efdeportes.com

Las capacidades físicas básicas a través del 

trabajo cooperativo en el área de Educación Física

 

Diplomado en Magisterio de Educación Física, Graduado en Primaria con mención

en Educación Física por la Universidad de Murcia. Máster en planificación

y prescripción del entrenamiento por la Universidad de Málaga

Casiano Parra Martínez

casiano.parra@um.es

(España)

 

 

 

 

Resumen

          El presente artículo presenta una propuesta de trabajo sobre las capacidades físicas básicas dentro del área de Educación Física, a través de una perspectiva cooperativista, junto con una fundamentación teórica sobre las capacidades físicas básicas y el aprendizaje cooperativo.

          Palabras clave: Capacidades físicas básicas. Trabajo cooperativo. Educación primaria. Educación Física.

 

Recepción: 19/11/2014 - Aceptación: 10/12/2014.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 19, Nº 199, Diciembre de 2014. http://www.efdeportes.com/

1 / 1

1.     Introducción

    Un sistema educativo moderno y orientado a los nuevos tiempos tiene como finalidad el desarrollo integral del alumnado del siglo XXI, siendo el área de Educación física la única materia de las presentes en el currículo que posibilita que el alumno descubra de manera activa la diversidad de actividades físicas, deportivas y artístico-expresivas. Para ello, el desarrollo de las capacidades físicas básicas es un elemento vertebrador de las diferentes prácticas motrices y deportivas, permitiendo a los sujetos la práctica de las mismas. Además el tratamiento de dichas capacidades a través del trabajo cooperativo, contribuirá al desarrollo de habilidades sociales cada vez más emergentes dentro de la sociedad.

2.     Capacidades físicas básicas

2.1.     Definición y clasificación

    A lo largo de la historia, han sido muchos los autores que han dado respuesta a qué son las capacidades físicas básicas y cuáles son. Autores como Galeno, Philostrato, Guts Muths y otros ya hablaban en sus tiempos de capacidades físicas básicas, y más tarde otros como Bukh hablaban de fuerza, movilidad, destreza, velocidad y equilibrio.

    Siguiendo a Marteniuk (1976) en su análisis del acto motor de Proceso de la Información, podemos entender las capacidades físicas básicas como, el conjunto de capacidades involucradas directamente sobre los factores de ejecución del movimiento y que representan su aspecto cuantitativo.

    En cuanto a su clasificación, Gundlach (1968) establece una de las más antiguas y utilizadas, clasificando las capacidades físicas básicas en:

  • Capacidades Condicionantes: determinadas por la disponibilidad energética: fuerza, velocidad, resistencia.

  • Capacidades Coordinativas: permiten organizar y regular el movimiento. Son: capacidad de dirección y control motriz, capacidad de transformación y adaptación motriz y capacidad de aprendizaje motor.

  • Capacidades intermedias: incluye la flexibilidad, determinada por la elasticidad y elongación muscular y por la movilidad articular.

    Otra clasificación, es la realizada por Generelo y Tierz (1991), que las dividen en dos grupos:

  • Capacidades físicas básicas: Resistencia, fuerza, velocidad y flexibilidad.

  • Capacidades físicas resultantes: Agilidad, coordinación y equilibrio.

    A continuación, vamos a definir los distintos tipos de capacidades físicas básicas teniendo en cuenta la clasificación expuesta con anterioridad.

2.1.1.     Resistencia

    Grosser (1989) entiende la resistencia como la capacidad física y psíquica de soportar la fatiga frente a esfuerzos largos y/o la recuperación rápida después del esfuerzo. Entre los distintos tipos de resistencia encontramos:

  • Resistencia aeróbica: Capacidad para soportar esfuerzos suaves o medios durante un largo periodo de tiempo. Hay un equilibrio entre aporte y consumo de oxígeno y la energía se obtiene por la oxidación de la glucosa y los ácidos grasos. Actividades que superen los 3-4 minutos.

  • Resistencia anaeróbica: Capacidad para soportar esfuerzos intensos el mayor tiempo posible. Existe una gran deuda de oxígeno. En actividades de 1-3 minutos.

    Gorostiaga (1993) afirma que se suelen distinguir dos tipos de aptitud física anaeróbica:

  • Aptitud anaeróbica aláctica: mide la producción máxima de energía durante ejercicios de máxima intensidad durante periodos inferiores a 4-8 segundos. Dicha energía se contiene del ATP y del PC.

  • Aptitud anaeróbica láctica: que mide la producción máxima de energía durante los ejercicios realizados a muy alta intensidad durante un periodo comprendido entre los 30 segundos y 1-2 minutos.

2.1.2.     Fuerza

    Grosser y Muller (1989) definen la fuerza como, la capacidad del sistema neuromuscular de superar resistencias a través de la actividad muscular (trabajo concéntrico), de actuar en contra de las mismas (trabajo excéntrico) o bien de mantenerlas (trabajo isométrico).

    Existen varios tipos de fuerza en función de la acción:

  • Fuerza máxima: se vence una resistencia alta para los grupos musculares implicados en el movimiento.

  • Fuerza velocidad, se vence una resistencia no máxima a alta velocidad, también llamada explosiva.

  • Fuerza Resistencia: se vence una resistencia leve durante un largo espacio de tiempo.

    Y en función de la contracción:

  • Contracción isotónica concéntrica: cuando la fuerza es mayor que la resistencia produciendo un trabajo positivo y acortándose el músculo.

  • Contracción isotónica excéntrica: la fuerza es menor y por tanto el trabajo es negativo, elongándose el músculo.

  • Contracción isométrica: fuerza y resistencia son iguales y no se produce movimiento.

  • Contracción isocinética: una contracción a velocidad constante en todo el movimiento.

  • Contracción auxotónica: combina trabajo isotónico e isométrico (trabajo con gomas).

2.1.3.     Velocidad

    Zatsiorsky (1970) define la velocidad como “la capacidad de efectuar acciones motoras en un tiempo mínimo en determinadas acciones”.

    Podemos considerar tres tipos diferentes que en la práctica pueden darse de forma combinada.

  • Velocidad de desplazamiento: es la capacidad de recorrer una distancia en el menor tiempo posible y consta de dos grandes componentes: la amplitud y frecuencia de zancada

  • Velocidad de reacción: definida como el tiempo mínimo necesario transcurrido desde que se recibe un estímulo hasta que aparece la respuesta, que puede ser: simple, cuando la respuesta es siempre la misma (salida 100 metros); y compleja o de elección, cuando hay varias opciones (cualquier decisión en un deporte colectivo).

  • Velocidad gestual: es la capacidad de realizar un movimiento segmentario o global en el menor tiempo posible.

    Todas ellas poseen como base científica, según Morehouse (1991) en su libro “Fisiología del Ejercicio Físico”, dos aspectos:

  1. El muscular: basado en la velocidad de contracción.

  2. El nervioso: basado en la velocidad de transmisión de impulsos nerviosos.

2.1.4.     Flexibilidad

    Al igual que otras capacidades físicas básicas, la flexibilidad tiene sus bases fisiológicas: por un lado la relación de la fuerza con el sistema neuromuscular y su capacidad para producir tensiones musculares y por otro la resistencia a nivel metabólico y su capacidad para producir energía. Por tanto, la flexibilidad se puede entender a partir del comportamiento del componente articular y del componente muscular, como los dos factores que limitan el rango articular.

    Por lo que al hablar de flexibilidad, es común manejar otros términos como movilidad articular, amplitud de movimiento, elasticidad, estiramiento, stretching, etc. Algunos de ellos puedes entenderse como sinónimos, otros encierran significados propios, y en bastantes casos lejanos a lo que se pretende. Es necesario aclarar de forma general que a la capacidad de desarrollar movimientos en diferentes grados de amplitud o movilidad se le denomina movilidad articular (Porta, 1987). Se entendería la flexibilidad como el rango máximo de movilidad articular o movilidad articular máxima (Porta, 1998).

    Aunque en realidad la utilización común de todos estos conceptos no conlleva ningún problema de comprensión, es necesario proponer una definición de cada uno de ellos.

  • Flexibilidad es la capacidad máxima de movimiento de una articulación (Porta, 1998).

  • Elasticidad es la capacidad que tiene el cuerpo de retornar a su posición de reposo una vez que cesan las fuerzas que lo han deformado (Nordin y Frankel, 1989).

    La clasificación más utilizada de la flexibilidad ha sido la de Fleisehman (Porta, 1998) que diferencia entre:

  • Flexibilidad dinámica o activa: En relación al grado de movilidad alcanzada con movimientos lentos y realizados con ayuda.

  • Flexibilidad estática o pasiva: Sería la movilidad alcanzada en la gran mayoría de movimientos deportivos, generados por fuerzas como la contracción del antagonista y efectos combinados de la gravedad u otros elementos externos.

    Por otro lado, podemos encontrar en Medveiev otra clasificación en relación al grado de desarrollo de la misma (Porta, 1998):

  • Flexibilidad absoluta: Corresponde a la máxima movilidad articular o máxima amplitud, solicitada en momentos o gestos concretos.

  • Flexibilidad de trabajo: Rango normal de movilidad solicitada por la vida cotidiana o por la actividad deportiva concreta a desarrollar.

  • Flexibilidad residual: Nivel de elongación superior al de trabajo, que la persona debe desarrollar para evitar rigideces que puedan afectar a su grado de movimiento es sus gestos deportivos.

3.     El trabajo cooperativo en la práctica educativa

3.1.     Introducción al aprendizaje cooperativo

    Para Rué (1998), varios autores han enfatizado la necesidad de favorecer la interacción interpersonal en lo que se refiere al trabajo en equipo como estrategia para la promoción del aprendizaje. Sin embargo, es hasta ahora que se le da mayor peso a las aportaciones históricas referentes al valor educativo de la interacción social en el seno de la clase. Por lo tanto, las modalidades de aprendizaje de un individuo ya no pueden ser consideradas como comportamientos propios sino como un intercambio que se da en las escuelas, a lo largo de un proceso de escolaridad. Rué, menciona que el intercambio empieza a consolidarse de manera conceptual y práctica, ya que en la psicología se ha avanzado enormemente encontrándose argumentos de individuos que explican la elaboración de sus propios esquemas de aprendizaje mediante la interacción social. El autor señala a Vygotski como el primer teórico que destacó el carácter social del aprendizaje, así como la importancia de contar con interlocutores en la construcción de estos procesos y el papel tan significativo que juega el lenguaje.

    Enfatiza el valor de crear las mejores condiciones posibles para propiciar la interacción social, esto es la intervención positiva y acertada del docente como interlocutor o mediador en el grupo. Rué, también menciona que Vygotski consideró que la existencia en la sociedad, vivir y compartir con otros es fuente y condición del desarrollo de los procesos psicológicos superiores, distintivos y comunes al hombre.

    Entendemos por métodos cooperativos como una de las estrategias de aprendizaje en los cuales los alumnos se sienten motivados a trabajar juntos en actividades, basándose su realización en la interacción entre compañeros. El aumento en la utilización de los métodos cooperativos en los últimos años se debe a:

  • Su viabilidad ante grupos heterogéneos, lo que provoca mayor socialización entre los grupos de aprendizaje.

  • Es idóneo para los grupos con necesidades educativas especiales; así como el tiempo que tiene el profesor para atender individualmente a cada alumno.

  • Pueden ser utilizados con grupos de cualquier edad, en cualquier materia.

  • Hay desde los métodos cooperativos sencillos hasta los muy complejos. Los que se utilizan grupales como los de grupos de contingencia (recompensa a los grupos en función de sus logros).La recompensa interpersonal es otra característica en la utilización de la enseñanza cooperativa, en dicha estructura se hace referencia a las consecuencias para el alumno por sus compañeros, ya que el éxito del grupo depende del logro de cada integrante.

    En la enseñanza cooperativa se distingue una estructura cooperativa de objetivos determinada por la ayuda y otra por la mutualidad. En la estrategia cooperativa por ayuda, la cooperación surge para ayudar a otros alumnos a conseguir el logro individual que aporta cada miembro al grupo, por otro lado la cooperación mutua es la propia relación con un objetivo compartido por los alumnos.

    Las ventajas que hay en este tipo de trabajo para la integración escolar son:

  • El aprendizaje de los alumnos supera al valor individual que tradicionalmente se otorga al mismo.

  • El resultado final es producto del grupo por lo que los alumnos son motivados a ayudarse unos con otros.

  • Los alumnos aprenden a la vez que se ayudan unos con otros.

    El aprendizaje cooperativo como metodología de trabajo en Educación física, se refiere al enfoque instruccional centrado en el estudiante, en el cual se utilizan pequeños grupos, que permite que los alumnos trabajen juntos en la consecución de tareas que han sido asignadas por el profesor y que pueda resaltar el aprendizaje de todos los miembros del equipo. El papel que juega el profesor es importante ya que no sólo se limita a observar el trabajo de los grupos sino que supervisa el proceso de construcción y transformación del conocimiento (Cruz, 1997).

3.2.     La cooperación en la Educación Física

    Partiendo de lo anterior, trasladando el aprendizaje cooperativo a la pista, al espacio que corresponde a la Educación Física. Como en otras áreas, la cooperación puede ser un modo de abordar la educación en valores desde la Educación Física. Omeñaca, Puyuelo y Ruiz (2001), se refieren a la cooperación en la Educación Física, como un modo de abordar la educación en valores, ya que la propia práctica educativa vinculada a la cooperación en la Educación Física admite manifestar elementos que hacen de la cooperación un instrumento valioso en el contexto para el aprendizaje en el ámbito de los valores. Tanto en los juegos, las actividades, dinámicas, desafíos físicos y estructuras cooperativas, se transita por procesos en los que se requiere atender la comunicación positiva en grupo, la coordinación de labores y el establecimiento de relaciones entre los miembros del grupo de cara a la consecución de un objetivo. Los valores en la cooperación ludomotriz son vivenciados por los niños.

    De acuerdo a lo anterior, Omeñaca, Puyuelo y Ruiz (2001), comentan que desde la orientación de la cooperación surgen elementos que trascienden positivamente en el desarrollo moral.

    Por lo tanto, la cooperación entre alumnos en la Educación Física escolar:

  • Brinda casi siempre una metodología lúdica.

  • Estimula la imaginación y la creatividad.

  • Rebasa el egocentrismo, tomando perspectivas diferentes a la propia.

  • Crea un ambiente propicio para externar afectos, sentimientos y emociones positivas.

  • Beneficia la voluntad y la auto superación a la vez que se progresa de manera personal y en beneficio del grupo.

  • Desarrolla las habilidades sociales.

  • Favorece la manifestación de conductas asertivas.

  • Propicia el aprendizaje de reglas interpersonales vinculadas con la reciprocidad, la cooperación y la capacidad de compartir.

  • Educa para la convivencia.

  • Coordina labores como método de actuación.

  • Inicia la reflexión y el análisis crítico.

  • Promueve un contexto donde la alegría y la diversión cobran un valor relevante.

    A partir de las propuestas surgidas de las tareas cooperativas, los niños deciden sí participan comunicándose o se aíslan, si respetan o faltan el respeto a sus compañeros, eligen entre tolerancia o intolerancia ante la diversidad del grupo; si comparten o no y entre la cooperación o el individualismo. El conflicto que se genera de los anteriores dilemas morales se resuelve en el transcurso hacia una autonomía más plena en el pensamiento moral.

3.3.     Valores y actitudes que se promueven con la cooperación en la Educación Física

    Omeñaca, Puyuelo y Ruiz (2001), sugieren que los valores en última instancia se toman desde las elecciones con las que nos comprometemos, a partir de la propia experiencia, las vivencias personales, en la práctica misma del valor. Los valores a los que está vinculada la cooperación es la principal aportación que la misma hace a la Educación Física escolar; ya que el alumno se pone en contacto con muchos de los valores universales para su desarrollo personal, para la convivencia y para la vida en armonía: libertad, responsabilidad, tolerancia, diálogo, respeto, amistad, cooperación, solidaridad y paz.

    Así mismo, no se deben hacer a un lado los valores que ya de por sí están relacionados con la materia, en relación al progreso y bienestar personal: alegría, autoestima y auto superación y más aún aquellos valores relacionados con las capacidades unidas a la actividad física: competencia motriz, creatividad motriz y salud.

    A continuación se detallan los valores y actitudes que, de acuerdo a Omeñaca, Puyuelo y Ruiz (2001), son promovidos por la cooperación en las sesiones de Educación Física:

a) Libertad. Con la cooperación los alumnos se sienten libres al participar, experimentan su capacidad creadora no sienten la imposición de competir ni el temor a ser descartados de la actividad motriz.

b) Responsabilidad. El comportamiento responsable dentro de la Educación Física escolar tanto el educando con él mismo como con sus compañeros y en el ambiente que le rodea.

c) Tolerancia. La cooperación dentro de la Educación Física escolar sitúa a todos en un mismo nivel, todos comparten un solo objetivo una sola meta, aunque tengan diferentes orígenes y distintos modos de ver la vida.

d) Diálogo. Es una herramienta valiosa tanto en la vida cotidiana como en la actividad física, sobre todo cuando es atendida a través de la cooperación.

e) Amistad. Al cooperar en las clases de Educación Física, el alumno tiene la posibilidad de enaltecer el valor de la amistad a través de la convivencia con sus compañeros, adoptándola como un modo de vivir propio.

f) Cooperación. Colaborando en actividades cooperativas el grupo obtendrá el gusto por mejorar sus habilidades sumando esfuerzos.

g) Autoestima. Aceptando el gusto por uno mismo sobre todo cuando se trabaja en grupo independientemente de los niveles de destreza, todos tienen la oportunidad de superarse, con la posibilidad de integrar la autoestima como un valor propio.

h) Competencia motriz. Referida al respeto de los valores principales como la responsabilidad, la amistad, la alegría, la cooperación, la solidaridad o la libertad.

i) Creatividad motriz. En relación a la habilidad de obtener soluciones diferentes ante situaciones motrices nuevas.

j) Salud. Reconocer que la actividad motriz puede mejorar el estado físico, mental y social.

k) Autosuperación. Satisfacción por el progreso personal y de los demás.

i) Respeto: En las actividades cooperativas este valor es una de las bases para edificar otros valores como la paz, la solidaridad y la libertad.

m) Solidaridad. Con las actividades cooperativas se generan sentimientos hacia nuestros semejantes de ayuda, justicia e igualdad los cuales el alumno puede adoptar en su vida diaria.

n) Paz. Con la cooperación se promueve la paz, ya que se da una convivencia sana a través de las actitudes que se manifiestan.

o) Alegría. Con las actividades cooperativas se otorga al alumno la alegría de vivenciar.

4.     Orientaciones metodológicas para su aplicación en el ámbito educativo

    En primer lugar, vamos a establecer una serie de orientaciones didácticas generales para el trabajo de las capacidades físicas básicas, para pasar después a un análisis más particular de su trabajo estableciendo diferentes pautas de actuación para cada uno de las capacidades.

    En cuanto a las líneas básicas que abarcan a las cuatro capacidades, podemos decir:

  • Respetar en todo momento los principios de continuidad y progresión.

  • Trabajaremos de forma global, lo más variada posible y a través de formas lúdicas, de manera que sea lo más atractivo posible para el alumnado, para así buscar la máxima motivación e implicación.

  • Tener en cuenta las características individuales de cada sujeto.

  • Seguir el principio de multilateralidad, procurando un desarrollo armónico y equilibrado de todo el cuerpo.

  • Aportar abundante información al alumnado durante su trabajo y realizar calentamientos apropiados.

    Por lo que respecta a las directrices particulares de cada capacidad, se establece lo siguiente:

Resistencia

  • No desarrollar el trabajo de resistencia anaeróbica láctica.

  • Controlar periódicamente la frecuencia cardiaca.

  • Proceder con cautela con los niños con peso corporal elevado.

  • El rendimiento no es el objetivo principal.

  • Proponer actividades motivantes, con formas jugadas.

Fuerza

  • Dar al alumno información suficiente sobre la técnica correcta de ejecución (corrigiendo malas posturas).

  • Si el trabajo es entre compañeros, procurar que sean compensados en tamaño y peso para evitar la sobrecarga.

  • Si se usan implementos usar una metodología muy directiva.

  • Realizar un buen calentamiento.

  • El rendimiento no es el objetivo principal.

  • Proponer actividades motivantes, con formas jugadas y habilidades básicas

  • No sobrecargar la columna vertebral en estas edades.

Velocidad

  • Su trabajo será en distancias cortas y recuperaciones completas.

  • Queda contraindicado el trabajo de la resistencia a la velocidad.

  • Realizar un buen calentamiento.

  • El rendimiento no es el objetivo principal.

  • Proponer actividades motivantes, con formas jugadas y habilidades básicas.

Flexibilidad

  • Los chicos tienen pérdidas de flexibilidad más rápidas que las chicas.

  • Se tiene que compatibilizar el mantenimiento de una buena flexibilidad con un buen tono muscular para una postura correcta.

  • Como regla general lo ejercicios serán de gran amplitud, para lo cual se emplearán, en principio, movimientos activos y dinámicos.

  • Trabajaremos tanto en estático como en dinámico, para no perder ese dinamismo.

  • Un trabajo en exceso puede degenerar en una hiperlaxitud articular, entre los 12 y 15 años es la edad ideal para un planteamiento más sistemático.

4.1.     Vinculación curricular

    El Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el currículo básico de la Educación Primaria, incluye numerosas alusiones referentes a las capacidades físicas básicas. Así, este tema se relaciona directamente con el objetivo de etapa K, que trata sobre el uso de la Educación Física y el deporte como medios para favorecer el desarrollo personal y social. A nivel de contenidos, el tema guarda conexión con todas las situaciones motrices que aparecen en el Real Decreto, pero en especial con la situación motriz A, que hace referencia a “Acciones motrices individuales en entornos estables”.

    Igualmente, en consonancia con la nueva Ley de Educación, los contenidos del tema pueden contribuir a desarrollar, entre otras, la Competencias Clave 4 (“Aprender a aprender”) y 5 (“Competencias sociales y cívicas”), lo que le permitirá conocer y valorar sus potencialidades para poder ir progresando paulatinamente en su aprendizaje. También podemos añadir que los contenidos de nuestro tema están también en una estrecha relación con un criterio de evaluación del Real Decreto, que no es otro que el número 6, el cual hace referencia a “Mejorar el nivel de sus capacidades físicas, regulando y dosificando la intensidad y duración del esfuerzo, teniendo en cuenta sus posibilidades y su relación con la salud”, por último también encontramos relación con varios estándares de aprendizaje, como por ejemplo: el 4.2. “Reconoce la importancia del desarrollo de las capacidades físicas para la mejora de las habilidades motrices”, el 5.1. “Tiene interés por mejorar las capacidades físicas”, el 6.1. “Muestra una mejora global con respecto a su nivel de partida de las capacidades físicas orientadas a la salud” y el 6.4. “Identifica su nivel comparando los resultados obtenidos en pruebas de valoración de las capacidades físicas y coordinativas con los valores correspondientes a su edad”.

5.     Ejemplo de tarea para su desarrollo

    A continuación, y antes de pasar a establecer nuestra propuesta para el trabajo de las capacidades físicas básicas, vamos a mencionar una serie de criterios a tener en cuenta para el diseño de actividades.

  1. Que permitan una evaluación inicial, continua y sumativa.

  2. Que sean motivantes.

  3. Que se adapten a los diferentes niveles de partida.

  4. Realizar actividades de resumen y recordatorias.

  5. Realizar actividades de refuerzo o de ampliación.

  6. Que presenten una buena coherencia interna, en función del objetivo a conseguir.

  7. Que traten de desarrollar los distintos tipos de contenidos del área de manera interrelacionada.

  8. Por último, que abarquen las distintas formas de agrupamiento y de ocupación de espacios

    En cuanto al trabajo de las capacidades físicas desde una perspectiva cooperativa, se utilizará la técnica de marcador colectivo. Esta técnica cooperativa consiste en sumar los puntos conseguidos por todas las personas participantes en una determinada tarea (Orlick, 1990, citado por Velázquez Callado, 2012). Esta técnica fomenta la pertenencia y el sentimiento de grupo en todos los integrantes que permiten la participación de todos los niños sin tener en cuenta su nivel de habilidad, capacidad o destreza.

    La dinámica de las sesiones puede ser la siguiente:

  • Cada día se presenta un reto a la clase, en forma de repeticiones (las repeticiones son el número de veces que se realiza un ejercicio). Es muy importante contar bien las repeticiones y ejecutar bien los ejercicios para poder superar el reto.

  • Se divide la clase en grupos, puede ser libre elección de los participantes o siguiendo el criterio del maestro (homogeneidad, heterogeneidad, motivación etc.), el único requisito es que deben ser mixtos (compuesto por niños y niñas).

  • Habrá cinco cartulinas repartidas por la pista polideportiva. En cada una se trabaja un ejercicio diferente.

  • En cada estación se plantea un reto y una pregunta sobre los conceptos que está vinculada al trabajo realizado.

  • El tiempo de trabajo es de dos minutos, mientras que el de descanso es de 3 minutos, que se aprovecha para rellenar la ficha entre todos los componentes del equipo.

  • Durante el trabajo cada uno cuenta de manera individual sus repeticiones, durante el descanso, entre todos los miembros del grupo, rellenan la ficha. Se puede establecer roles si ellos prefieren.

  • Al finalizar las cinco estaciones se suman las repeticiones de cada grupo en cada una de las postas, y se ve si ha superado el reto propuesto.

  • Si el reto es superado, en la siguiente sesión se suben el número de repeticiones, aumentando la dificultad, si no se supera se mantiene el mismo número de repeticiones.

  • Los retos se pueden mantener en diferentes sesiones, realizar variantes o cambiarlos por completo.

  • En los periodos de descanso se fomenta la reflexión de los grupos por parte del maestro dónde deben hablar de cómo mejorar, superar la marca, ayudar al compañero, etc.

    A continuación se proponen dos ejemplos de tareas a realizar y donde cada componente del grupo debe escribir el número de repeticiones individuales y el total del grupo.

  • ¿Cuáles son los principales músculos que intervienen en cada uno de los ejercicios realizados? Anotadlos por la otra cara.

  • ¿Cuáles son los principales músculos que intervienen en cada uno de los ejercicios realizados? Anotadlos por la otra cara.

6.     Conclusión

    En la etapa de la Educación Primaria la Educación Física permite a los alumnos explorar su capacidad motriz. Eso implica poner en acción una serie de habilidades motrices, valores y actitudes relacionados con el cuerpo que contribuyan al desarrollo integral del alumno y a la mejora de su calidad de vida.

    A través de las estrategias cooperativas se incrementa la motivación de los alumnos a la práctica de actividad física saludable así como a la construcción compartida de conocimientos, de esta manera se contribuye a superar dificultades de aprendizaje y se generan actitudes de tolerancia y respeto a las diferencias individuales vinculadas a los diferentes niveles de desarrollo de las capacidades físicas básicas.

Bibliografía

  • Cirujano Diez, M. (2010). Capacidades Físicas Básicas en la Educación Secundario Obligatoria. Madrid: Visión Libros.

  • Bores Cerezal, A.J. (2014). Fútbol sala: manual de la preparación física. Madrid: Alto Rendimiento.

  • Generelo, E. y Tierz, P. (1991). Cualidades Físicas II. Zaragoza: CEPID.

  • González Arévalo, C. y Monguillot Hernando, M. (2014). Cooperación y condición física: un tándem saludable. Revista Iberoamericana de Educación, 64(1), 1-7.

  • Gorostiaga, E. (1993). Bases científicas del fútbol: Aplicación al entrenamiento. (Segunda parte). El entrenador Español de Fútbol, 57, 29-36.

  • Grosser, M., Hermann, H., Tusker, F. y Zintl, F. (1989). Alto Rendimiento Deportivo. Barcelona: Martínez Roca.

  • Gundlach, M. (1968).Systembezeihungen koetrperlicher faehigkeiten und fertigkeiten. Theorie und praxisder koerperkultur, 25.

  • Hernández Fernández, L. y Madero Valencia, O.M. (2007). El aprendizaje cooperativo como metodología de trabajo en educación física. México. Talleres Gráficos de la Sección 54 del S.N.T.E.

  • Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa.

  • Marteniuk, R.G. (1976). Information Processing in Motor Skills. Nueva York: Holt Rinehart & Winston.

  • Morehouse, I. E. y Miller, A.T. (1991). Fisiología del Ejercicio Físico. Buenos Aires. El Ateneo.

  • Nordin, M. y Frankel, V. (1989). Basics biomechanics of the muscle skeletal system. Philadelphia: Lippincott, Williams and Wilkins.

  • Omeñaca, R., Puyuelo, E. y Ruiz, J. (2001). Explorar, Jugar, Cooperar. Barcelona: Paidotribo.

  • Porta, J. (1998). La flexibilidad. Master en Alto rendimiento deportivo. Madrid: COE.

  • Real Decreto 126/2014, de 28 de febrero, por el que se establece el currículo básico de la Educación Primaria.

  • Rué, J. (1998). Cooperar en la escuela. La responsabilidad de educar para la democracia. El Aula un espacio para la cooperación. Barcelona: Grao.

  • Velázquez, C. (2006). Aprendemos juntos a saltar a la comba. Una experiencia de aprendizaje cooperativo en Educación Física. V Congreso Internacional de Actividades Físicas Cooperativas. Oleiros (Coruña).

  • Zatsiorsky, V.M., William J. K. (2006). Science and Practice of Strength Training. Champaign: Human Kinetics.

Otros artículos sobre Educación Física

  www.efdeportes.com/
Búsqueda personalizada

EFDeportes.com, Revista Digital · Año 19 · N° 199 | Buenos Aires, Diciembre de 2014
© 1997-2014 Derechos reservados