Retórica

"Nunca me creo en la cima o en la gloria,
eso es un gran fantasma
creado por generaciones pasadas,
atascado en el camino de la vida".

León Gieco, "La colina de la vida".

Una de las competencias que surgen entre las hinchadas es el duelo por la mayor creatividad de los procedimientos formales. En el nivel retórico se ponen en escena distintos mecanismos para lograr los grandes objetivos de construir un rival homosexual, amargo y protagonista de una pobre historia. A grandes rasgos, la meta explicitada en el dispositivo retórico se apoya en que "desprestigiar al otro es transformarlo en niño o en hijo" (Archetti, 1984).

Por supuesto, los discursos de las hinchadas deben respetar la rima, es decir, "la recurrencia regulada de unidades fónicas equivalentes" (Grupo µ, 197: 106). Pero es sobre el eje metáfora/metonimia donde se despliegan la mayoría de los procedimientos retóricos. La conexión metonímica opera predominantemente para expresar las pasiones por el club, englobadas en un color o una denominación que contenga una relación existencial: Quilmes será "tricolor" o "cervecero" por los colores de su camiseta y la marca de cerveza, Peñarol será milrrayita por su tradicional camiseta a rayas verticales azules y blancas.

Los jugadores también operan como conexiones metonímicas, en base a la necesidad de depositar en un individuo las características del grupo. Estas encarnaciones metonímicas se ligan a procedimientos metafóricos en los que el sujeto elegido realizará una acción que simbolice la victoria humillante sobre el otro. En los cantos transcriptos a lo largo de estas páginas, no significa que Esteban De la Fuente o Esteban Pérez sometan sexualmente a un jugador rival. Será que la condición milrrayita/cervecero implica la posibilidad o hasta la obligación de concretar el acto sexual para recalcar la homosexualidad del otro, pero que en última instancia descansa sobre la necesidad de sentirse superior a ese adversario despreciado.

La ironía es otro de los procedimientos retóricos de mayor relevancia. Se interviene en el nivel lógico del discurso, a diferencias de los casos anteriores, en los que la intervención de completaba sobre el plano semántico.

"Cervecero, cervecero,
como no tenés hinchada
te la hacemos de gauchada".
Pero no siempre la ironía se expresa en el plano verbal. Aquí los aplausos cumplen la función de sustituir cualquier respuesta verbal, para dejar en claro en el rechazo a la canción escuchada. El aplauso también se liga con la ruptura del verosímil. A diferencia del silbido, donde hay un rechazo llano a lo que se acaba de escuchar, el aplauso pretende ridiculizar un canto que no se corresponde con el imaginario de ese cuerpo que es la hinchada.


A modo de conclusión

El básquet de Liga Nacional se ha convertido en una práctica ritual desde la cual es posible efectuar distintas lecturas. Las relaciones de poder entre Buenos Aires y el Interior, la oposición entre una práctica emergente como el básquet con otra dominante como el fútbol, y sobretodo, las maneras en que los habitantes de distintas ciudades se apropian de un deporte que les permite sentirse pertenecientes a un orden significativo para sus vidas. Y para este tipo de abordaje, el concepto de ritual ofrece una amplia gama de posibilidades para interpretar los fenómenos deportivos. Como punto de partida, permite una acercamiento teórico que nos introduce en temas claves como la construcción de la identidad en una ciudad, pero atada al desarrollo de una competencia deportiva como la Liga Nacional de Básquet.

El trabajo sobre los emisores mediáticos constituye una interesante posibilidad para explicar las razones por las cuales determinadas prácticas quedan relegadas de la consideración de los medios de comunicación cuando su trascendencia parece indicar lo contrario. Entre los "gatekeepers", las rutinas productivas y las tradiciones de trabajo en las distintas redacciones, conforman un triángulo desde el cual se pueden entender los criterios de organización de la agenda de los medios masivos de comunicación.

La historización de esta aún bastante joven Liga Nacional conforma un paso impostergable para un intento de dejar en claro la forma en que un deporte como el básquet creció en tan poco tiempo. Los aspectos organizacionales y el crecimiento económico aparecen como dos variables esenciales para cualquier abordaje histórico de estas características. Justamente, el aspecto económico es uno de los factores que mejor permiten visualizar la manera en que un deporte revolucionó sus estructuras para en estos momentos estar disputándole al fútbol el lugar número "uno" en popularidad.

El análisis del caso marplatense permitió comprender cómo se van formando las identidades en una ciudad en base a las campañas de una escuadra deportiva. De esa manera se analizan procesos que marcaron cómo en principio la necesidad de tener un equipo de básquet en la élite postergó cualquier otro tipo de enfrentamientos dentro de la ciudad, para fomentar la rivalidad regional. Y también como luego se da el proceso inverso en el cual quedan al margen las rivalidades regionales para favorecer un conflicto intraciudad ante la existencia de dos equipos, Peñarol y Quilmes, en la máxima competencia nacional. Un tipo de conflicto en que se articulan significaciones clasistas y de imaginario social, sostenidas desde los medios de comunicación, el público, los propios protagonistas deportivos y hasta las expresiones simbólicas de los fanáticos. En referencia a esto último, los cantos de las hinchadas constituyen un lugar privilegiado desde el cual leer las maneras en que los distintos grupos construyen sus identidades. El análisis enunciativo, temático y retórico ofreció las guías necesarias para interpretar el comportamiento de los hinchas en un escenario deportivo, y el imaginario social que los fanáticos despliegan en un partido de básquet tan importante para la ciudad de Mar del Plata como el enfrentamiento Peñarol-Quilmes. El abordaje semiótico, principalmente a través del eje tema/motivo, ofrece una serie de posibilidades de lectura bastante fructíferas, en cuanto a los valores que los hinchas priorizan en el ritual deportivo.

De cualquier manera, esta investigación está lejos de pretender agotar el estudio del básquet de Liga Nacional. Surgen en principio, un amplio espectro de temas dignos de consideración, en especial aquellos que tienen que ver con el comportamiento de quienes le dan a los espectáculos deportivos la trascendencia y el atractivo del que disponen en nuestro días: los hinchas. Un aspecto vital para investigar podría ser un estudio etnográfico sobre las barras bravas, que también existen en el básquet. Sus relaciones con el alcohol, las drogas y la delincuencia (en los casos en los que eso se da) puede abrir un veta explorable que nos permita comprender con mayor certeza la violencia en los espectáculos deportivos. Una investigación de este tipo también nos permitiría descifrar de qué manera los valores que simbólicamente se expresan en los cantos son mantenidos en la vida diaria, fuera del ritual basquetbolístico. Una etnografía de las barras bravas, en ciertos ámbitos (bares, estadios, medios de transporte, viajes al interior del país), podría arrojar ciertos aspectos sumamente valiosos para analizar.

Finalmente. otro tema que podría merecer un estudio apunta a detectar la manera en que la apropiación de distintos espacios (estadios) funciona como articuladora de identidad. A más de un año de que Peñarol haya abandonado el Súper Domo, un escenario mucho más reducido, inseguro, incómodo y carente de cualquier atractivo estético que el actual Polideportivo Panamericano, es objeto de reminiscencias entre muchos hinchas de Peñarol, que lo asocian indudablemente al título conseguido en la Liga 93-94. A pesar del aparente progreso de jugar en el mejor estadio cubierto de la Argentina, muchos en Mar del Plata aseguran que Peñarol perdió identidad. Y otro tanto está ocurriendo con Quilmes, que abandonó el gimnasio de Once Unidos para trasladarse también al ámbito comunal de un Polideportivo que quedó en manos de la Municipalidad de General Pueyrredón una vez que finalizaron los XII Juegos Deportivos Panamericanos.

El espectro de posibilidades es por demás amplio. Se pretende con esta investigación haber conseguido una adecuada conceptualización de una práctica que para muchas ciudades del Interior del país construye poderosos sentidos de pertenencia. Si eso ha sido logrado, no sólo se habrá alcanzado una meta, sino que también se habrá favorecido la posibilidad de seguir investigando este deporte tan importante para la Argentina: el básquet de Liga Nacional.


Mar del Plata - Buenos Aires, noviembre de 1996


Bibliografía


Notas al pie

1 . El apodo "Gallo" refiere al apodo del jugador de Peñarol y la selección argentina, Esteban Pérez.

2 . Una de las calles de salida del Polideportivo.

3 . Barrio en el que está el gimnasio de Once Unidos, lugar en el que Quilmes jugaba como local.

4 . Una de las calles de salida del Súper Domo, escenario donde Peñarol disputó ocho ligas como local.

5 . Peñarol arrancó con derrotas en los dos primeros clásicos y cerró la primera temporada de enfrentamientos en desventaja 1-3. Pero con el correr de los años la situación se fue revirtiendo y Quilmes sólo consiguió ganar en tres ocasiones más sobre otros dieciseis enfrentamientos. El balance actual es de 14 victorias para Peñarol y 6 para Quilmes.


Foto: Revista Solo Basquet.


[índice]

Lecturas: Educación Física y Deportes. Año 2, Nº 7. Buenos Aires. Octubre 1997
http://www.efdeportes.com