efdeportes.com
¿Cómo entrenaba ‘Jesse’ Owens’?

 

Prof. de Educación Física

Entrenador Nacional de Atletismo

(Argentina)

Jorge de Hegedüs

jhegedus@uolsinectis.com.ar

 

 

 

 

Resumen

          Su hubo un deportista que prácticamente enloqueció positivamente al público alemán en los Juegos Olímpicos de Berlín (1936) fue el atleta afro americano James Cleveland "Jesse" Owens. Los germanos no lo despreciaron en absoluto por ser de raza “negra”, contrariamente a lo sostenido por la prensa mal intencionada. Este gran velocista prácticamente “batió” un récord mundial: la de firma de autógrafos. Constituyó un privilegio el tener una firma que dijera Jesse Owens. Además, y esto hay que destacarlo, se hizo de un gran amigo, de un “ario” rubio, el saltador de longitud germano Lutz Long. Este último, inclusive, le ayudó en plena competencia hacer un ajuste en la salida para el salto en longitud, y en donde este brillante atleta obtuviera finalmente la victoria: 8.06 metros. Owens en esos Juegos logró nada menos que cuatro medallas de oro. Pero sentimos curiosidad sobre cómo se entrenaba.

          Palabras clave: Jesse Owens. Técnica. Soltura. Partidas. Pasadas.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 17, Nº 173, Octubre de 2012. http://www.efdeportes.com/

1 / 1

    En los técnicos deportivos, especialmente a los pertenecientes al campo del atletismo, se ha despertado la curiosidad en cuanto a cómo se entrenaba Jesse Owens. Recordemos que este atleta poseyó en su momento varios récords mundiales: 10.2 para los 100, 20.3 (en recta) y 20.6 (con curva) en los 200 metros.

    Su entrenador fue Larry Snyder, quien tuvo a su cargo también a los atletas pertenecientes a la Universidad del estado de Ohio.

    El aspecto que sobresale en la metodología de este “coach” con relación a Jesse, era: lograr más alta frecuencia de movimientos, los cuales debían ser debidamente controlados para lograr la mayor soltura posible. Snyder reconocía que una masa muscular en constante tensión no puede tener buena reacción ni contraerse con la suficiente velocidad. Inclusive Owens debía desplazarse a la mayor velocidad posible aún en el tramo final de una carrera de 100 yardas o metros, sin “crisparse” de manera innecesaria.

Larry Snyder (1896 – 1982), entrenador de Jesse Owens

    En este aspecto básico de las carreras de velocidad, Owens fue en su época un verdadero ejemplo en cuanto a desplazarse con soltura. Todos los que tenemos a nuestra disposición el film de los Juegos Olímpicos de Berlín, lo podemos apreciar cabalmente y, también con relación a sus rivales de la final de los 100 metros.

Jesse Owens en una partida y practicando el pasaje de las vallas

Aspectos técnicos del entrenamiento de Owens: las partidas

    En el entrenamiento de este velocista se daba mucho acento a la partida, a la técnica de la “salida”. Owens realizaba gran cantidad de las mismas con (inclusive con tiro de pistola), y sin comando. En este último caso Owens debía partir por sí mismo. Además, Snyder se las exigía desde distintas posturas. En todos los casos las salidas debían de realizarse con mucha soltura, con la correspondiente tensión muscular para el gesto técnico: ni de más ni de menos. Además Owens hacía partidas sobre la marca de la línea que dividía los andariveles. Con ello se buscaba el desplazamiento recto hacia el frente. La visión sobre la línea era una buena referencia para ello.

    En el caso de realizarse las partidas con comando, como ser con el tiro de pistola, se procuraba unir el mismo con un desplazamiento relativamente largo, es decir, un trecho de unas 50 yardas (45 metros). Cuando se trataba de estas partidas con estas características, la distancia nunca debía ser menor, ni tampoco frenarse después de haberse logrado dicho trecho; todo lo contrario, se tenía que dejarse “llevar” como por inercia varios metros más.

Owens con su amigo y “rival” ocasional en 

el salto largo (=longitud) el germano Lutz Long

Características del entrenamiento para la carrera en sí, las distancias

    Según el entrenamiento de Owens, el mismo fue programado de tal forma, como para capacitarse para correr también los 400 metros. En ese sentido Snyder llegó a expresar que “el velocista debe garantizar también buenos registros en los 400 metros”. Debido a esta postura, Owens también llegaba a correr durante sus entrenamientos, la distancia de las 300 yardas (274 m). Sin emplearse “a fondo” este atleta lo llegaba a realizar en 29.5 seg. Esto significaba un pasaje por los 100 metros en 10.7 segundos (¡!). Esto lo realizaba Owens varias veces. En el caso de correr estos trechos relativamente largos, siempre lo hacía utilizando el comando con tiro de pistola. ¿Cuál era el objetivo en este tipo de trabajo? La resistencia de velocidad

    Este atleta también desarrollaba varias veces distancias que oscilaban entre las 75 y 180 yardas (entre 68 y 163 m). Estos trechos los recorría a elevada intensidad. Según las circunstancias, las repetía entre tres y cinco veces. Obviamente aquí se aprecia un trabajo que tenía como meta el desarrollo de la velocidad “pura”.

    Snyder destacaba en ese sentido que durante el período competitivo, Owens participaba en varias disciplinas: salto largo, carreras con y sin vallas. Por esta causa durante el este período trabajaba relativamente poco durante las correspondientes semanas.

    Otra de las técnicas de trabajo en este “antílope de ébano” era las carreras en “progresión”: recorrer un determinado trecho, comenzando de manera relativamente lenta y paulatinamente incrementar la velocidad de desplazamiento, hasta llegar a elevada intensidad en el tramo final.

Saltabilidad

    Con la finalidad de trabajar la capacidad de salto –recordemos que Owens era nada menos que récord mundial en el salto largo con 8.13 metros− realizaba salto alto y largo sin impulso, con pocos pasos y con carrera más prolongada. De acuerdo a los datos de Snyder, durante el período competitivo, Owens no realizaba más de tres a cuatro entrenamientos con carrera completa, a máxima velocidad, para tomar la tabla.

    La excelente saltabilidad que tenía este gran deportista le posibilitó ser también un buen saltador de alto, con un registro de 1.98 metros –con la técnica del “western roll”−.

    A esta altura y de forma especulativa, nos preguntamos los logros que habría tenido Owens con las metodologías actuales de entrenamiento. Recordemos que en ese entonces no existían los “tacos” de partida como en la actualidad: el atleta debía de cavar pequeños pozos para el apoyo de sus pies. Esto era posible debido a que no se corría sobre sintético, sino sobre carbonilla, y algo más adelante sobre polvo de ladrillo. El material sintético posibilita un mayor “agarre” para el apoyo de los pies. Además, los trabajos complementarios de la carrera se reducían prácticamente sobre algunos ejercicios de elongación y nada más. No se practicaba la musculación mediante pesas como en los días actuales. Ello se puede apreciar en la estructura muscular que tienen los velocistas de actualidad. Recordemos que Owens tenía una estatura de 1.78 y un peso de competencia en los 75 kilos. Los velocistas de la actualidad, con esa estatura pasan cómodamente los 80 kilos debido a la imponente masa muscular que desarrollan debido a los trabajos sistemáticos de musculación.

    Podemos estar seguros que el rendimiento de Owens en las condiciones modernas, le hubiera posibilitado correr los 100 metros cómodamente por debajo de los diez segundos, y en el salto largo por encima de los 8.50 metros.

Referencias

Otros artículos sobre Atletismo | Historia

de Jorge de Hegedüs

  www.efdeportes.com/
Búsqueda personalizada

EFDeportes.com, Revista Digital · Año 17 · N° 173 | Buenos Aires, Octubre de 2012
© 1997-2012 Derechos reservados