dificultad del flujo sanguíneo, repercutiendo en el órgano irrigado. Las deficiencias en la funcionalidad del aparato circulatorio traerán una repercusión negativa en todos los órganos y sistemas.

  • Corazón: Disminución en la contractibilidad de la musculatura cardiaca, traducidos en bloqueos y arritmias. Las válvulas que comunican las distintas cavidades cardiacas se pueden calcificar produciéndose estenosis o insuficiencia valvular. La consecuencia fundamental es una disminución en la capacidad de trabajo cardíaco.

  • Tubo digestivo: La caída de los dientes es un fenómeno común en el anciano, al no poder masticar algunos alimentos que le son necesarios puede presentar problemas nutricionales, que se agravan por una deficiencia en la producción de saliva, disminuye la secreción de jugos gástricos y se retrasa el vaciado del estómago (estreñimiento).

  • Hígado y páncreas: Disminuye el peso global del órgano, el número de células funcionales, la excreción de sales biliares con consecuencias importantes relacionadas con la digestión de proteínas y lípidos. El páncreas sufre cambios, gran parte de tejido normal es sustituido por tejido fibroso y adiposo con consecuencias tanto para la digestión de alimentos como en la producción de insulina, acarreando trastornos en la regulación de glucosa sanguínea.

  • Riñones y vías urinarias: La cantidad de sangre que llega a los riñones disminuye hasta en un 50%, disminuye la capacidad de filtración; la cantidad de orina se mantiene constante. En los varones es frecuente la hipertrofia benigna de la próstata que producirá disminución de la fuerza de chorro y, en casos extremos, imposibilidad para orinar, en las mujeres dado que la uretra es de menor longitud, es más frecuente la incontinencia urinaria.

  • Pulmones: Disminución en la superficie alveolar, mengua el área capilar, la superficie total destinada al intercambio de gases durante la respiración es menor, las vías aéreas tienden a la obstrucción y la caja torácica se vuelve más rígida. El anciano, para conseguir, el mismo oxígeno, tendrá que hacer un trabajo respiratorio mayor.

  • Sistema nervioso: Entre 45 y 85 años el peso del cerebro disminuye en un 12% contribuyendo a una mayor lentitud de los reflejos y la capacidad de memoria, alteraciones a nivel de las funciones superiores que deberán atribuirse a un proceso patológico. Atrofia de la corteza cerebral y la dilatación ventricular, se aprecia una mayor lentitud global en las funciones sensitivo-motoras, el anciano tendrá más dificultades en aprender series de ejercicios.

    En cuanto a las características psicológicas: Realmente, la vida afectiva de las personas mayores esta condicionada por los imperativos socioeconómicos, que modifican de forma notable la naturaleza de sus necesidades. Los problemas de la vivienda y de los recursos, muchas veces difíciles de resolver en el momento de jubilarse, hacen que al orgullo de ser autónomo le suceda un sentimiento de dependencia que engendra una necesidad de atesorar.

    Las modificaciones más evidentes afectan el carácter y a las actitudes de estas personas. Sin duda alguna, cada uno envejece tal como ha vivido siempre, pero con la diferencia de que, debido a su menor capacidad de inhibición, es cada vez más difícil de esconder lo que uno es realmente.

    Envejecer es liberarse de numerosas preocupaciones y molestias, es la ocasión de poder sacar provecho de la disponibilidad para dedicarse a actividades sociales, culturales o de ocio, en las cuales el espíritu de iniciativa, la experiencia, la imaginación, la capacidad de juicio serán fuente de enriquecimiento personal y de nuevos contactos sociales.

    En cuanto a las características socio-afectivas: Como norma social, se considera que una persona se debe jubilar una vez alcanzados los 60-65 años, según el tipo de trabajo que estaba realizando. Este momento supone un cambio fundamental para la persona: varían los puntos de referencia que tenía hasta el momento y, paralelamente, la situación laboral y económica sufre un cambio importante. Este cambio, obligado socialmente, es, a veces, difícil de superar y de aceptar. Uno de los problemas de las personas mayores es la soledad. Han perdido su núcleo social de trabajo (nexo de unión con la sociedad); en algunos casos se quedan viudos, es decir, que pierden a sus seres queridos más próximos y, generalmente, sus hijos ya no viven en casa. Es, pues, una nueva etapa de la vida en que hay que acostumbrarse también a vivir solo, una nueva época que necesita un tiempo de aceptación y de adaptación. Se considera que la actividad física puede ayudar a superar, en parte, este déficit. Ya que por su carácter colectivo (actividades en grupo), social, relacional y de movimiento es una actividad que puede colaborar positivamente en este proceso de adaptación a esta nueva situación.

Algunas consideraciones sobre la actividad física en el adulto mayor

    En numerosos estudios se ha comprobado que las personas que mantienen una buena forma física, realizando pautas sensatas de ejercicio y de control de peso corporal, obtienen el beneficio adicional de una vida más larga. En los estudios dedicados a este tema se ha demostrado que, especialmente entre los 50 y 70 años de edad, la mortalidad es tres veces menor entre las personas que llevan una vida sana que en quienes no cumplen este requisito.

    Las razones fundamentales del por qué una buena forma física prolonga la vida desde el punto de vista funcional consisten en, primero, una vida saludable y un control de peso corporal disminuyen mucho las enfermedades cardiovasculares; esto se debe al mantenimiento de una presión arterial moderadamente baja, disminución en sangre del colesterol y las lipoproteínas de baja densidad (colesterol malo) con un aumento de las lipoproteínas de alta densidad (colesterol bueno), que limpian las arterias y evitan por tanto la formación de ateromas, además, estos cambios permiten una disminución del número de crisis cardiacas y cerebrales.

    Después de los 60 años va mermando el proceso de asimilación y entendimiento de una actividad física que se le oriente a un adulto mayor, sin embargo, al ser claros en la explicación y con una adecuada demostración será el adulto mayor capaz de ejecutar la acción motriz orientada. Se desprende que el factor tiempo es básico para que una persona pueda actuar motriz mente a medida que avanza en edad. El desenvolvimiento motor de los ancianos se ve afectado si se les impone tiempo concreto de realización (lentitud en sus trasmisiones nerviosas).

    Para compensar todos estos aspectos, el adulto mayor manifiesta una serie de actitudes descritas por Ruiz Pérez en su libro “Desarrollo Motor y Actividades Físicas” y son las siguientes:

  • Actuar a su propio y económico ritmo de acción.

  • Ahorrar energía obteniendo de su experiencia acciones más económicas.

  • Anticipar las acciones y sus consecuencias para tener más tiempo y lograr responder adecuadamente.

  • Controlar sus acciones antes de proceder a ejecutarlas para tratar de disminuir los errores.

  • Reducir las exigencias de las propias tareas aún a pesar de que no sean realizadas completamente.

    Cada edad posee características que lo tipifican, esos rasgos generales se complican cuando se observan las características individuales; estas diferencias existentes en todos los niveles hacen que, en general, la edad cronológica no sea un aval para programar las actividades de las personas de edad avanzada.

    Hay que considerar la importancia del ejercicio físico a una edad en que las facultades tienden a declinar y necesitan del mantenimiento de la función para conservar activos todos los sistemas que rigen el organismo: sistema nervioso, sistema muscular, sistema óseo-articular, entre otros. Si alguna persona piensa que a su edad no puede empezar a practicar algún deporte y/o actividad física, está muy equivocada; ya que la edad no tiene que establecer fronteras al modo de vivir.

    Los estudios realizados sobre la práctica de la actividad física para los adultos mayores han dejado de manifiesto los efectos positivos de una actividad motora regular y continua. Estas mejoras se reflejan no sólo en la capacidad de resistencia al ejercicio y, por lo tanto, al esfuerzo, determinada por el entrenamiento físico, como en las capacidades intelectuales, con una viveza intelectual y un estado de distensión psíquica superior a la medida verificada en los ancianos.

Metodología para la práctica de la actividad física en el adulto mayor

    En cuanto a los objetivos de la actividad física para el adulto mayor, se pueden plantear los siguientes:

  • Mejorar la calidad de vida de los adultos mayores mediante la práctica de actividades físicas adecuadas y todo lo que ello pueda representar.

  • Conseguir un buen envejecimiento con la práctica de actividades físicas.

  • Ofrecer una actividad física adaptada a las posibilidades de movimiento del grupo y de cada uno.

  • Hacer una actividad física motivante y gratificante, en un ambiente tranquilo, cordial, lúdico y relajado.

    La práctica de la actividad física para el adulto mayor debe cumplir ciertas exigencias para su óptimo desenvolvimiento, como son:

  1. Gratificante: La actividad física debe aportar bienestar físico y mental.

  2. Utilitaria: Para mantener o mejorar las capacidades físicas e intelectuales.

  3. Recreativa: Para pasarlo bien; como actividad a realizar en el tiempo libre.

  4. Motivante: Que la actividad genere ella misma un interés y cree una necesidad en los practicantes.

  5. Integradora: Donde todos puedan participar, para sentirse integrados a un grupo social.

  6. Adaptada: A las posibilidades de movimiento del grupo y de cada uno.

  7. De fácil realización: Que la dificultad del ejercicio no sea un impedimento para su correcta realización.

  8. Socializadora: El grupo de actividad física debe ser lo suficientemente importante para los adultos mayores que lo configuran y cumplir una función primordialmente de relación y comunicación.

  9. De calidad más que de cantidad: Ya que la actividad debe estar centrada en los objetivos propuestos y debe cumplir unas normas de ejecución.

  10. El paso previo antes de preparar un programa será el conocer el grupo al que se dirigirá, sus peculiaridades y características en lo que se refiere a:

    1. Homogeneidad del grupo

      • Grupo homogéneo

      • Grupo heterogéneo

    2. Estabilidad del grupo

      • Grupo estable

      • Grupo inestable

    3. Nivel físico

    4. Grado de movilidad y autonomía de la mayoría de componentes del grupo, ya que ello marcará las pautas de los objetivos de la sesión y del programa.

    5. Nivel sociocultural

    6. Formación que han recibido estas personas en lo que a la actividad física se refiere (hábitos higiénicos y de mantenimiento del cuerpo).

    7. Recursos económicos

    8. Motivaciones e intereses que mueven al grupo a realizar actividad física:

      • De orden social

      • De orden físico

      • De orden cultural

    Todos estos aspectos relacionados con el grupo deben ser valorados al realizar un programa de actividad física para adultos mayores, ya que marcarán las pautas a seguir en el mismo y en las sesiones, y, por lo tanto, los objetivos que se quieran conseguir. El ejercicio físico se considera como una de las actividades físicas fundamentales que más ventajas le brindan al organismo humano, por su importancia se asume en esta investigación como “un conjunto de acciones motoras, destinados a resolver un problema motor concreto. Las acciones motoras pueden ser agrupadas por la necesidad de desarrollar alguna cualidad física como la fuerza, la velocidad, coordinación, flexibilidad y resistencia” (Chávez, 1993).

    Teniendo en cuenta que en esta área los practicantes se encuentran internos, por lo que siempre están disponibles, el reto constituye la incorporación de los mismos, al círculo de abuelo por lo que el autor propone desarrollar estas actividades dentro de las horas clase con que cuenta el técnico, se trabajara 5 frecuencias semanales de las cuáles 3 se dedican a la actividad física y 2 a implementar la propuesta.

  • Las actividades tienen un tiempo de duración de 45 minutos a 1 hora y se planifican según las indicaciones metodológicas del Programa para el adulto mayor y de la Cultura Física.

  • El objetivo fundamental de cada sesión está dirigido a la incorporación del adulto mayor a la práctica sistemática del ejercicio físico.

Indicaciones metodológicas generales

    Las recomendaciones metodológicas generales están relacionadas con algunos elementos necesarios para lograr un adecuado desarrollo de las actividades programadas, estos elementos son los siguientes:

  • Área de trabajo: Es recomendable que el espacio destinado para las actividades sea amplio y si es posible sin ningún objeto que pudiera obstruir o representar algún peligro para los adultos mayores; la limpieza es requisito indispensable; además, hay que mantener siempre un estado de atención durante la actividad para prevenir cualquier contratiempo relacionado con el área de trabajo.

  • Horario de actividad: Las actividades se realizan en el horario de la mañana, entre las 9:00 a.m. y 10:00 a.m., es decir con una duración de una hora, aunque no se descarta la realización de los mismos en otro momento del día.

  • Vestuario: Es importante usar ropa cómoda y fresca que le permita al adulto mayor realizar movimientos libremente y sin esfuerzos adicionales, teniendo presente el estado del clima. Procurar el empleo de calzado cómodo y flexible.

  • Familiarización: Familiarizar al adulto mayor con todo lo concerniente a las actividades que van a realizar y al medio en que se desarrollarán, se emplea 1 frecuencia semanal.

  • Componente afectivo: Es importante crear un clima afectivo que permita a los participantes sentirse en confianza, es necesario evitar expresiones de lástima compasión o subestimación. El respeto, el optimismo, la confianza, el buen humor y la alegría son ingredientes que favorecen el éxito de la actividad.

  • Relaciones interpersonales: Se debe promover el fortalecimiento de relaciones interpersonales y la creación de nuevas relaciones en el grupo. Deben manejarse con cuidado las diferencias y enfrentar su solución con mucho tacto, si es posible crear situaciones dentro de las sesiones para resolverlas.

Propuesta de actividades complementarias para la incorporación de los adultos mayores a la práctica sistemática del ejercicio físico

1.     Actividad: Musicoterapia.

  • Objetivo: Elevar el estado psicoemocional de cada participante, estrechar las relaciones.

  • Tiempo de duración: 1 hora.

  • Frecuencia: Mensual.

  • Materiales: Equipo de música, micrófono

  • Descripción: En la actividad se pone la música de su gusto y propia de su tiempo, de esa forma recuerdan el pasado y vuelven a vivirlo. En ella los ancianos cantan, bailan, cambian de pareja, también modelan e imitan a cantantes. Se realizan competencias para ver quien es el mejor que canta y baila.

  • Recomendaciones metodológicas: Es importante crear un clima afectivo que permita a los participantes sentirse en confianza, no forzar a los practicantes a realizar la actividad.

2.     Actividad: Paseo a lugares históricos.

  • Objetivo: Aumentar la autoestima, cambiando el escenario de convivencia

  • Tiempo de duración: Se tiene en cuenta la distancia a recorrer.

  • Frecuencia: trimestral.

  • Material: Transporte, alimentación.

  • Descripción: Al salir del hogar, son despedidos por sus compañeros, ya en el lugar se adapta el recorrido a sus condiciones, resaltando siempre la importancia de la visita. Reconociendo el valor educativo que representa para los ancianos.

  • Variantes: Puede realizarse a lugares recreativos, culturales.

  • Recomendaciones metodológicas: Tener en cuenta la distancia a recorrer, el transporte debe estar acorde con la edad y número de participantes; así como viajar en compañía de personal de salud y asistentes.

3.     Actividad: Celebración de cumpleaños colectivos y fechas alegóricas.

  • Objetivo: Estrechar las relaciones entre los ancianos y trabajadores, aumentando el grado de satisfacción y mejorar la socialización.

  • Tiempo de duración: 2 horas.

  • Frecuencia: Trimestral.

  • Material: Equipo de música, regalos.

  • Descripción: Las acciones se coordinarán con los trabajadores a través de reuniones, son participativas y se reparten las tareas a cumplir. Si es un cumpleaños se presentan los homenajeados si es alegórica y de índole político e histórico se hace mención a la fecha y su significación ya sea por parte de los trabajadores, algún miembro del consejo de ancianos o el profesor. Concluyendo se escucha música y se baila.

  • Variantes

  • Recomendaciones metodológicas: Cuidar porque no se pierda la motivación y el interés en las actividades. Se debe promover el fortalecimiento de relaciones interpersonales y la creación de nuevas relaciones en el grupo

4. Actividad: Bailando

  • Objetivo: Mejorar la comunicación grupal, cooperación, agilidad.

  • Tiempo de duración: 45 minutos.

  • Frecuencia: Mensual.

  • Material: Varias mantas, globos de colores, radio.

  • Descripción: La actividad se desarrolla en varios momentos, uno dirige la misma y va cambiando de dinámica. Los integrantes de cada grupo están enumerados. Cada grupo elige una manta y toman la misma entre todos con ambas manos primero y luego con una. Se utiliza música de fondo.

    • Colocar la manta a distintas alturas y posiciones.

    • Girar con la manta al ritmo de la música.

  • Variantes

    • Desplazarse con la manta al ritmo de la música.

    • Desplazarse de un lugar a otro y dentro del círculo.

    • El que dirige indica dos números y éstos se cambian de posición en el círculo pasando por debajo de la manta.

    • Ídem pero cuando se cruzan bajo la manta se deben saludar.

    • Se realizan las mismas actividades, pero sosteniendo sobre la manta cinco globos.

    • Cada equipo elige un zorro que deberá ir a robar huevos (globos) a otros equipos. Los que se quedan en la manta deben evitar el robo.

  • Recomendaciones metodológicas: hacer hincapié en que mantengan los ojos abiertos en todo momento y que los movimientos y traslaciones sean suaves, para evitar tropiezos.

    • Velar por que los hipertensos no levanten los brazos, ya que esto está contraindicado para ellos

5.     Actividad: Caminatas educativa.

  • Objetivo: Mejorar la resistencia cardiovascular, debatiendo temas de salud durante el recorrido.

  • Tiempo de duración: 45 minutos.

  • Frecuencia: Semanal.

  • Materiales: Cronómetro, agua.

  • Descripción: realizar un recorrido con una duración acorde con las características del grupo, durante el mismo se realizará una charla sobre temas de salud que tienen incidencia en la tercera edad.

  • Recomendaciones metodológicas: Aumento gradual de la distancia a recorrer. Se tratarán temas como: importancia de la actividad física para el mejoramiento de la calidad de vida, reducción de los síntomas de las enfermedades crónicas no transmisibles, dieta sana, sexualidad en la tercera edad.

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