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La actividad motriz de 3 a 4 años

   
Especialista en motricidad infantil
(Cuba)
 
 
Catalina González Rodríguez
forteza@inder.co.cu 
 

 

 

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 8 - N° 46 - Marzo de 2002

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    El grupo de 3 a 4 años marca el inicio de la edad preescolar.

    A partir de los 3 años el crecimiento del niño transcurre mas lento. Las actividades motrices y juegos realizados al aire libre pueden contribuir favorablemente al mismo.

    La gran riqueza de movimientos que se expresa en este grupo de edad, pues el pequeño quiere desplazarse constantemente y realizar nuevas proezas, puede tener cierta orientación pedagógica por parte del adulto, sin abusar, ni pretender asumir un papel directivo.

    Si consideramos lo expresado con relación al crecimiento, algunas tareas motrices pueden sugerirse al niño realizando los movimientos con gran amplitud, a fin de contribuir al estiramiento de los diferentes planos musculares. El adulto debe ser muy observador de la actividad del niño, debiendo evitar que el pequeño cargue o traslade objetos de peso, así como intervenir cuando el niño realice ejecuciones reiterativas de algunas tareas sin la alternancia de cada miembro, tanto superior como inferior, ejemplo: saltar con un solo pie, lanzar con una mano. En estas tareas debe hacerse énfasis en la atención a la ejecución bilateral. Otras tareas como saltos desde alturas deben realizarse ejecutando la caída en superficies suaves (colchón, césped, arena). Con estas precauciones protegemos las articulaciones, que en esta edad tienen predominio de tejido cartilaginoso, gracias a lo cual se produce el crecimiento.

    La intervención del adulto puede estar orientada a proponer al niño algunas tareas y juegos que beneficien el desarrollo de su postura, lo que se logra mediante diferentes actividades que contengan tareas de equilibrio, como: caminar libremente llevando un objeto (sin peso) en la cabeza, caminar por líneas trazadas en el piso, por cuerdas, tablas, bancos, muros; rodar pelotas pequeñas o conos con uno y otro pie (sin calzado), caminar por terrenos con desnivel en su superficie, bajar y subir obstáculos de diferentes alturas, mantenerse en uno o dos pies sobre objetos pequeños, dentro de otras.

    El niño de 3 a 4 años realiza muchas acciones por si solo, demostrando mayor independencia que en el grupo de edad anterior. Comienza a diferenciar el color, la forma y el tamaño de los objetos utilizándolos, según sus propiedades, durante las actividades motrices. Se aprecia que a los niños de este grupo de edad, les gusta mucho imitar los objetos y fenómenos de la realidad, ejemplo: imitan que conducen autos, aviones, reproduciendo muchas acciones de la vida cotidiana, por lo que es sumamente importante facilitar al niño el contacto con todo el mundo exterior, a fin de que pueda adquirir suficientes y diferentes vivencias de la realidad.

    Resalta en este grupo de edad la curiosidad del niño por todo lo que le rodea, con frecuencia pregunta el por qué de las cosas. Quiere conocerlo todo, saber el nombre de los objetos y su utilidad.

    El niño entre 3 y 4 años es capaz de ocupar roles en el juego, por ejemplo: hace como si fuera el chofer y utiliza el aro como timón.

    En este grupo de edad comienzan ciertas manifestaciones de acciones cooperativas entre un niño y otro, en ocasiones comparten sus juguetes y realizan algunas acciones en pequeños grupos: lanzar o rodar la pelota en parejas, caminar en grupos pequeños dados de las manos, girar en parejas, hacer rondas jugando en círculos, etc.

    La motricidad del niño, en el período de tres a cuatro años, evoluciona como sigue: se desplazan caminando, corriendo y saltando en diferentes direcciones. El desarrollo de la orientación espacial mayormente lo demuestran al lanzar de diferentes formas y hacia diferentes puntos de referencia.

    En este grupo ya comienzan a atrapar con las dos manos la pelota que le lanzan rodando y también hacen intentos por capturar la pelota que le lanzan a corta distancia aunque lo realizan con ayuda de todo el pecho.

    La acción de rodar la pelota se ejecuta en este grupo con mejor dirección no sólo por el piso, sino también por encima de bancos. Los lanzamientos se realizan con mayor variedad e inician el golpeo de la pelota con un pie.

    En este grupo la carrera la realizan combinadamente: corren y caminan, corren y golpean o lanzan objetos; y también cambian la dirección de la carrera al bordear objetos colocados en el piso, si estos se encuentran separados unos de otros.

    Además de subir y bajar la escalera con mejor coordinación y continuidad en los movimientos, comienzan a realizar la trepa a un plano vertical (cuerdas con nudos). Esta trepa la ejecutan con el cambio de agarre de las manos sin lograr todavía el desplazamiento de las piernas.

    La reptación la realizan por el piso con movimientos alternos de brazos y piernas, pero aun sin buena coordinación y también la ejecutan por bancos donde se sostienen de sus bordes y con una ligera flexión de los brazos, desplazan todo el cuerpo, arrastrándose por el banco. Ejecutan la cuadrupedia en cuatro puntos de apoyo (pies y manos) por arriba de bancos y muros pero sin un movimiento continuo, por lo que se ejecuta descoordinadamente. Cuando realizan esta acción por las tablas inclinadas o a nivel del piso, recurren nuevamente al movimiento antecesor de gateo.

    Caminan por tablas en el piso no solo hacia adelante sino también hacia atrás y por arriba de bancos y muros; al final de estos saltan hacia abajo. La mayoría de los niños cuando saltan de esta forma, caen con poca estabilidad y se observan las piernas extendidas en la caída. También saltan desde el piso, a caer sobre un obstáculo a pequeña altura y pasan saltando, objetos de 25 cm. (aproximadamente) de altura, colocados en el piso.

    Como en los artículos anteriores recordamos que la caracterización motriz expresada anteriormente constituye solo una aproximación basada en observaciones realizadas a muestra de niños y niñas de este grupo de edad, bajo influencias educativas normales, por lo que debe considerarse que aunque un niño este en este grupo de edad sus características psicomotrices pueden variar de acuerdo a las particularidades de su desarrollo. De ahí la importancia de tener en cuenta las diferencias individuales.

    A continuación se ofrecen dos ejemplos prácticos de sesión de motricidad que pueden organizarse con niños y niñas de 3 a 4 años.

    Otros ejemplos pueden encontrarse en el libro La Educación Física en preescolar (de la autora) editorial INDE. Barcelona.


Sesión No.1

Objetivo: Caminar y correr con cambios de dirección libremente y por planos en el piso.
Métodos: práctico, verbal y juego
Material: Mariposa y flores de cartulina, tizas para dibujar.

Parte inicial:

    Caminar dispersos por toda el área, lento y rápido, moviendo los brazos lateralmente, imitando el vuelo de las mariposas.

    Cada niño se coloca agachado dentro de la flor (de cartulina) que ha sido colocada previamente en el piso. A la señal del adulto salen a "volar" por toda el área. A la otra señal de "llegó el cazador", los niños corren a ocupar cada uno su flor.

Parte Principal:

  • Se estimula para que los niños corran por toda el área tratando de agarrar la mariposa que lleva el adulto. Este se desplaza cambiando la dirección.

    Los niños dibujan en el piso líneas rectas y con curvas para pasar por arriba: caminando hacia adelante, atrás y lateralmente (las manos se pueden llevar en diferentes partes del cuerpo). Al final corren por las líneas.

Juego: “A pasear por el campo”.

    Se divide el grupo a la mitad. Se trazan en el área dos líneas a la distancia de 10 m que representan dos casas. En el centro, entre las dos líneas, se dibuja un círculo donde se ubica un niño. El resto de los niños se situará sobre una de las líneas (casas). El adulto invita a “pasear por el campo”. Los niños salen corriendo a tratar de llegar hasta la otra línea (casa). El niño que está en el círculo trata de agarrar al que no logre llegar a la "casa".

Parte Final:

    Caminar lentamente y mover el cuerpo como si el viento los llevara a un lado y otro. Soplar haciendo sonidos como "el viento


Sesión No.2

Objetivo: Ejecutar desplazamientos de diferentes formas.
Métodos: Práctico, verbal y juego.
Materiales: Bolsas rellenas y objetos que rueden o pelotas.

Parte Inicial:

    Correr con movimientos libres de los brazos, imitando el vuelo de los pájaros.

    El adulto imita al viento, soplando y emitiendo sonidos hacía el lugar donde sugiere a los niños desplazarse (a un lado y otro, hacia adelante y atrás). El adulto puede indicar verbalmente la dirección.

    Caminar y flexionar el tronco imitando "pájaros" que picotean buscando alimento.

Parte Principal:

    Los niños colocan bolsas en el piso y caminan sobre ellas. Se separan las bolsas para caminar bordeándolas (lento - rápido) y después pasarles por arriba sin tocarlas con los pies (hacía adelante y lateralmente).

Juego: Lluvia de pelotas.

    El adulto lanza por el piso varias pelotas u objetos que rueden y motiva a los niños que corran para alcanzarlos. Cuando lo logren se estimula a que ellos mismos los lancen para volver a alcanzarlos.

Parte Final:

    Caminar lentamente llevando cada niño la pelota en diferentes partes del cuerpo.


    Como se puede apreciar en los ejemplos sugeridos, a partir de este grupo de edad, la actividad motriz puede tener una estructura organizativa donde se detallen en el plano teórico las partes que conforman la misma. En la practica estas partes son imperceptibles ya que guardan una estrecha relación.

    Se puede iniciar la actividad con una primera parte dedicada a la realización de diferentes desplazamientos (caminando, corriendo, saltando) de manera que los niños logren orientarse en el espacio donde se mueven. Esta parte incluye también movimientos de expresión corporal que facilitan la disposición psico-fisica del niño para la parte que continua.

    La segunda parte de la actividad llamada principal o medular es donde se propicia el desarrollo de las habilidades motrices básicas como: caminar por diferentes planos y alturas, correr bordeando o pasando obstáculos, saltar, rodar, lanzar, golpear de diferentes formas y combinaciones, reptación, cuadrupedia, escalamientos, trepas, así como las diferentes alternativas y combinaciones de cada uno de ellos como: deslizarse, balancearse, halar, empujar objetos, dentro de otros. Esta parte incluye un juego motor propiamente dicho, aunque toda la actividad se realiza en forma de juego, por lo que el mismo se utiliza en estas edades como medio y como método.

    La tercera parte o final procura llevar al organismo a un estado más tranquilo, pausado, mediante la ejecución de tareas motrices de relajación y acompañadas de una respiración más lenta y profunda.

    Las tareas motrices que se realizan en cada una de estas partes de la actividad están dirigidas a identificar al niño con su esquema corporal y con todas las posibilidades de utilización de su cuerpo, el manejo del espacio, el conocimiento del tiempo y las relaciones de cada uno de estos componentes.

    Esta estructura es muy flexible así como los contenidos que se proponen sugerir al niño. Si los contenidos se planifican con antelación, deben ser susceptibles a cambios, pues ya desde estas edades el niño comienza a realizar muchos movimientos y acciones por su propia iniciativa, lo cual debe ser respetado por todo educador para no afectar el desarrollo de la independencia en los pequeños.

    Cuando la actividad motriz del niño no se ejecuta de forma espontanea, sino cuando se realiza como una actividad pedagógica, puede asimilar este tipo de estructura y tener un tiempo de duración entre 15 y 20 minutos aproximadamente, con dos frecuencias en la semana.

    La sesión de motricidad constituye un momento de gran valor educativo, en el que se puede establecer un contenido programatico que, sin ser estático ni esquemático, es considerado como una importante vía para contribuir al desarrollo de niños y niñas que ya a comienzan en la edad preescolar.


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