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Nuevas tendencias deportivas: Deportes de Sliz

*Doctor en Ciencias del Deporte. Profesor de Actividades Gimnásticas y Acrobáticas.
Facultad de Ciencias del Deporte. Universidad de Extremadura.
**Licenciado en Educación Física. Profesor de Actividades en la Naturaleza y Deportes de Aventura.
Facultad de Ciencias del Deporte. Universidad de Extremadura.
(España)

Kiko León Guzmán*
fleon@unex.es
Manuel Parra Boyero**
mparra@unex.es

Resumen:
    El presente artículo es el reflejo de un gran proyecto de investigación que se está llevando a cabo en la Facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad de Extremadura, (España) y que, por las recomendaciones de publicación presentaremos resumidamente en una serie de tres, que pretenden contextualizar, explicar y dar cabida académica a una serie de modalidades deportivas o actividades motrices que están causando verdadero furor en las sociedades occidentales y cuya práctica se extiende a ritmos vertiginosos. En esta primera entrega tratamos de justificar someramente la evolución histórica y características que justifica la aparición de estas modalidades deportivas y de introducir el concepto que las aglutina.
En un segundo documento presentaremos el término acuñado y la definición de las modalidades deportivas de Sliz, desarrollando y justificado tal definición. Así mismo comentaremos brevemente el porqué de tal aceptación e implantación.
En el tercer artículo se muestran cuáles son las modalidades contempladas y recogidas, comentando brevemente cada una de ellas y facilitando direcciones de internet para ampliar información.
    Palabras clave: Deportes de Sliz. Deslizamiento. Sensaciones. Aventura.

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 6 - N° 30 - Febrero de 2001

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Introducción

    El ejercicio físico, la actividad motriz e incluso la práctica deportiva, ha acompañado la evolución cultural del hombre desde el mismo origen de éste. Oliveira, J. (1989), considera que las prácticas deportivas actuales son un símbolo cultural, que viene predeterminado por unas prácticas ancestrales.

    Desde una finalidad puramente utilitaria hasta la concepción actual de ocupación del tiempo de ocio, se ha visto salpicado de connotaciones de todo tipo, desde las políticas y militares, hasta las higiénicas y de salud pasando por la consideración de fenómeno social, etc.

    Acercándonos en el tiempo y asumiendo su universalidad y popularización como actividad de ocio, en los últimos años, se ha podido apreciar una espectacular revolución, lógica adaptación a la era de cambios vertiginosos en la que nos encontramos.

    Así, tras aparecer una corriente, a finales del siglo pasado que trataba de ofrecer nuevos enfoques y planteamientos a las "encasilladas" y "regladas" modalidades deportivas practicadas y promocionadas entonces, bajo la denominación de "Deportes Alternativos" , se ofrecía una variada relación de modalidades o prácticas deportivas desarrolladas en torno a Materiales Alternativos. Así se agruparon actividades motrices populares procedentes de otros países, como fueron la "indiaka", el "tamburello", el "bumerán" o los "zancos", o simplemente se adaptaron modalidades clásicas a dichos materiales, surgiendo el "floorball", el béisbol o la esgrima con materiales de gomaespuma (espumas de poliuretano o polietileno).

    Esta tendencia defendía una práctica más libre, menos atenazada por las reglas, en la que preponderaba la intención lúdica sobre la puramente competitiva, y que caló hondo, y sigue haciéndolo actualmente en los centros educativos, en el desarrollo de las diferentes sesiones de Educación Física.

    Ya en los sesenta, surgen en Europa y España los denominados deportes de aventura, que se difunden en los setenta y se consolidan en los ochenta, produciéndose en nuestros días, un incremento espectacular de un 200% con respecto a la década anterior. Se pueden considerar como actividades motrices practicadas en la naturaleza, muy en consonancia con los movimientos ecologistas, en las que se trataba de extraer sensaciones, a partir del contacto con las fuerzas de la naturaleza, y buscando la segregación de adrenalina. En este sentido Freixa, C. (1995) se refiere a ellas como un campo, en el que mezclan tres visiones de la vida y del mundo: la visión física externa (naturaleza, agua, velocidad), la visión emotiva interna (riesgo, libertad) y la visión química resultante (adrenalina). Gracias, entre otras cosas, a la democratización del ocio, a que comulgan con la posmodernidad en la que impera la búsqueda de sensaciones, la necesidad de vivir el presente, la diversión, la ecología, lo individual, la libertad, la mezcla de estilos, y al avance y mejora de los diferentes materiales, aparecen como prácticas accesibles al gran público, muchas de estas actividades deportivas, acometidas sólo por expertos desde tiempo atrás ya que el riesgo que comportaba su practica, reducía el número de practicantes a los aventureros más preparados. Tal y como afirman Fuster, J. y Elizalde, B. (1995), en los últimos años, la práctica de actividades físicas en el medio natural ha evolucionado desde concepciones tradicionales o minoritarias, a formas innovadoras al alcance de una amplia masa social.

    De esta forma se hicieron populares términos como el "Raffting", el "puenting", la escalada, el "Barranquismo", etc... Las empresas que ofrecían estos servicios florecieron y los medios de comunicación se volcaron con reportajes y fotografías espectaculares. Los directivos de las grandes empresas, enviaban a sus ejecutivos a practicar estos deportes, para mejorar su autoconfianza y proporcionar suficientes situaciones de catarsis y autoafirmación, que junto con la intensa vivencia grupal, incidieran de forma clara en la mejora de su rendimiento laboral.

    Simultáneamente y desde bastante tiempo atrás, una forma de entender la vida en que se contemplaba cierta práctica deportiva, evolucionaba y se hacía un hueco en la sociedad. Considerado con cierta marginalidad y aire "hippie", el surf nacía y se imponía en los años sesenta en las costas de California, rodeándose de un ambiente de individualidad y libertad.

    El deslizarse sobre una ola, "cuesta abajo" por una masa de agua mientras esta avanzaba producía unas sensaciones inigualables y diferentes. Ya no se trataba de conseguir vencer a un contrario, o de otorgar nuevas reglas a viejas prácticas deportivas, ni de acercarse al peligro enfrentándose a la naturaleza. Ahora se trataba de aprovechar lo que la naturaleza ofrece, no enfrentándose a ella sino colaborando con ella, obteniendo gran placer al conseguir fundirse.

    Alrededor de esta idea han venido surgiendo nuevas modalidades deportivas y acercándose otras afines. Así existe un grupo de disciplinas motrices con unas características comunes, que se ejecutan con unos materiales muy específicos y que tienen en común, la capacidad de proporcionar sensaciones enormemente gratificantes, con la mera práctica de las mismas, sin necesidad de competir o medirse más que con uno mismo y con el nivel alcanzado el día anterior.

    De tal forma, muchas de estas prácticas, ya no se pueden catalogar como deportes de aventura, ya que algunas de ellas poseen algunos matices, que las hacen diferentes, únicas, adaptadas en muchos casos al casco urbano, alejándose del entorno natural, o aprovechando éste de formas totalmente novedosas. Consideramos por tanto necesario aportar, un término que las aglutine, que las diferencie y que englobe sus características más importantes.

    Surf, Snowboard, Skateboard, Wakeboard, Kite surf, Windsurf, Street Luge, etc. son algunas de las modalidades más conocidas con miles de adeptos en el mundo y cuyo número asciende cada año, sacándolas cada vez más de esa parcela de "marginalidad" a la que hacíamos referencia, atrayendo a inversores y empresarios conscientes del gran potencial que suponen estos deportes, que nosotros hemos agrupado y querido bautizar como Deportes de Sliz.


¿Qué son?

Denominación

    El trabajo que venimos desarrollando en la Facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad de Extremadura (España), ha tratado desde su origen de contextualizar y dar conexión, a una serie de modalidades deportivas, o actividades motrices, con grandes nexos de unión y caracterizadas todas ellas porque existe el deslizamiento y se obtienen "sensaciones" gratificantes con su práctica.

    Es difícil "hacer ciencia" hablando de "sensaciones", cuando éstas son difícilmente objetivables y evaluables, pero es innegable su existencia y, en casos como el que nos ocupa, llegan a ser el pilar fundamental de su creación y desarrollo.

    Con el objeto de definir qué modalidades podrían considerarse LIZ y cuáles no, y con la idea de agruparlas bajo una denominación suficientemente adecuada, tanto desde la vertiente lingüística como contemplando una visión comercial o de "marketing", se estudió la terminología y clasificaciones de los deportes actuales.

    Así pues, se revisaron las denominaciones empleadas en otros países para los deportes de estas características, encontrando las siguientes:

  • Nuevos deportes. Atendiendo a su carácter innovador, diferencial y alternativo.

  • Deportes de aventura. Por su búsqueda de incertidumbre y riesgo, en contra de lo que el deporte busca que es reducir sistemáticamente la incertidumbre domesticando el espacio de juego.

  • Deportes tecno/ecológicos. Por la simbiosis entre la naturaleza y la tecnología. Nos permite desplazarnos en todas las superficies terrestres. Ha mejorado la calidad de su ejecución, de la práctica, su seguridad, su estética y su vistosidad. Podemos nadar, elevarnos, deslizarnos, etc.

  • Deportes en libertad. Mínima sujeción a normas reglamentarias, ínfima institucionalización, inexistencia de federaciones y amplias posibilidades de práctica en el medio natural.

  • Deportes californianos. Indicando el origen geográfico y cultural, así como su peculiar estilo.

  • Deporte salvaje. Por su carácter natural, abierto, libertario, incierto en su práctica, carente de reglamento, de institucionalización, de espacio fijo y de horario.

  • Deportes extremos. Por su búsqueda de sensaciones límites, de buscar siempre el más difícil.

  • Actividades de reto en la naturaleza. Por la capacidad que tienen para luchar cada vez más con uno mismo o contra la naturaleza.

  • Actividades deslizantes de aventura. Deportes Glisse. Por la sensación de armonía que procura al deportista el control perfecto de su vehículo, utilizando las energías de la naturaleza como forma de propulsión. El deslizamiento es la actividad básica de estos deportes.

  • Deportes Fun. Por su carácter divertido. Fun significa diversión, en estos deportes la diversión aparece siempre vinculada.

  • Outdoor adventure recreation. Tienen lugar en un ambiente natural, mediante actividades que suponen retos tanto desde el punto de vista emocional como físico, y que utilizan situaciones de riesgo aparente o real cuya culminación, a menudo incierta, puede ser influenciada por las acciones del participante y por las circunstancias.

  • Actividades deportivas de esparcimiento y turísticas de aventura. Por sus posibilidades en el turismo y la recreación.

  • Actividades de emoción y aventura al aire libre. Por sus posibilidades de unir emoción y sensación y realizarse preferiblemente al aire libre.

  • Actividades físicas de aventura en la naturaleza. Por ser actividades que pertenecen a otra época, con concepciones físico recreativas diferentes al deporte, sin necesidad de reglas, ni institucionalización, que varían en la motivación de los que las practican, en las condiciones de su práctica, en los fines que se persiguen y en el medio utilizado para su desarrollo siempre pleno de incertidumbre y por tanto de aventura.

  • Actividades en la naturaleza. Porque el lugar idóneo de realización de las mismas es la naturaleza.

  • Actividades en la naturaleza escolares y extraescolares (Ascaso, J. y otros 1996). Aludiendo a su utilización en el curriculum. Por ser un medio para conseguir objetivos educativos.

  • Actividades deportivas en el medio natural. Por considerar que el deporte engloba a actividades físicas no competitivas y exentas de reglas y que el medio natural es más concreto que naturaleza. Funollet, F. (1995)

  • Deportes adaptados al medio natural urbano. (Gómez Encinas) Son deportes y actividades que siendo de "Naturaleza" se practican y desarrollan en la "urbe"; nacen de la necesidad de acercar al ciudadano deportes que son específicos del medio natural, y que por necesidades de evolución, o simplemente por el ánimo de difundirlos y potenciarlos se adaptan modificando las reglas y su escenario de juego, lo que en muchos casos da lugar a otro nuevo deporte.

    Ya dentro de las denominaciones más populares, destacan dos:

    "Extreme sports": De origen estadounidense e identificados en ocasiones con una "X" de mayor tamaño al inicio de la palabra (Xtreme Sports), esta denominación agrupa a la mayoría de las disciplinas contempladas en el estudio, si bien incluye otras ajenas a la concepción aquí planteada. El catedrático Jesús Castañón Rodríguez (2000), en su página web (http://www.idiomaydeporte.com/) se refiere en su "Glosario del Deporte Extremo" como de imprecisa clarificación, por responder ésta a necesidades comerciales, al no estar todas las disciplinas organizadas en federaciones, como en el deporte moderno y crearse constantemente nuevas fórmulas deportivas.

    Si bien todas las modalidades que recogen tal denominación aportan suficientes "Sensaciones" con su práctica, éstas se justifican más por la consecución de un éxito tras enfrentarse ante un reto, ante una actividad arriesgada (autoafirmación), que a las recibidas por la propia práctica deportiva en sí.

    En los últimos años, en Estados Unidos, Francia, Nueva Zelanda y países nórdicos europeos, han surgido nuevas disciplinas de riesgo y aventura para vivir emociones al límite en espacios naturales y urbanos (Castañón Rodríguez, J. 2000, www.idiomaydeporte.com)

    Glisse sports: De origen francés, esta denominación aparece indisolublemente unida a la feria deportiva conocida como "Glissexpo" que se celebra en Francia anualmente y que se encuentra por su decimocuarta edición, en la que se reúnen profesionales y practicantes de estas modalidades deportivas sin que, hasta el momento, hayamos localizado documentación clarificadora en torno al término descrito.

    Cabe recordar una vez más, que todas estas disciplinas aparecen acompañadas de un magnífico despliegue publicitario, siendo los intereses privados de fabricantes y vendedores los verdaderos impulsores de estas modalidades, haciendo posible su evolución y desarrollo.

    Así pues y, tras la revisión efectuada, nos vemos en la necesidad de crear un término con la suficiente capacidad definitoria y que a la vez, resulte asequible y compatible con la concepción o "filosofía" en la que se envuelven todas estas prácticas deportivas.

    La vinculación de gran parte de las disciplinas con la idea de "deslizamiento", nos llevaron a buscar términos que contemplasen esta concepción, ese significado. Revisados glosarios y diccionarios de lenguas actuales y muertas (Latín y Griego) se acuñó el término "Sliz" como definitorio de las modalidades incluidas en esta nueva cultura deportiva.

    Este vocablo latino de origen onomatopéyico del que evolucionó nuestro "desliz - deslizar" y casi con toda seguridad, las palabras "slide", en inglés, y "glisse", en francés, de igual significado, creemos que se adapta por su corta extensión, facilidad de pronunciación en todos los idiomas y sonoridad a las propuestas planteadas en la búsqueda del término definitorio.

    Por lo tanto, llamaríamos "Deportes de Sliz" ("Sliz Sports), a una parte de las modalidades comprendidas dentro de los estadounidenses "Extrem Sports" y a la práctica totalidad de los contemplados en la "Glisexpo" francesa, añadiendo actuales y futuras disciplinas deportivas no incluidas en las mismas.


¿Qué son?

Definición

    Entendemos como Deporte de Sliz Aquella práctica motriz en la que el deportista se desplaza, de manera directamente controlada, gracias a fuerzas propulsivas naturales o "arrastrado" por medios ajenos a él, sintiendo emociones y sensaciones hedonistas, fundamentalmente individuales.

    En las páginas siguientes justificaremos los diferentes aspectos de la definición, apoyándonos en algunas de las características que los definen y son comunes. (Laraña, E. 1986-89-89 ª, Oliveira, J. 1995-96, Giralt, C. 1993, Casanova, B. 1994)

    Entre las características que las definen y que son comunes podríamos citar las siguientes:

  • Son fundamentalmente prácticas individualizadas y con un fuerte carácter individualista, por esa razón, confieren un alto grado de autonomía al deportista que las practica, limitada por el conocimiento técnico y las condiciones meteorológicas del momento.

Desplazamiento

  • Implican deslizarse por superficies. El mencionado desplazamiento se desarrolla en un determinado entorno, en un medio. Hemos contemplado los tres estados de la materia, para analizar dicho medio. Como sólido la tierra y el hielo (también la nieve), como líquido el agua y como gaseoso, el aire de la atmósfera.

  • Implican desplazarse por superficies. Lo primero que contempla la definición es la presencia de un desplazamiento, de una traslación del deportista, de un cambio de situación dentro de un espacio. Este desplazamiento conlleva aparejado, como cualquier otro, la relación espacio temporal, la velocidad, aspecto éste directamente relacionado con la "obtención de sensaciones". La inestabilidad, el choque del aire en la cara, el sonido de este en los oídos es algo conocido por todos y considerado como atractivo, como atrayente.

Control del desplazamiento

  • El equilibrio es la capacidad de asumir y/o mantener cualquier posición en contra de las fuerzas externas. La pérdida, la caída siempre supone un riesgo que varía en función del tipo de medio en que se realiza.

  • La capacidad de mantener una posición variable y correcta posibilita la práctica de la totalidad de estos deportes. Es precisamente, en este aspecto, donde se determina, en la mayoría de las ocasiones, el anteriormente mencionado nivel del deportista. El adverbio "directamente" incluido en la definición, trata de acotar y concretar las modalidades contempladas con el fin de excluir ciertas actividades y deportes que, sin esta puntualización, podrían encajar en la definición. Citando un ejemplo, podríamos contemplar el vuelo libre realizado en un velero (planeador), como modalidad de Sliz. Se consigue un desplazamiento controlado dentro del medio gaseoso que es el aire propulsado únicamente por fuerzas naturales. El control del desplazamiento se realiza sentado dentro de una cabina más o menos aislado del entorno y mediante la cómoda y breve manipulación de una palanca. Es indudable una vez más que se obtienen sensaciones increíblemente placenteras, pero... ¿podrían considerarse tales sensaciones del tipo de las aquí planteadas?.



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