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FUTBOL: ANALISIS FUNCIONAL PARA LA
DETECCION Y FORMACION DE TALENTOS

Rubén Cohen Grinvald


E anterior

6. El tiempo de Juego
El partido se jugara durante dos periodos iguales de 45 minutos con un descanso en el medio tiempo que no deberá exceder de los 15 minutos. Cada periodo deberá ser prolongado para recuperar el tiempo perdido ocasionado por sustitución, evaluación de la lesión de jugadores, transporte de jugadores lesionados fuera del terreno de juego, perdida de tiempo, cualquier otro motivo. Datos obtenidos de equipos de alta competición durante un partido de 90 minutos demuestran que los jugadores se mueven sin balón casi el 98 % del tiempo total.

En ataque, básicamente realizan desmarques de apoyo y ruptura, desdoblamientos, apoyos permanentes, o sea que existe movilidad constante en el terreno de juego; estos datos son extrapolables a competiciones de semiprofesionales y juveniles donde los promedios son parecidos (Luhtanen en 1990b). En el juego de alto nivel se realizan de 900 a 1000 acciones por partido, siendo de ellas 350 pases a 1 toque, 150 pases a 2 toques, y el resto con muchos toques y después de conducciones. Los equipos ganadores realizan mas eficientemente y eficazmente pases, recepciones, tiros, conducciones, es decir con una mejor ejecución técnica y con mayor precisión. Se necesitan un promedio de 16 a 30 ataques con 7-10 tiros a puerta para conseguir un gol. El ataque que produce gol necesita menos de 25 seg. para su finalización, e intervienen de 2 a 6 jugadores y de 1 a 6 pases. El promedio de cada acción con balón es de 1 segundo, y se ha comprobado que la comprensión del juego en un equipo ganador es mayor que en el perdedor. Esto tiene una exigencia muy alta para que durante el tiempo efectivo de juego se ejecuten las acciones con gran intensidad y concentración, lo que debe traducirse como una gran dureza psicológica y agresividad mental para obtener el triunfo.

En los equipos juveniles e infantiles la eficacia y eficiencia en la competición esta determinada por la edad, las capacidades físicas, las capacidades psicomotrices (la capacidad coordinativa general y especifica), el placer por el juego y la comprensión táctica del juego. La conclusión de estudios previos nos señalan como características de los equipos ganadores los desmarques permanentes, movilidad constante, apoyos, ayudas, la inteligencia táctica, comprensión del juego y placer por el juego que resultan en una calidad técnica con mayor precisión en pases, tiros, controles y conducciones, resultantes de adecuada capacidad coordinativa especifica.

Durante la Copa del Mundo de 1974 en Alemania, Kuhn/ Maier (1978) y Jaschok/ Witt (1976) realizaron interesantes estudios que aportaron los siguientes datos: duración efectiva del juego, interrupciones del juego, tiempo de las interrupciones, el recorrido del jugador, numero y duración de los contactos con el balón y tipos de contacto.

La duración media de estos partidos fue de 59 minutos y 20 segundos, según esto el balón no esta en juego 30 minutos de los 90. Actualmente los partidos de 1ª división de la Liga Española tienen una duración efectiva aproximada de 45 minutos.

La distancia recorrida durante los partidos ha sido ampliamente estudiada y varia de un autor a otro, donde se menciona también el Nº de sujetos y el método utilizado (Fig. 3)

Figura 3. Extraído de Football (Soccer) de Björn Ekblom
*En el caso de Vinnai se citan estudios rusos de futbolistas en competición;
la falta de información acerca de la metodología utilizada nos lleva
a considerar con reservas los 17 km reflejados en su estudio.
Fuente N° de sujetos estudiados Distancia cubierta Método utilizado
Knowles & Brooke (1974)
40
4.834 m
Anotación manual
Reilly & Thomas (1976)
40
8.680 m (± 1011)
Vídeo grabadora
Ekblom (1986)
10
9.800 m
Anotación manual
Agnevik (1970)
10
10.200 mts.
Película de cine
Bangsbo et al. (1988)
14
10.800 m
Vídeo (4 cámaras)
Saltin (1973)
9
10.900 mts.
Película de cine
Vinnai (1973)*
?
17.000 m
Desconocido


7. La Anticipación
El fútbol es altamente exigente en cuanto a niveles de coordinación, destreza y habilidad técnica en la ejecución de las acciones, siempre acompañado de grandes dosis de precisión; la necesaria velocidad de ejecución nos lleva a disponer en la mayoría de los gestos de velocidad mental o rapidez como elemento imprescindible para la eficacia en las acciones individuales y colectivas. La anticipación es una conducta básica en el desarrollo del juego y precisa de la concentración mental, una adecuada localización según la situación del móvil, compañeros y adversarios, el desarrollo de la atención selectiva, velocidad gestual y de velocidad de reacción simple y compleja; es en definitiva leer la jugada antes de que esta se produzca. Quien no posea estas cualidades difícilmente llegue a ser un buen futbolista.


8. La Estrategia
La estrategia motriz presenta niveles variables dependiendo del tipo de competición, momento y ubicación del futbolista durante el juego, tipo de adversario, etc., pero por lo general tiene un nivel bastante alto. La característica del fútbol como deporte sociomotor esta supeditada a la presencia del contrincante, con una meta fija en el terreno de juego que debe ser atacada para conseguir marcar el gol superando los obstáculos que presentan los adversarios a través de una oposición inteligente. En este apartado es cuando se determina porque las Conductas de Decisión tienen mayor predominancia sobre las Conductas de Ejecución. Es importante la sincronización espaciotemporal que debe existir entre el dominio y manejo del balón para alcanzar la finalidad perseguida que es marcar el gol. Aparece el Pase como fundamento principal de la Estrategia Motriz, ya que su ejecución establece un vinculo de relación entre pasador y receptor que es necesario saber interpretar, aun antes de que este se produzca. De cualquier forma no es igual realizar un pase con la mano o el pie, como tampoco lo es un pase a corta distancia que un cambio de orientación de 30 ó 40 metros. El mismo se dificulta aun más si en el momento de realizarlo se recibe una carga o el jugador esta siendo acosado por uno o varios adversarios. A esto debemos sumar la dificultad añadida que se produce a medida que nos acercamos a la meta adversaria con una densidad mayor de jugadores de ambos bandos, con una meta a ras del suelo protegida por una barrera de defensores que alcanzan su objetivo con solo despejar, rechazar, o golpear y alejar el balón de las cercanías de la misma.

Estos motivos dificultan de manera significativa la estrategia que se pretende poner en practica durante un partido de fútbol y que la misma alcance su objetivo de manera eficaz. Por estos motivos, el comportamiento del futbolista inteligente le lleva a desarrollar un comportamiento táctico individual que armonice con el resto del equipo, y adaptándose a las variaciones del juego desarrollen la táctica colectiva. Esta permitirá un análisis global de la situación en todo momento, teniendo en cuenta la ubicación del balón, compañeros y adversarios. Esta lectura del juego permanente dotara al futbolista de elementos de análisis para la toma de decisiones que llevara a cabo en funcion de su movilidad en el campo. Esta capacidad es muy importante en la detección del talento, ya que a la hora de evaluar su capacidad de juego eficaz tendremos en cuenta 1º su capacidad de decisión y 2º su nivel de ejecución para considerar al jugador válido o no, aunque podríamos afirmar que la Capacidad de Decisión condiciona enormemente el segundo factor. Dentro de un orden de capacidades entrenables y de aprendizaje podemos considerar que la capacidad de ejecución es mejorable y más susceptible de perfeccionamiento que la Capacidad de Decisión. Por lo tanto debemos considerar la importancia en la selección de futbolistas talentosos que presenten buenos niveles decisorios.

La Capacidad de Decisión es un concepto eminentemente táctico y la Capacidad de Ejecución es mas bien un constructo fisico-tecnico. A la hora de evaluar el comportamiento estratégico inciden todos los parámetros que determinan el desarrollo de la acción de juego, comprendiendo por tales al reglamento, la técnica, los parámetros espaciotemporales, y la comunicación. Los roles sociomotrices incluidos dentro del campo estratégico están representados por las acciones de ataque y defensa. Estas acciones son de una gran dificultad en lo que respecta a las decisiones que toma el jugador, tanto en las acciones individuales como colectivas, en ataque estando en posesión del balón o sin él, y en acciones defensivas intentando recuperarlo. Desde el punto de vista colectivo las actuaciones estratégicas vendrán definidas por las distintas fases del juego que a nivel general coincidirán con las fases del jugador individual, el atacante y la defensa.


9. El Jugador y el Equipo
El rendimiento de cada jugador queda decisivamente marcado por el transcurso del partido, la dirección por parte del arbitro y sus asistentes, por el equipo contrario, publico, etc. En cada momento, aspectos aparentemente secundarios pueden modificar temporalmente a los otros factores. El jugador con su rendimiento constituye el elemento fundamental del rendimiento del equipo en el partido; por ello su estructura ocupa el lugar central y predominante en los ámbitos potenciales de rendimiento a causa de las exigencias complejas del juego. Cada uno de estos ámbitos tiene su propia estructura múltiple formada con diferentes factores. Son los llamados Factores que contribuyen al Rendimiento Complejo del jugador mencionadas por Bauer y Ueberle (1988), y que su entrenador y el mismo deben conocer para alcanzar la mejora y perfeccionamiento sistemático a largo plazo:

  1. Nivel de desarrollo positivo de las características generales de la personalidad.

  2. Capacidad de jugar y rendir como resultado de:
    • Nivel de rendimiento tecnomotriz (condición física, técnica, táctica).
    • Capacidad de juego.
    • Factores hereditarios (constitución, talento).

  3. Disposición para jugar y rendir como resultado de:
    • Motivaciones y necesidades.
    • Postura frente a normas y valores.

  4. Condicionantes marginales de las características personales de los jugadores.

  5. Interrelaciones óptimas entre los factores mencionados anteriormente.
El rendimiento del equipo coincide muy raras veces con la suma del potencial de rendimiento de cada jugador individualmente. Dependiendo si los jugadores se complementan en sus efectos, el rendimiento del equipo puede ser mayor o menor a la suma de sus integrantes. En este sentido, la presencia del jugador que desempeña el papel de líder puede multiplicar o potenciar la disposición y capacidad para el rendimiento de sus compañeros. O sea que el equipo esta sujeto a procesos dinámicos de grupo, y no se puede abarcar con formulas matemáticas como la suma de la calidad de sus individualidades. Equivocadamente se tienen en cuenta muchos elementos a la hora de analizar el rendimiento individual y colectivo partiendo indirectamente del modelo matemático de la suma o resta; se debe tener en cuenta que el desarrollo de un partido y los factores condicionantes no se pueden cuantificar matemáticamente ya que el efecto que producen ciertas cualidades destacables pueden quedar eliminadas por fallos en otros ámbitos del rendimiento.


10. La Comunicación
En el fútbol, como en la mayoría de los deportes de equipo, se producen redes de comunicación y contracomunicacion complejas y bastante evolucionadas. A través de la comunicación verbal y no verbal nos relacionamos con nuestros compañeros y adversarios, ya sea por medio de la comunicación verbal o motriz. La comunicación motriz es muy importante, ya que el futbolista debe saber interpretar en todo momento las acciones y gestos que realizan sus compañeros y adversarios con el objetivo de hallar la solución táctica al problema y ejecutarla de manera eficaz. Encontramos en el fútbol además de los gestos universalizados realizados por los árbitros los que hacen los jugadores dentro de sus respectivos equipos. Hallamos en este contexto una gama completa de gestemas propios y secretos que se utilizan para designar acciones, jugadas, pedir el balón, anunciar su pase, defender o cubrir al compañero, etc.

Podemos considerar al fútbol como una actividad de carácter sociomotriz, donde predomina la comunicación práxica esencial y directa (cooperación/oposición) y la comunicación práxica indirecta (gestémica y praxémica) con escasas situaciones psicomotrices.


11. La Técnica y la Táctica
De acuerdo con lo que hemos visto hasta el momento, el planteamiento estratégico es sumamente importante. Ahora, cuando debemos poner en practica una serie de principios y conceptos a través de acciones motrices por medio de la Capacidad de Ejecución nos adentramos en el campo de la Técnica. Muchas veces se sobrevalora la importancia de los fundamentos técnicos sobre otras facetas del juego, sobrestimando su valor real ya que la técnica tiene importancia como medio al servicio de la decisión táctica y estratégica que se pretende alcanzar, pero que no tiene ningún sentido por sí sola. Esto se debe a que al estar incluida en un contexto estratégico, el jugador necesita decidir constantemente como consecuencia de la observación sistemática del juego, y en funcion de su decisión mental optara por el recurso técnico adecuado para llevar a cabo en el juego la solución ideal del problema presentado. A partir de esta visión funcional del juego podemos determinar la importancia que tiene la enseñanza y perfeccionamiento de la técnica al servicio de la inteligencia motriz del jugador y su capacidad de decisión, factores que se tienen olvidados y que no se trabajan con la intensidad y profundidad necesaria en la mayoría de los casos.


12. Aspectos del Comportamiento Táctico
El futbolista debe conocer y ser consciente en todo momento de aquellos aspectos del comportamiento táctico y técnico que favorecerán su máximo rendimiento con un menor esfuerzo; estos principios permiten, favorecen y facilitan las posiciones iniciales y finales, siendo la base adecuada para los desplazamientos tácticos individuales y colectivos. Los analizaremos a continuación:

  1. Actitud
    • Tensión Máxima: ante situaciones próximas y que afectan la intervención directa durante el juego.
    • Tensión Mínima: cuando las acciones se desarrollan lejanas a nuestro campo de acción y permiten la recuperación.
    • Actitud de Base o Expectante: situaciones cercanas que exigen una respuesta de actuación en mínimo tiempo posible.

  2. Colocación adecuada
    • Respecto al balón, los compañeros y adversarios.

  3. Los desplazamientos
    • Un buen desplazamiento será aquel que mantenga al futbolista en todo momento en la posición más favorable en cuanto a Colocación y Actitud.
13. Conclusiones
A través de todos los elementos y factores analizados podemos mencionar aquellos comportamientos más destacables, y que consideramos van a diferenciar al futbolista talentoso del jugador de fútbol. Todo esto puede verse facilitado en mayor o menor medida por variables situacionales, pero nuestra finalidad es detectarlos y desarrollarlos a través de un comportamiento técnico-táctico exquisito, ejecutado eficazmente de acuerdo a la exigencia de la competición y en presencia de una capacidades especificas estables. Todo esto deberá ser puesto en practica en el futuro a pesar del entorno hostil, situaciones adversas deportivas y extradeportivas, o aspectos facilitadores y perjudiciales que no deberían afectar el rendimiento global del futbolista.

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Año 4. Nº 14. Buenos Aires, Junio 1999