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La velocidad: factores, manifestaciones, 

entrenamientos para niños y su evaluación

 

Diplomado en Magisterio de Educación Física

Universidad de Las Palmas de Gran Canaria

(España)

Pablo César Martín Quintana

pablomqc@hotmail.com

 

 

 

Resumen

          La velocidad es una capacidad muy interesante ya que presente cualquier deporte y en algunos casos es imprescindible, como es el caso del atletismo. Cierto es que todas las capacidades físicas son importantes, pero todos los deportes poseen algún tipo de velocidad, ya sea velocidad física, psíquica o biológica.

          Palabras clave: Velocidad. Capacidades físicas. Educación Física.

 
http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 14 - Nº 131 - Abril de 2009

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1.     Introducción

    Cierto es que todas las capacidades físicas son importantes, pero desde mi punto de vista, todos los deportes poseen algún tipo de velocidad, ya sea velocidad física, psíquica o biológica. Sin embargo, existen deportes en los que quedan exentas algunas capacidades físicas, como es la resistencia en salto de trampolín. Por esta razón la velocidad es una de las capacidades más importantes a tener en cuenta en el deporte.

2.     Definición

  • Según Dick, la velocidad es la capacidad de movimiento de una extremidad o de parte del sistema de palancas del cuerpo, o de todo el cuerpo con la mayor velocidad posible.

  • Según Mora, es la cualidad física que permite realizar acciones motrices en el menos tiempo posible.

3.     Factores de la velocidad

  • Hay muchos autores como; Dick, Forteza, Grosser, Platonov y Bompa, que coinciden en que algunos de los factores más importantes de los que depende la velocidad son: la elasticidad, la bioquímica, la fuerza de voluntad, la inervación, dominio de la técnica y el tiempo de reacción. A continuación, describo lo que piensan estos autores sobre estos factores.

    • Elasticidad: la capacidad para capitalizar sobre el tono muscular mediante el componente elástico del músculo, tiene aplicación en aquellos deportes que exigen una alta aceleración de arranque o un “ataque rápido”.

    • Bioquímica: la velocidad del individuo está básicamente en función de las reservas de energía de la musculatura implicada en el esfuerzo y de su rapidez de movilización.

    • La fuerza de voluntad: el atleta debe concentrarse sobre el esfuerzo voluntario máximo para alcanzar la velocidad máxima.

  • Platonov la denominó como, la aptitud para concentrar la mente al máximo.

  • Forteza, no nombra este factor.

    • La inervación: una alta frecuencia de alternancia entre las neuronas de excitación y de inhibición, y una cuidadosa selección y regulación de unidades motoras, hacen posible el alcanzar una alta frecuencia de movimiento, junto con una óptima expresión o despliegue de la fuerza.

  • Bompa no nombra este factor.

    • Dominio de la técnica: dominio de la técnica en movimiento.

  • Dick no menciona este factor.

    • Tiempo de reacción.

      • Dick y Forteza aparte de estar de acuerdo con los ya mencionados, también nombra un factor más; relajación muscular.

    • Relajación muscular: la capacidad de los músculos para relajarse y para permitir estirarse en los ejercicios de velocidad, es fundamental para una técnica perfecta y para una alta frecuencia de movilidad.

4.     Manifestaciones de la velocidad

    Cuando tratamos de analizar las variadas formas en que se manifiesta la velocidad en el deporte verificamos que en ocasiones empleamos conceptos similares para definir situaciones diferentes, dificultando su estudio de forma estructurada. De entre las numerosas situaciones contradictorias que se presentan, encontramos algunas que por su importancia merece la pena analizar con mayor profundidad.

    Según Frey (1977), la rapidez es la capacidad de los procesos neuromusculares y de la propia musculatura, para realizar una acción motora en un mínimo tiempo. Martín Acero (1994) la defina como aquella característica que permite mover rápidamente, libres de sobrecarga, uno o más elementos del cuerpo. Dentro de la rapidez nosotros nos inclinamos por distinguir dos aspectos, que juntos configuran lo que Zatziorski (1989) denomina tiempo de ejecución: Tiempo de reacción motora y la velocidad de un movimiento simple. Siguiendo a García Manso, Navarro y Ruíz (1996), la relación entre las diferentes manifestaciones de la velocidad sería:

* A continuación explicaré cada uno de los apartados:

Rapidez

    En la rapidez se engloba, por un lado, el reconocimiento de la situación, la elaboración de la respuesta y la orden del movimiento más eficaz, y por otro lado, la ejecución de un movimiento simple en el mínimo tiempo.

Tiempo de reacción

    También llamada velocidad de reacción. Tradicionalmente, el TR se define como el tiempo que transcurre entre el inicio de un estímulo y el inicio de la respuesta solicitada al sujeto. Podemos hablar de dos tipos diferentes de tiempo de reacción: el tiempo de reacción simple y el tiempo de reacción discriminativo.

a.     Tiempo de reacción simple (Trs). El tiempo de reacción simple es el tiempo que separa una excitación sensorial de una respuesta motriz que el sujeto ya conoce de antemano. Éste implica una respuesta única a un estímulo ya conocido (el disparo del juez de salida en una prueba de velocidad). Según Zaziorski, el TR se divide en cinco fases:

  • Refiriéndonos, también, al tiempo de reacción, se ha comprobado que el tiempo de reacción depende de:

    • La edad; es menor el tiempo de reacción entre los 18 y 25 años.

    • El sexo; en las mujeres es mayor.

    • La estatura; cuánto mayor altura, más largo es el tiempo de reacción.

    • Los factores psicológicos contextuales; grado de atención, la activación, apetito, sueño, cansancio, temperatura del cuerpo, motivaciones, disposición, etc.

    • Las personas que practican deporte, tienen un tiempo de reacción más corto que los otros que no lo practican, de una misma edad.

b.     Tiempo de reacción Discriminativo

    El TR discriminativo es una variante del tiempo de reacción que se manifiesta continuamente en la actividad física. Hay ocasiones, en el mundo del deporte, en que el sujeto debe reaccionar a diferentes tipos de estímulos (auditivos, visuales, kinestésicos) y, por lo que es más importante, debe elegir entre diferentes tipos de respuestas posibles con el fin de utilizar la más idónea para alcanzar el máximo rendimiento deportivo. Este es el caso de los practicantes de los deportes de cooperación-oposición.

Tiempo de movimiento

    A continuación del TR se produce el tiempo de movimiento, que es el tiempo transcurrido desde el inicio de la respuesta motora hasta el final de un desplazamiento simple solicitado al sujeto. Grosser (1992) lo define como la capacidad de realizar movimientos acíclicos, como por ejemplo, el golpeo en tenis, una acción es esgrima, etc. Normalmente se entiende que son aquellos movimientos desarrollados, de forma aislada, contra resistencias poco importantes y ejecutadas a la máxima intensidad.

  • El método de trabajo más eficaz para esta cualidad es la propia competición, pues de esta forma se ejecutan a la máxima intensidad y además, se evitan estereotipos motrices.

    Matveiev (1981) sugiere el siguiente procedimiento para debutantes:

  • Desarrollar las técnicas deportivas.

  • En segundo lugar, desarrollas la velocidad correcta de ejecución, evitando caer en estereotipos. Este aspecto se logra mediante la facilitación de la ejecución.

  • En tercer lugar, aprovechar el hecho contrastado que permite ejecuciones técnicas veloces en condiciones estandarizadas, si anteriormente estas se realizan en condiciones dificultadas.

  • En cuarto lugar, realizar acciones técnicas con reducción del espacio de acción y/o limitación temporal.

Velocidad de movimientos complejos

    Desde el punto de vista físico, la velocidad es el espacio recorrido en un período de tiempo determinado. La velocidad supone encadenar una serie de movimientos, ejecutados cada uno de ellos a la máxima rapidez. No obstante, el hecho de realizar un recorrido en el menor tiempo posible es determinante de una gran eficacia deportiva. Tampoco podemos olvidar que en la velocidad actúan, además de la rapidez y la técnica, la resistencia a esfuerzos de máxima intensidad. Es decir, desde el punto de vista fisiológico, también depende, fundamentalmente, de la capacidad anaeróbica aláctica y, en menor medida, de la potencia anaeróbica láctica, según el tipo de movimiento a que nos estemos refiriendo. Pero a la hora de hablar de velocidad debemos distinguir dos manifestaciones claramente diferenciadas y no necesariamente interdependientes, como ya he nombrado en el esquema inicial: la velocidad de movimientos cíclicos y la velocidad de movimientos acíclicos.

  • Velocidad de movimientos cíclicos: también se les conoce como velocidad frecuencial, frecuencia de movimiento, coordinación-velocidad o velocidad de base. Depende de factores psíquicos (anticipación, voluntad, concentración), factores neuronales (reclutamiento, frecuenciación, capacidad de excitación-inhibición, velocidad de conducción de los estímulos, inervación previa), componentes músculo-tendinosos (tipo de fibras, velocidad contractil del mús-culo, viscosidad, temperatura de los músculos, elasticidad), nivel técnico.

  • Velocidad de movimientos acíclicos: La otra gran manifestación de velocidad es la que hace referencia a movimientos acíclos. Es decir, movimientos diferentes encadenados y desarrollados con la máxima rapidez. Mientras que en los movimientos cíclicos el acento en el rendimiento se situaba en el nivel de desarrollo de las capacidades condicionales, en los movimientos acíclicos el acento se sitúa en las capacidades coordinativas y en la toma de decisión.

    Como variantes de la velocidad de movimientos acíclicos en deportes de estas características podemos hablar de las siguientes:

    El entrenamiento de la velocidad de movimientos acíclicos va unido al nivel de dominio de las técnicas de cada modalidad deportiva, de la experiencia necesaria para abordar planteamientos tácticos individuales o colectivos. Dos aspectos condicionantes destacan al analizar la velocidad acíclica: la velocidad máxima potencial que cada deportista posee sobre los gestos técnicos (velocidad del jugador), y la velocidad idónea de juego en función del desarrollo táctico de la acción (velocidad del equipo). Respecto al primer término, velocidad del gesto técnico, Martín Acero (1995) distingue dos factores determinantes de la eficacia de acción (del acto motor rápido): los energéticos; la producción y utilización de energía y la fuerza como elemento transmisor de energía en los gestos específicos, y los informacionales; sensación y percepción del movimiento, control y regulación de la acción, coordinación y técnica. En el segundo aspecto, velocidad del equipo, es fundamental en los deportes de colaboración-oposición, aquí aspectos como la atención selectiva, el análisis de la información y la toma de decisión adquieren una importancia mayor sobre los aspectos de condición física.

    Los ejercicios que nosotros empleemos en los trabajos de estas características deberán cumplir requisitos similares a los que se emplean para el entrenamiento del tiempo de movimiento, independientemente de la acción mecánica predominante en el gesto:

  • Ejecutarse a alta intensidad.

  • Ser de corta duración.

  • No deben utilizarse cargas adicionales elevadas.

  • La recuperación no necesita ser completa entre cada repetición.

  • Utilizar acciones iguales o similares a las de competición.

    En la velocidad acíclica, al igual que ocurría con la velocidad en movimientos cíclicos, debemos distinguir distintas manifestaciones o fases de la misma. La aceleración, la máxima velocidad o la resistencia a la velocidad en movimientos acíclicos son aspectos relacionados con los movimientos de máxima velocidad.

Velocidad de desplazamientos

    Es la capacidad de recorrer una distancia en el menor tiempo posible. El factor fundamental de la que depende es de la técnica de la carrera. La carrera supone una serie de autoprotecciones del cuerpo, en el transcurso de las cuales los distintos segmentos del cuerpo se desplazan de un modo sincrónico, gracias a la acción del balanceo de los brazos que describen un arco amplio en un plano vertical-oblicuo, y opuesto a la acción de las piernas, coincidiendo aceleraciones de determinadas partes del cuerpo con desaceleraciones de otras partes, a fin de que el ritmo de la carrera sea el óptimo. También, al margen de la técnica de la carrera, otros factores que van a influir en la velocidad de desplazamiento son los siguientes:

  1. Amplitud de zancada: la cual, a su vez, depende de …

    • el poder de impulsión o “detente” (acción instantánea de la potencia muscular en el mínimo tiempo:

    • la flexibilidad (elasticidad muscular y movilidad articular).

  2. La frecuencia o velocidad de movimientos segmentarios, la cual depende…

    • de la fuerza.

    • de la flexibilidad.

    • del dominio de la técnica.

  3. Relajación y coordinación neuromuscular. Es importante la distribución adecuada de la fuerza y hacer trabajar solamente a los músculos necesarios. “La velocidad máxima sólo puede lograr si se trabajan solamente los músculos necesarios que contribuyen a un desplazamiento lo más rápido posible. (Toni Nett).

    En la velocidad de desplazamiento hay que considerar también otros aspectos, como:

Velocidad de aceleración

    “Capacidad para conseguir la máxima velocidad en el menor tiempo posible, ya sea partiendo de velocidad u otra dada, comprendería la fase que va desde la salida hasta aproximadamente los 30 ´0 40 metros”. (Lizaur, Martín y Radial, 1989, 72).

Velocidad Máxima

    “Capacidad de mantenimiento de la misma una vez conseguida, no se puede mantener más allá de 50 metros ó 6 segundos, y esto sólo en caso de atletas muy entrenados. Serían los metros recorridos entre los 30 ó 40 a los 80”. (Lizaur, Martín y radial, 1989,72).

5.     Entrenamiento de la velocidad en niños

    Al igual que ocurre con las otras cualidades condicionales, la velocidad se encuentra influenciada por el desarrollo biológico y el crecimiento, aunque es una cualidad que se encuentra altamente influenciada por el potencial genético que posee el sujeto. Conocida es la frase “el velocista nace, no se hace”, la cual es cierta en un alto grado de ocasiones.

    Algunos aspectos de la velocidad son mejorables desde edades muy tempranas, como son los casos del tiempo de reacción y la frecuencia de movimiento, al estar estos aspectos ligados a la maduración del sistema nervioso, y no a otros aspectos funcionales. No olvidemos que entre los 8 y los 10 años se alcanzan valores similares a los de los adultos. La enorme plasticidad que tiene el SNC en esas edades, incluso durante la edad prepuberal, hace que esta etapa sea especialmente interesante para el entrenamiento de la velocidad. Los tiempos de reacción y la frecuencia de movimiento alcanzan los mismos valores que en el adulto al final de la pubertad.

    No ocurre lo mismo cuando hablamos de los aspectos de la velocidad que dependen de la fuerza (especialmente la fuerza máxima) y de la resistencia, tal y como se explica en los apartados que hacen referencia a estas cualidades. Debemos tener presente que el futuro de un deportista en modalidades en las que predomina la velocidad pasa necesariamente por un trabajo específico desde edades muy tempranas, lo que nos obliga a no descuidar su preparación desde las primeras fases de la formación del deportista. Grosser (1992) propone la siguiente evolución de la velocidad:

7-9 años

Incremento de la velocidad de reacción y la velocidad frecuencial sin variación respecto al sexo.

9-12 años

Se produce una fase sensible de la velocidad de reacción y de la velocidad frecuencial, y en parte también de la velocidad de movimiento.

12-15/17

Al principio de la fase: fuerza-velocidad (H-M) con resistencias medianas.

Al final de la fase: fuerza-velocidad con resistencias mayores. Mejora de la resistencia de la velocidad máxima.

15/17-17/19

Se elevan: velocidad de base (H-M), fuerza-velocidad y resistencia de la máxima velocidad

6.     Evaluación de la velocidad

Los tests propuestos por Gerard Lacroix

    Estos tests son fáciles de desarrollar en la práctica y muy interesantes para los deportes colectivos.

1.     Estimación del tiempo sobre 100 metros

    Éste es un medio simple para estimar el tiempo “potencial” de un alumno sobre 100 metros. Se toma el tiempo de 10 metros lanzados (15 metros para lanzarse) y se multiplica por 10.

    Tiempo estimado sobre 100 metros = t x 100.

    Si el tiempo se toma manualmente, sea ajustará 24/100 para obtener el tiempo eléctrico.

2.     Amplitud y frecuencia

Con el fin de orientar el entrenamiento hacia la amplitud o la frecuencia, el autor propone dos protocolos:

  • Evaluación en “amplitud”:

Consecuencias para el entrenamiento

    Los dos tiempos realizados (amplitud y frecuencia) deben ser muy similares, y si se constata que el atleta tiene mejor rendimiento en amplitud (si tiene mejor tiempo en amplitud), sobre todo debe de entrenar la frecuencia.

3.     Los multisaltos

    En la misma filosofía que Conato, Lacroix propone medir la “fuerza específica” del velocista gracias a los multisaltos sobre una distancia y su medición.

Protocolo

Sobre una distancia de 28 metros (más 10 metros para lanzarse) efectuar el mínimo de multisaltos en el menor tiempo.

► Test de velocidad con multisaltos.

Resultados

    Se efectúa el producto de “número de zancadas” por “tiempo realizado”. Si el atleta efectúa 10 zancadas en 4 segundos, el producto será 40. Si realiza 11 zancadas en 3.80 segundos, el producto será de 41.80. Se trata de obtener el producto más pequeño.

Los test de la “escuela italiana” de velocistas

    Son los utilizados por los italianos para los velocistas seleccionados por Carlo Vittori:

  • Test con la plataforma de Bosco.

  • Test de frecuencia.

  • Test de multisalto.

1.     Test con la plataforma de Bosco

    Los tests considerados como interesantes son el squat jump (SJ), el contramovimiento (CMJ), y el contramovimiento con ayuda de los brazos (CMJB).

2.     El contramovimiento con ayuda de los brazos

    La modalidad es la misma que para el test preferente, pero los brazos son utilizados como un movimiento hacia delante y arriba para aumentar la fuerza de las piernas.

3.     El índice de Vittori: El test precedente (CMJB) es la manifestación de la fuerza de los cuadriceps y de la acción de la rodilla.

    Este resultado se compara con el del test de la reactividad.

    El test de la reactividad consiste en realizar 6 multisaltos sobre la plataforma de contactos, son los brazos libres, y casi sin ninguna flexión de rodillas y una intensa activación de los tobillos. La plataforma de contactos da la media de los seis altos.

4.     Los test de Bosco – Vittori

    Para comparar las especialidades deportivas (aquí la velocidad) Bosco y Vittori adaptaron el test de potencia con el ergojump sobre un desplazamiento introduciendo una s vallas. En la figura se describe el test. Para efectuarlo necesitamos una plataforma de contacto larga de 7.50 metros. El atleta siempre debe saltar las vallas con los pies juntos y con la mayor elevación posible.

Versiones simplificadas

5.     Los tests de frecuencia

    Para los velocistas (sobre 100m), Vittori, propone un test de frecuencia prácticamente en el sitio, 50 elevaciones de rodilla (muslo a la horizontal para imponer una amplitud mínima). Las condiciones de frecuencia son prácticamente las mismas que sobre un 100 m. se cronometra el tiempo de los 50 apoyos en el suelo. Se divide por 50 el tiempo obtenido.

    Para los deportes colectivos, 50 es una cifra muy elevada y nosotros aconsejamos 20 elevaciones y con amplitud que definen el compañero con sus manos a una altura normal.

pag

► Test de frecuencia con compañero

6.     Test de multisaltos

  • Los italianos proponen el triple salto y pentasalto.

  • Para los dos test la salida se hace parada con los pies juntos.

  • El final se realiza sobre la arena (dos pies al mismo nivel).

  

Triple

Pentasalto

Velocista con un 10.60/10.40

9 m – 9.50 m

15.50 m – 16.20 m

Velocista con un 10.20/10.00

10 m – 10.50 m

17 m – 17.90 m

Bibliografía

  • WEINECK, (1988): “Entrenamiento óptimo”, Cómo lograr el máximo rendimiento. Ed. Hispano Europea.

  • FRANK W. DICK, (1993): “Principios del entrenamiento deportivo”. Ed. Paidotribo.

  • GROSSER; STARISCHKA Y ZIMMERMANN, (1976): “Teoría del entrenamiento y del acondicionamiento físico”. Ed. Martínez Roca.

  • GARCÍA MANSO, JM, NAVARRO Y RUÍZ, (1996): “Bases teóricas del entrenamiento deportivo”. Gymnos Editorial.

  • ÁLVAREZ DEL VILLAR, (1983): “Preparación física del futbolista basada en el atletismo”. Gymnos Editorial.

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revista digital · Año 14 · N° 131 | Buenos Aires, Abril de 2009  
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