efdeportes.com
Aspectos teórico-prácticos del entrenamiento
de las acciones a balón parado en el fútbol

   
Técnico de fútbol
Diplomado en Educación Física
http://pagina-web.de/bernabeherraez
 
 
Bernabé Herráez
bernafut@hotmail.com
(España)
 

 

 

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 9 - N° 59 - Abril de 2003

1 / 1

Introducción

    En este artículo no pretendo convencer al lector de la importancia de las jugadas a balón parado mediante datos estadísticos, cuestión ampliamente reflejada en otros estudios. Mi objetivo se centra en darle el valor que realmente tienen estas situaciones durante el transcurso de cualquier encuentro y a los detalles básicos de cada una de ellas.


Justificación del entrenamiento de las A.B.P.

    En mi opinión, las Acciones a Balón Parado suponen una oportunidad tan válida, espectacular y eficaz como cualquier otra acción del partido, para demostrar el talento individual y colectivo de los futbolistas. No creo que sirvan para el lucimiento personal del entrenador, puesto que lo que realmente pretende el técnico es ofrecer una gama, más o menos amplia, de soluciones a distintos problemas que el juego plantea, de entre las cuales los jugadores han de escoger la que consideren oportuna, al igual que ocurre con las jugadas en las que el balón está en movimiento.

    Cada día aumenta el número de factores entrenables y que hasta hace pocas fechas se consideraba que no lo eran, como por ejemplo, en preparación física el calentamiento y los estiramientos; en dietética, la alimentación pre y post partido; en el aspecto psicológico, la necesidad de superar la ansiedad, los nervios, mejorar la atención y concentración en el juego; en táctica, el jugar en inferioridad o superioridad numérica provocada por la expulsión de algún jugador, producto de las nuevas normativas que pretenden defender el juego limpio y de calidad; el posicionamiento y juego con los pies del portero, etc.

    Las A.B.P. forman parte de ese conjunto de factores entrenables a los que me refería en el párrafo anterior. No practicarlas metódicamente durante la semana, estudiando sus particularidades, adaptándolas a la plantilla de que disponemos, me parece que es darle mucha ventaja al adversario, sea cual sea la edad de los futbolistas.

    Su entrenamiento se hace necesario desde edades tempranas por dos motivos fundamentales:

  1. Los jóvenes jugadores han de someterse al mismo reglamento que los mayores, donde se encuentran tipificadas estas reglas.

  2. Necesidad de tener especialistas que resuelvan eficazmente estas situaciones, especialmente con la igualdad futbolística que existe actualmente.

    Con respecto al 1º, creo que resulta evidente que los niños han de saber sacar provecho de estas situaciones, pues serán muchas las ocasiones en las que tendrán que defender o atacar un saque de meta, de esquina, de banda, etc.

    Debemos desterrar entre todos la falsa imagen que tienen las A.B.P. de acciones mecanizadas, que coartan la creatividad del jugador, en especial la de los más pequeños, cuando lo que se pretende es precisamente todo lo contrario, elevar el número de posibilidades de juego, aumentar la capacidad discriminativa del sujeto, así como mejorar su atención y concentración, etc.

    En cuanto al punto 2º, es cada vez mayor el número de encuentros que se resuelven o encaminan gracias a la perfecta ejecución de un saque de esquina, de banda, golpe franco o penales, por lo que se hace necesario contar con jugadores especializados en estas jugadas.


Consideraciones básicas del entrenamiento

    El método de trabajo correrá a cargo de cada entrenador, teniendo en cuenta los siguientes puntos, que les ayudarán a mejorar la enseñanza y el aprendizaje de las jugadas a balón parado:

  1. Ha de ser un trabajo continuo y paciente.

  2. Ajustado a las situaciones reales de cada edad.

  3. Aprovechar los errores cometidos durante los partidos, para mejorar aquello que más les interese como entrenadores.

  4. Las jugadas han de ser sencillas de entender y de ejecutar. Elección de los jugadores más apropiados para cada movimiento.

  5. Los chicos han de permanecer el menor tiempo posible parados. Se explicará a un grupo reducido la jugada que van a defender o atacar, mientras el resto de la plantilla realiza otra actividad (rondos, partidos, etc.). Organización del trabajo tipo circuito.

  6. Durante las dos o tres primeras sesiones, se le indicará a cada jugador lo que tiene que hacer, parando el juego tantas veces como se considere oportuno, aclarando las dudas que surjan.

  7. Una vez entendida la jugada, los siguientes entrenamientos han de ser más dinámicos y atractivos para el muchacho. Para conseguirlo os sugiero, a modo de ejemplo, este modelo de trabajo en el que se alternan durante todo el año:

    • Partidos en una portería, en los que el equipo defensor ha de recuperar la pelota y hacerla rebasar la línea de centro del campo para poder convertirse en atacante, pasando los atacantes al papel de defensores.

    • Partidos en terreno reducido con porterías reglamentarias, donde cada equipo reanuda el juego practicando la acción ofensiva o defensiva indicada por el técnico.

    • Concursos, para determinar qué grupo consigue encajar menos goles defendiendo o marcar más goles atacando la jugada indicada por el entrenador, o creada por los futbolistas.

    • Proyección de vídeo, con jugadas sacadas de vuestros encuentros, entrenamientos, de la T.V.

    • Circuitos con variantes de la jugada principal, o de distintas jugadas.

    • Ejercicios de tiro a gol desarrollando los movimientos aprendidos.

    • La IMAGINACIÓN del entrenador.

Consideraciones específicas de las acciones a balón parado

Saque de centro

    Es una de las acciones a balón parado menos numerosas en un encuentro. Es la primera posibilidad ofensiva que se le presenta al equipo, aunque su importancia reside más en acercar el balón a la portería contraria y generar una situación de peligro posterior, que en conseguir gol, ya que los rivales están bien posicionados y se hace muy difícil sorprenderles, pero no imposible.

    El saque de centro nos permite comprobar el grado de concentración con el que los equipos afrontan el inicio del partido. Desde el punto de vista ofensivo se trata de crear una situación de presión y peligro frente al rival, sin darle tiempo a reaccionar.

    Se suele aprovechar poco, después de encajar un gol, ya que el estado anímico es bajo y todavía se encuentran los futbolistas repasando la jugada que dio origen al gol, repartiendo culpas y responsabilidades. En mi opinión, es una buena oportunidad para demostrar la capacidad de reacción del grupo, ya que los contrarios se encuentran eufóricos por el gol obtenido, con celebraciones y felicitaciones que hacen bajar el nivel de tensión y atención al juego. Si se le sabe sacar provecho puede ser un momento oportuno para sorprender y nivelar el juego a nuestro favor.

Los aspectos a tener en cuenta son:

1. Saque de centro. Defensivo

  • Presionar al poseedor del balón, evitando el pase o cualquier otra acción.

  • Preparar una buena línea de rechace para los envíos largos.

  • Orientar los despejes hacia las bandas, y si es posible detrás de los defensas rivales.

  • Máxima atención, para evitar sorpresas.

2. Saque de centro. Ofensivo

  • Tener cuidado con el pase hacia atrás, ante la presión de los contrarios.

  • En el saque hacia adelante, el lanzador ha de enviar la pelota al compañero de la banda que esté mejor situado, evitando perder el balón con el pase largo.

  • Preparar una buena línea de rechace en los envíos largos.

  • Tener entrenadas varias opciones.

  • Adaptado a la edad y características del grupo.

  • Máxima atención para sorprender al rival.

Saque de banda

    Es una de las acciones a balón parado que ha ido adquiriendo mayor importancia en los últimos años. Ha pasado de ser "la jugada estúpida del fútbol" o un recurso para poner el balón en juego, a una posibilidad de gol real y habitual.

    En el apartado defensivo, se debe establecer la presión en todo el campo, marcando al jugador que saca y evitando que le devuelvan el balón. El saque de banda permite defender con mucha más eficacia que otras acciones, debido a que la puesta en juego se realiza con las manos y éstas tienen menos potencia que los pies, por lo que la zona donde se puede desarrollar el fútbol es menor, lo que permite a su vez, controlar mejor los movimientos del rival sin perder de vista el balón.

    En el juego ofensivo debemos sacar provecho del inicio con las manos, ya que se puede precisar mejor el pase, así como de la incorporación al ataque del jugador que realiza el saque, ya que en la mayoría de las ocasiones se queda estático después de sacar.

    Igual de importancia tiene el hecho de que no exista fuera de juego en primera acción, por lo que el posicionamiento de los atacantes y sus movimientos pueden ser fundamentales para conseguir el gol.

Los aspectos específicos a tener en cuenta son:

3. Saque de banda. Defensivo

  • Se establece el tipo de marcaje colectivo a realizar.

  • Evitar que devuelvan el balón al que efectuó el saque.

  • Presionar en todas las zonas del campo, tanto al que saca como a los receptores.

  • En los saques próximos a nuestra área, ha de quedar libre siempre uno de los defensas centrales. El resto del equipo marca.

  • Si el saque de banda se realiza largo al área, se ordenará al grupo las posiciones de marcaje, rechace y contraataque.

  • Máxima atención al balón y al adversario.

  • Evitar estar demasiado cerca de los rivales, empujándolos con el pecho o con los brazos. Es falta y se dejan muchos espacios detrás de los defensores.

4. Saque de banda. Ofensivo

  • Máxima atención. Sacar rápido es la mejor jugada.

  • Tratar de recibir el balón en movimiento, nunca estáticos.

  • Colocar pocos jugadores cerca del que saca, como máximo dos, para tener más espacio donde moverse.

  • El que saca ha de pasar la pelota a uno de sus compañeros al pié, al pecho o a la zona del campo que se indique, siempre con ventaja para el receptor.

  • Evitar que el balón bote en el suelo antes de que lo reciba nuestro jugador.

  • Entrenar varias posibilidades, teniendo en cuenta la zona del campo donde se produzca la jugada. Cerca de nuestra área servirá para iniciar el juego de ataque. En la zona central servirá para aproximar la pelota a la portería rival. Cerca del área contraria se busca finalizar la jugada con pocos toques.

Saque de puerta

    Es una acción a balón parado en la que adquiere una gran importancia el posicionamiento colectivo, tanto para defender como para atacar. Prevalece el sentido de grupo, con buen escalonamiento de las líneas para apoderarse de los rechaces en los envíos largos.

    Como inicio del juego de ataque se recomienda que se haga en corto y hacia las bandas, en especial con los menores.

Los aspectos a tener presentes son:

5. Saque de puerta. Defensivo

  • Máxima atención al balón y al adversario.

  • Debemos orientar, si es posible, el saque del rival hacia la zona del campo que más nos interese a nosotros.

  • Creación de una buena línea de rechace.

  • Situarse de forma escalonada, adelantando o atrasando a nuestra defensa en función de la potencia de saque del rival.

6. Saque de puerta. Ofensivo

  • Sacar rápido.

  • Se deben evitar los saques al centro, especialmente en niños, pues es la zona más poblada del terreno de juego.

  • Sacar a las bandas, prioritariamente a la más cercana, creando una buena línea de rechace.

  • Procurar que saque el portero.

Saques de esquina

    Son unas de las acciones a balón parado más importantes. Desde el apartado defensivo presenta grandes dificultades, ya que como en todas las A.B.P. la iniciativa la tiene el equipo que ataca, por lo que los defensores suelen estar un paso por detrás.

    Además nos encontramos con la complejidad que supone un lanzamiento lateral, muy próximo a nuestra portería, que no nos permite tener controlado, como defensas, a los atacantes y al balón al mismo tiempo. O le prestas atención al balón o se la prestas al rival, pero a ambos es muy difícil, y todavía más cuando los desmarques se realizan alejándose de la pelota.

    Cobra una gran importancia el tener establecidas las funciones de cada uno, defensiva y ofensivamente. Defensivamente se exige una gran concentración, nadie se puede relajar, y todos deben estar preparados para contraatacar si se recupera el balón.


Los aspectos a tener en cuenta son:

7. Saque de esquina. Defensivo

  • Máxima atención al balón y al adversario.

  • Se debe establecer el tipo de marcaje a realizar. Se aconseja el zonal, o en su defecto el combinado zona-hombre, ya que permiten un mayor control sobre el balón, el adversario y el espacio más peligroso para el remate de los contrarios.

  • El marcaje al hombre presenta los inconvenientes de perder de vista el balón, correr y despejar hacia la portería propia e ir siempre dos pasos detrás del contrario.

  • Definición de la zona de acción, entendiendo ésta como el espacio en el que ha de desarrollar su cometido todo defensor.

  • Establecimiento de las posiciones de marcaje, despeje, rechace y contraataque con nombres y apellidos. Se deben ocupar las zonas de remate más peligrosas para nuestra portería, comprendidas generalmente entre el vértice del área pequeña más próxima al saque y el punto de penal.

  • Se aconseja colocar a un solo defensor en los palos, para ganar a un jugador en el marcaje o en el rechace.

  • Salida del área de todos los defensores, cuando se produzca un despeje largo, para provocar el fuera de juego del adversario. Salida a la altura del balón si el despeje es corto. En ningún caso deben permanecer estáticos.

  • Actitud agresiva, expectante, de anticipación. Apoyo del cuerpo sobre la punta de los pies, para ser más explosivos.

  • Dominio de la técnica de brazos y de juego de área.

Aspectos ofensivos generales de los saques de esquina

    En el apartado ofensivo de los saques de esquina, debemos sacar provecho de las dificultades defensivas antes mencionadas.

    Los desmarques y movimientos de engaño se deben realizar alejándose del balón en primera instancia, para aproximarse seguidamente, complicando de esta manera la acción de los defensores a los que se les obliga a fijar la atención o en el balón o en el atacante.

    Se debe tener establecidos claramente los lugares de remate y los jugadores que los ocuparán, así como la línea de rechace, vigilancias y de corte del contraataque rival, en caso de producirse.

    También se aconseja evitar los saques altos, con poca potencia o muy abiertos, ya que facilitará la recuperación de la pelota por los defensas y el consiguiente contraataque.

    Los puntos a tener en cuenta son:

  • Sacar rápido para sorprender al adversario. Es la mejor jugada.

  • Elección de los jugadores con más calidad técnica para el golpeo del balón.

  • Elección de los mejores jugadores técnica y tácticamente para desarrollar las acciones.

  • Tener previstas acciones simples y variadas, fáciles de entrenar y ejecutar.

  • Establecer claramente posiciones y movimientos de remate, con nombre y apellidos.

  • Los remates han de producirse en movimiento, nunca estáticos, para sacar ventaja a la iniciativa que el ataque permite.

  • Establecer claramente las posiciones de rechace, con nombre y apellidos.

  • Adaptar las jugadas a las diferentes categorías y edades.

  • Establecimiento de las señales de jugada y ejecución.


Golpes francos

    Son otra de las acciones a balón parado más importantes del juego, por su frecuencia y peligrosidad cuando se producen cerca del área defensiva.

    Se debe tener presente el lugar del campo donde se ejecuta la acción. Si son alejados del área contraria tendrán el objetivo de iniciar el juego de ataque, en corto o en largo. Si se producen en centro del campo la intención será acercar el balón a lugares de remate, y si estamos cerca del área se pretende finalizar con tiro a gol en pocos toques y rápidamente.

    Desde el punto de vista defensivo, el lugar del campo donde tenga lugar el golpe franco marcará nuestra actitud para recuperar el balón. Cuanto más cerca de nuestra portería mayor intensidad defensiva aplicaremos.


Puntos a tener en cuenta:

8. Golpes francos defensivos

Sin barrera

  • Máxima atención sobre el balón y el adversario.

  • Establecer el tipo de marcaje a emplear.

  • Definición de la zona de acción.

  • Despejes hacia la portería adversaria.

  • En todos los despejes avanzamos hasta la frontal del área grande, en los despejes largos, o a la línea del balón en el caso de los despejes cortos.

  • Identificar a los jugadores que ocuparán las zonas de marcaje, rechace y contraataque.

  • Adelantar o atrasar al grupo en función de la distancia del balón sobre nuestra portería y de la potencia de golpeo del rival.

  • Actitud agresiva, expectante, de anticipación. Apoyo del cuerpo sobre la punta de los pies, para ser más explosivos.

  • Dominio de la técnica de brazos y de juego de área.

9. Golpes francos ofensivos

Sin barrera

  • Sacar rápido para sorprender al adversario.

  • Elección de los jugadores con más calidad técnica para el golpeo del balón.

  • Elección de los mejores jugadores técnica y tácticamente.

  • Tener previstas acciones simples, variadas y fáciles de entrenar y ejecutar.

  • Establecer claramente posiciones y movimientos de remate.

  • Establecer claramente las posiciones de rechace y vigilancias.

  • Adaptar las jugadas a las diferentes categorías.

  • En las acciones alejadas al área rival, se debe evitar el pelotazo en la medida de lo posible.

  • Determinar las zonas de juego del campo, y establecer opciones de ataque. Es necesario entender que no es lo mismo un golpe franco cercano al área contraria que uno alejado, ni tampoco si está en la zona central o en las bandas.

  • Establecimiento de las señales de jugada y ejecución.


Aspectos defensivos generales de los golpes francos

    En este punto se pueden aplicar las premisas expuestas en los saques de esquina. Los golpes francos cercanos al área son difíciles de defender, ya que la atención se divide entre el balón, el rival y el espacio en el que actuar. Tener controlados a todos a la vez es dificilísimo.

    Defensivamente aparece la barrera y es fundamental saberla organizar. Siempre ha de haber un jugador, que actúa como referencia, en contacto permanente con el portero. Se miran y se hablan en todo momento hasta que la barrera está formada. En las barreras laterales el jugador referencia puede ser diferente al de las barreras frontales. Queda a criterio del técnico.

    La barrera también la puede formar un jugador de campo, desde el lugar de lanzamiento, ocupando el portero el centro de la portería para evitar la sorpresa de un saque rápido e inesperado de los atacantes.

Con barrera

  • Establecer el n° de elementos idóneo en barrera dependiendo de la zona defensiva, es decir, en laterales 1 ó 2, en el centro 4 fijos más un quinto que sale a entorpecer el lanzamiento, y uno por fuera para evitar acciones por esa zona.

  • Barreras pequeñas para que el portero tenga visibilidad.

  • Elección de jugadores con nombre y apellidos.

  • Establecer claramente posiciones de barrera, rechace y protección del portero.

  • Se debe indicar qué jugador es la referencia para que el portero sitúe a la barrera, y ambos han de estar en contacto permanente.

  • Jugadores más altos en barrera, los más bajos al rechace y protección.

  • Evitar que la zona de rechace se sitúe en línea con la barrera.

  • Mantener actitud agresiva, concentración. Dominar el juego de área.

  • Máxima atención sobre el balón y el adversario.


Aspectos ofensivos generales de los golpes francos

Con barrera

  • Sacar rápido para sorprender al adversario. No pedir nunca la barrera.

  • Elección de los jugadores con más calidad técnica para el golpeo del balón.

  • Elección de los mejores jugadores técnica y tácticamente.

  • Tener previstas acciones simples, variadas y fáciles de entrenar y ejecutar.

  • Tener previstas acciones en función del lugar, centro o banda, y de la distancia con la meta contraria.

  • Establecer claramente posiciones y movimientos de remate.

  • Establecer claramente las posiciones de rechace, en especial al del portero.

  • Evitar perder balón cuando los rivales salen al rechace. Se aconseja enviar la pelota a una de las dos bandas, en caso de no poder finalizar con tiro a gol.

  • Situar 2 ó 3 jugadores en la barrera para dificultar la visión del portero.

  • Adaptar las jugadas a las diferentes categorías.

Otros artículos sobre Fútbol

  www.efdeportes.com/
http://www.efdeportes.com/ · FreeFind
   

revista digital · Año 9 · N° 59 | Buenos Aires, Abril 2003  
© 1997-2003 Derechos reservados