efdeportes.com

Vínculo del patrimonio tangible de la etapa neocolonial 

(década del 1950) a través de la disciplina de PPD

Link tangible heritage neocolonial stage (early 1950s) through the discipline of PPD

 

*Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte, Las Tunas

**Centro de Tecnologías de Gestión de Datos

Universidad de las Ciencias Informáticas

(Cuba)

Gisela Idania Rodríguez Escalona*

giselare@ult.edu.cu

Julio César Brito Rodríguez**

jcbrito@uci.cu

 

 

 

 

Resumen

          Este trabajo propone el fortalecimiento de la ideología en los jóvenes universitarios tuneros. En él se recogen algunas alternativas a utilizar para los profesores que imparten la disciplina de Preparación para la Defensa (PPD). Esto es posible a través del conocimiento que tributa una panorámica histórica en la década de los 50 y su incidencia en los estudiantes universitarios para la defensa de la patria. Las universidades deben hacer uso de herramientas factibles que propicien el acercamiento al conocimiento de su localidad. En ese sentido, la interacción con instituciones históricas culturales y la inserción a sus actividades caracterizadoras. Además del rescate del patrimonio tangible e intangible, lograr establecer nexos entre los profesores de la disciplina preparación para la defensa y los especialistas de los Museos, Memoriales y Plazas del municipio. Asimismo establecer el encuentro con personalidades de los diferentes momentos históricos por los que se ha transitado. La propuesta está dada en los espacios que respaldan los Programas de Preparación para la Defensa. En las modalidades presenciales y semi-presenciales estas incluyen las clases prácticas y la realización de seminarios. El uso de estas alternativas acercara más al estudiante universitario a constatar la historia de la localidad. El trato con estas opciones le propiciará no solo retomar el conocimiento aprendido de modo elemental sino identificarse y comprometerse con la ideología que defiende. La consulta de bibliografía actualiza ha permito la compilación de elementos utilizados en la investigación. Asimismo el uso de técnicas estadísticas que constataron el nivel de aceptación de esta oferta.

          Palabras clave: Historia. Ideología. Interacción.

 

Abstract

          This paper proposes the strengthening of ideology in university students from Las Tunas. It reflects some alternatives to use for teachers of the discipline Defense Preparedness (PPD). This is possible through knowledge that is taxed in the historical pan 50s and its impact on college students for homeland defense. Universities should make use of tools that foster feasible approach to knowledge of their locality. In this sense, interaction with cultural and historical institutions insertion characterizing activities. Rescue addition tangible and intangible, able to establish links between the teachers of the discipline and preparation for defense specialists Museums, Memorials and places of the town. Also set the meeting with personalities from different historical moments that have been traveled. The proposal is given in the spaces that support Preparation Programs for Defense. In embodiment’s semi-face and face these include practical classes and seminars. The use of these alternatives comes closer to college student to verify the history of the town. Dealing with these options will lead to not only pick up the knowledge learned so elementary but identify and engage with the ideology that defends. The query has updated bibliography allow the compilation of items used in research. Also the use of statistical techniques who found the level of acceptance of this offer.

          Keywords: History. Ideology. Interaction.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 18, Nº 184, Septiembre de 2013. http://www.efdeportes.com/

1 / 1

Introducción

    Es crecido el trabajo del país en propiciar el conocimiento sobre la historia de las todas las localidades. La televisión, la radio, los cursos de Universidad para todos y los documentales han sido herramientas fundamentales para el acercamiento del conocimiento de la etapa revolucionaria.

    El rescate de valores y de la identidad forma parte del incentivo de cada enseñanza por la que transitan los jóvenes tuneros hasta llegar a nosotros como Universidad. El estudiante solo durante el 3er año de la carrera tiene esta posibilidad.

    A pesar de esto son insuficientes las acciones para que llegue a existir un pleno dominio de la Historia Local. Es débil la coordinación de los departamentos de extensión universitaria con las instituciones históricas culturales del municipio, el vínculo con luchadores de la clandestinidad y el rescate de objetos patrimoniales que marcan esta etapa. Por ende, la falta de motivación en la participación de forma espontánea en las actividades caracterizadoras que abordan esta temática.

    Por lo que se genera el siguiente problema: Cómo fortalecer los Programas de PPD para la enseñanza Superior.

Objetivo general  

  • Implementar acciones para establecer el vínculo del patrimonio tangible tunero con los Programas de PPD en la Facultad de Cultura Física.

Objetivos específicos

  1. Revisar la bibliografía existente sobre la temática abordar.

  2. Diseñar acciones para fortalecer los Programas de PPD.

  3. Establecer el vínculo del patrimonio tangible tunero con los programas de PPD de la enseñanza Superior.

Desarrollo

    El estudio de la localidad tunera ha sido una necesidad impostergable. Desde el caudal que recoge la provincia en las diversas etapas insurreccionales. En ese sentido, se pretende en este trabajo establecer el vínculo del patrimonio tangible existente para el trabajo en la enseñanza universitaria.

Taller 1.     ¡La Historia entre nosotros!

- Objetivo: Reflexionar en la influencia del Panorama económico-social de las Tunas en la década del cincuenta en las clases prácticas de la asignatura por parte.

- Operaciones: se realizará por parte de luchadores clandestinos entrevistas con los estudiantes del tercer ano estableciendo un intercambio.

Las Tunas en el periodo de 1952-1958

    Es en la década del cincuenta cuando tiene lugar en el país la fase definitiva de las luchas revolucionarias que culminaron con el triunfo del primero de enero de 1959, período en el que ya habían madurado las condiciones objetivas y subjetivas para ese trascendental acontecimiento histórico.

    Como parte de la nación la provincia fue escenario de un impetuoso auge del movimiento revolucionario, condicionado por las graves secuelas que para la población de esta región provocaron el casi medio siglo de sometimiento al imperialismo y la desatención a sus problemas vitales por parte de los gobiernos lacayos y sus representantes locales.

    El análisis de parámetros tan esenciales, como empleo, ingresos, vivienda, salud y educación para determinar el estado de la población en esta década decisiva, resulta elemental, ya que como se verá, en todos los casos el territorio estuvo por debajo de la media nacional. Por tanto se encuentra aquí fuertes razones para explicar el por qué de la masiva incorporación del pueblo a la lucha.

    De acuerdo con el censo de 1953 la provincia contaba con 215 mil 420 habitantes. De ellos 61 mil 217 urbanos y 154 mil 123 rurales.

    El 66 % de la población activa se empleaba en la agricultura, un 24,5% superior a la media nacional, la mayoría de las tierras se dedicaban al cultivo de la caña y estaban monopolizadas por grandes latifundistas nacionales y extranjeros, entre estos últimos se destacaban las compañías: Manatí Sugar Co, The Francisco Sugar Co, Cuban American Sugar Co y la The Cuban Co.

    En 1953, el 13,9% de la fuerza de trabajo estaba desempleada sin contar las amas de casa y los trabajadores por cuenta propia, además de que ese dato se tomó en los meses de zafra, cuando las tasas de desempleo descendían.

    Los ingresos de la población eran muy bajos, con salarios de miseria para los trabajadores del campo y la ciudad, los que oscilaban entre un peso y 1,25 diario.

    El desarrollo industrial estaba matizado por la existencia de los centrales azucareros con tecnologías atrasadas y algunas pequeñas fábricas de producción local.

    En 1959 al triunfar la revolución, Las Tunas solo contaba con 58 médicos que significaba el 0,009 % del total de los existentes en el país y era la de menos cantidad de camas hospitalarias por habitante, con la irrisoria cifra de 317. Es decir 1,7 por cada mil habitantes, mientras la proporción del país era de 3,3.

    No había policlínicos ni hospitales rurales, solo algunos hospitales estatales, casas de socorro y clínicas particulares en las ciudades. Eran altos por cientos de la población con parasitismo y enfermedades curables, lo que se acentuaba aún más en el campo.

    De las 40 mil 294 viviendas existentes el 58,7 % estaban construidas de yagua o madera y piso de tierra y el 74,3 fueron evaluadas con las categorías de regular o mal.

    De crítica puede calificarse la situación educacional con solo ofrecer algunos datos:

    El analfabetismo de la población de seis a nueve años de edad alcanzaba el 82,9%, la más alta de todo el país. Los iletrados en la población de 10 años y más ascendían a 40,3 %, faltando solo tres décimas para ubicarse en un 20% por encima de la media nacional (23,5%). Los dos municipios (Las Tunas y Puerto Padre) sumaban el 47,8% de la población de seis años o más sin ningún grado aprobado, mucho más alto que la media nacional que era de 30,9%.

    Esta es una parte de la triste realidad en que vivía la población, la educación era un privilegio y no un derecho de los ciudadanos, se había convertido en un negocio lucrativo más, explotado por capitalistas nacionales y extranjeros.

Taller 2.     Meso- Sur

- Objetivo: Debatir la participación de los municipios al sur de la provincia en las luchas campesinas y los grupos armados de esta zona.

- Operaciones: se hará la presentación de piezas museables entregadas por los familiares de luchadores clandestinos del sur de la provincia donde ella hará una reseña de la intervención de estos grupos en la lucha revolucionaria

    En un territorio donde el 71,5% de la población vivía en el campo el problema de la tierra constituyó el centro alrededor del cual se movieron intereses, abusos y ambiciones. Latifundistas nacionales y extranjeras a pesar de tener en su poder grandes extensiones se enfrentaron a lo largo de toda la república Mediatizada a los campesinos, para los que la tierra era el único medio de vida.

    Las compañías norteamericanas que controlaban los seis centrales de la provincia, contaban con 24 mil 209 caballerías de tierras dedicadas al cultivo de la caña. Estas entidades azucareras, junto a otras que tenían intereses ganaderos y hasta citrícolas, en más de una oportunidad maniobraron para extender sus propiedades a costa del sacrifico de los campesinos.

    Esta provincia tiene tradición en las luchas campesinas contra los desalojos, las cuales tienen su colofón en el período 1935-1958.

    En la década del cincuenta la zona sur fue la más afectada por esas luchas, destacándose por su pujanza las del “Realengo” Las Maboas, en Amancio (antiguo Francisco).

    Los campesinos de este lugar se enfrentaron heroicamente a las pretensiones geófagas de la compañía azucarera The Francisco Sugar Co. y a la compañía ganadera King-Ranch, conocida en la zona como Rancho King, las cuales se confabularon para apoderarse de aquellas tierras.

    Desempeñaron un glorioso papel en la organización y lucha de los campesinos, el Partido Socialista Popular, el Movimiento 26 de julio, las asociaciones campesinas y el Frente Democrático de Mujeres Cubanas, organizaciones que el 5 de marzo de 1958, constituyeron el frente Único.

    Los campesinos se enfrentaron victoriosamente a todas las formas violentas utilizadas por las compañías: cerraron las trochas abiertas en sus tierras, lucharon contra la Guardia Rural, sufrieron prisión, a muchos les quemaron sus viviendas y otros tuvieron que abandonar la zona para incorporarse al Ejército Rebelde.

    En esta combativa región sur del territorio tunero, orientados por el Movimiento 26 de julio se alzaron varios grupos armados, en el decisivo y glorioso año de 1958, destacándose los dirigidos por Orfilio Ramos, Francisco Peña, Anselmo Jerez, Julio Aguilera y José García.

    Estas agrupaciones desarrollaron varias acciones para secundar la Huelga de Abril y sus actividades se reforzaron con la llegada a ese territorio del pelotón de Roberto Reyes, el Baracoense.

    Entre las acciones se pueden destacar: la quema del almacén de azúcar del central Colombia, varios ataques e instalaciones y medios ferroviarios donde se le ocasionaron numerosas pérdidas materiales y humanas al ejército y un combate en la Federal. Un hecho lamentable fue la caída gloriosa del teniente Roberto Reyes en un enfrentamiento con el ejército el 11 de julio de ese año.

Taller 3.     Histo - Debate

- Objetivo: Explicar la incidencia del movimiento 26 de julio y los grupos armados en la zona de Las Tunas y Puerto Padre.

- Operaciones: se realizará un intercambio entre luchadores clandestinos con los estudiantes

    Como se conoce, el golpe de estado de 1952 sirvió para polarizar aún más a la sociedad cubana de aquella época. Algunos partidos y organizaciones pasaron a la oposición contra el gobierno y otros se formaron al calor de aquel trágico acontecimiento. Entre las organizaciones opositoras que tuvieron sus seguidores en Las Tunas y Puerto Padre; estuvieron las politiqueras O. A. (Organización auténtica) y la Triple a (Frente Nacional democrático Acción Auténtica Armada) y con posiciones diametralmente opuestas a las primeras el ARO (Acción Revolucionaria Oriental), posteriormente ANR (acción Nacional Revolucionaria) y el movimiento de Resistencia Cívica.

    Las de mayor arraigo fueron la ortodoxia, el Partido Socialista Popular y el Movimiento 26 de Julio (M-26-7), este último se originó a partir de los jóvenes de la línea insurreccional ortodoxa, los cuales se convencieron de que la única alternativa era la lucha armada. El grupo de los 18 en Las Tunas es el ejemplo más elocuente, el cual tiene una gran importancia por ser una organización autóctona y porque su evolución dio lugar al M-26-7 en la ciudad de Las Tunas. Esta agrupación comenzó a graduarse desde 1952 y el 9 de mayo de 1955 en una histórica reunión efectuada en La Aguada de Vázquez se autodenominaron “Los 18” precisamente por concurrir a la cita esa cifra. Allí tomaron la decisión de enviar a uno de sus integrantes a entrevistarse con Fidel para organizar el Movimiento. Después contactaron con luchadores destacados como Jesús Suárez Gayol, Cándido González, Armando Hart, Pedro Miret, Pepito Tey y Léster Rodríguez, lo cual favoreció la fundación del Movimiento 26 de Julio.

    Los sucesos del 26 de julio de 1953 en los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, reforzaron la fe en la victoria y como principales ecos inmediatos de estas acciones estuvieron: la participación de un combatiente de Puerto Padre (Juan Manuel Amejeiras) en el ataque al cuartel de Santiago de Cuba, lo que es un hecho poco conocido, cuatro combatientes de la acción de Bayamo fueron ocultados en Omaja en la casa de la familia Batista-Lores y desde allí enviados a Las Tunas y Camagüey; el día 28 de julio, los jóvenes ortodoxos de Puerto Padre se reunieron en la Playa La Gíbara para apoyar las acciones del Moncada. A finales de ese año se recibió un ejemplar mecanografiado del alegato de autodefensa de Fidel en el histórico juicio y en 1954 los hermanos Amejeiras (Gustavo y Ángel) trajeron hasta Las Tunas y Puerto Padre ejemplares de la “Historia me absolverá”, documento que se convirtió en el programa ideológico del movimiento revolucionario.

    La constancia del grupo Los 18 y la seguridad de la dirección provincial del M-26-7, de que en este territorio estaban creadas las condiciones, conllevaron a la estructuración del M-26-7 en 1955, con la honrosa presencia de Frank País y la dirección provincial de esta organización en Oriente. Después de fundarse la organización en Victoria de Las Tunas se procedió a formar la estructura en diferentes sectores de esta ciudad, en Puerto Padre y otros poblados como Vázquez, Bartle, Jobabo, Manatí, Yarey, Delicias y San Manuel, las cuales quedaban subordinadas a la célula central.

    El M-26-7 ejecutó varias actividades combativas entre las que se pueden señalar: la intensificación de la labor de propaganda, recaudación de fondos, entrenamientos armados, quemaron cañas, destruyeron puentes, interrumpieron el fluido eléctrico y las líneas telefónicas, entregaron a la dirección provincial un mapa y otra información estratégica de los principales enclaves militares, económicos y administrativos del territorio, incluyendo los de Gibara y Santa Lucía de Nuevitas.

    Para las acciones del 30 de noviembre de 1956 se formó el mando de las milicias del M-26-7, hubo acuertelamientos en espera de las armas que debían llegar desde Santiago de Cuba, lo que no se produjo.

    Esta situación impidió la ejecución de un amplio plan que incluía el ataque a varias instalaciones de la tiranía. No obstante se desarrollaron actividades, entre ellas la más destacada fue el asalto al Polvorín de la Cadena en Delicias, también tomaron el polvorín de Las Parras y destruyeron líneas telefónicas y eléctricas, así como tramos del ferrocarril de Bartle.

    Probatorio de la efervescencia revolucionaria en este territorio además de los hechos mencionados, está la relación de acciones que se ejecutaron desde noviembre de 1956, a diciembre de este año, las que fueron recogidas en un documento del ejército de la tiranía destacándose sabotajes a bienes de propiedad norteamericana y de capitalistas locales, como la quema de cañaverales y otras instalaciones para la zafra, la destrucción de puentes, almacenes y vidrieras de tiendas de comercio.

    Con el objetivo de aplacar la lucha revolucionaria y para dar un escarmiento, se incluyó a la población de este territorio en los macabros planes de las llamadas Pascuas sangrientas, en las que murieron 10 revolucionarios: seis del PSP, dos auténticos y dos del M-26-7. La mayor cantidad de víctimas correspondieron al vecino territorio holguinero donde un total de 14 hombres fueron asesinados.

    Con esta acción se pretendió descabezar el movimiento revolucionario de la zona norte de Oriente, pero el tiempo se encargaría de demostrar que cuando el pueblo es el protagonista principal de la historia no hay fuerza capaz de detenerlo.

Taller 4.     ¡Historiando y conociendo!

- Objetivo: mostrar la colección de periódicos que atesora el “Memorial 26 de julio” en el municipio que relaten los principales acontecimientos de la etapa a tratar.

- Operaciones: se realizaran diversos grupos en la brigada por parte de la museóloga para tratar la lucha insurreccional en los años 1957 - 58 donde los estudiantes serán los que protagonicen.

    Grupo 1: Noviembre y diciembre de 1956 fueron meses duros para el movimiento revolucionario. La dirección del M-26-7 en Las Tunas había sufrido cambios y la represión se había agudizado.

    El 5 de agosto de 1957 tuvo lugar una importante reunión en La Boca donde asistieron delegados de las células de Puerto Padre, San Manuel, Vázquez, Chaparra y Delicias. Uno de los objetivos fue apoyar la huelga que tenía lugar en Santiago de Cuba para condenar la muerte de Frank País y el otro, fue reorganizar el movimiento, el cual adquirió desde ese momento una estructura municipal.

    El movimiento clandestino incrementó sus acciones en estos dos últimos años con las que debilitaban las bases económicas y militar del régimen y daban un fuerte apoyo a la lucha guerrillera. Entre ellas se pueden mencionar: la explosión de bombas, petardos y cócteles molotov en establecimientos estatales y privados, incendios de cañaverales, puentes, correo, cuarteles, atentados a la fuerza pública.

    Mantenían comunicaciones con la Sierra Maestra, mediante la utilización de plantas de radio y una red telefónica. La liberación de los poblados de San Manuel y Vázquez en octubre y noviembre son hechos que se destacaron notoriamente por la combatividad del movimiento clandestino y la guerrilla.

    En este contexto, la aparición en el primer cuatrimestre de 1958 de los grupos armados y posteriormente el paso de las columnas invasoras, las avanzadas de Oriente a Camagüey y el establecimiento de las Columnas 12 y 32 aceleraron la derrota de la tiranía.

    Fueron numerosos los grupos armados que se crearon entre los que se destacaron los dirigidos por Benigno González, Marcos Carmenate, Concepción Rivero, Walfrido Agüero, Gregorio Ortíz, José Santiago Ercilla, en Las Tunas y los de José García, Emilio Rafael Vega, Isael Cruz, Fabio Quesada, Juan Quevedo, Pedro Galindo, Ernesto Mayo, Iván Leyva, Otto Muster y Lizardo Proenza, en Puerto Padre.

    La comadancia general en la Sierra Maestra realizó continuos esfuerzos por organizar a esas agrupaciones e integrarlas de manera coherente a la lucha contra la tiranía. Existen varias constancias escritas de las gestiones personales realizadas en este sentido por prestigiosos dirigentes entre los que estuvieron; Camilo Cienfuegos, Osvaldo Herrera, Cristino Naranjo y Oscar Orozco.

    Estos grupos armados desempeñaron un importante papel en la creación de las condiciones político-militares que favorecieron las futuras acciones del ejército Rebelde en la región. Entre las que pueden destacarse: atentados a oficiales y soldados, destrucción de trenes, vías ferroviarias, vehículos y carreteras, encuentros armados con patrullas y convoyes del ejército, ataques a instituciones del estado, la liberación de San Manuel y Vázquez, el combate de Ojo de Agua, ataque al cuartel de los masferreristas en Las Tunas, la toma del Puesto Naval de la Marina en Manatí, el secuestro del ómnibus Santiago-Habana, etc.

    Algunos de los caídos en esta etapa de la lucha fueron: Julio Báez, los hermanos Madrigal-Pavón, Agustín Vázquez, Antonio López Escobar, Rafael Rivero, Felino Hernández, Ángel Ávila Utria, José Rodríguez López y Jorge Rodríguez Nápoles.

    Perjudicial para la causa revolucionaria en la región fue la actuación de Walter Santiesteban, un agente de la tiranía que logró penetrar las fuerzas revolucionarias, dirigió a un grupo de hombres armados a los que convirtió en víctimas de sus fechorías. El hecho más lamentable fue la masacre del Güiral el 3 de mayo de 1958, donde murieron once insurgentes al ser atacados por fuerzas terrestres y áreas en un cayo de monte que no ofrecía ninguna posibilidad para escapar. Los caídos se nombran: Adonis Cabrera, Camilo Peña, Melanio Ortíz, Israel Marrero, Eligio Fonseca, Octaviano Vázquez, Hermenegildo Concepción, Fidencio Mayo, Ernesto Velázquez, Juan Evangelista Espinosa y Alcino Pérez Sánchez.

    Por el territorio de Las Tunas pasaron las avanzadas de Oriente y Camagüey con el objetivo de preparar las condiciones para la lucha en ese territorio. Entre ellas se destacan los pelotones de los tenientes José Botello Ávila y Roberto Reyes (El Baracoense) enviados por Orlando Lara, quien cumplía órdenes del Comandante en Jefe Fidel Castro.

    También pasaron las columnas invasoras de Camilo y Che, las que fueron recibidas y apoyadas con alimentos, medios de transporte, ropas, zapatos y con prácticos. Durante su trayectoria por la actual provincia Las Tunas solo tuvieron un enfrentamiento con el enemigo en la Federal (Colombia).

    Las columnas 11 y 13 destinadas a combatir en la provincia de Camagüey y también fueron acogidas en Victoria de Las Tunas,

    Grupo 2: La columna 12 Simón Bolívar y la columna 32 José Antonio Echavarría.

    La llegada de las columnas 12 y 32 al territorio tunero en el último trimestre de 1958 marcaron la fase final y decisiva del triunfo revolucionario en estas zonas. Ambas fuerzas se constituyeron en la Sierra Maestra y estaban dirigidas por los comandantes Eduardo Sardiñas Labrada y Delio Gómez Ochoa, las mismas formaron parte del Cuarto Frente Oriental.

    A este frente y en especial a la columna 12, Fidel le asignó como misión principal “impedir el paso de tropas y recursos de la tiranía en cualquier dirección”.

    La columna 12 estableció su comandancia en San Joaquín y su zona de operaciones abarcaba los límites con Guáimaro hasta Buenaventura.

    Para darle cumplimiento a las indicaciones de Fidel esta fuerza desarrolló varios combates para interrumpir el tránsito por las carreteras y a partir de noviembre atacó los cuarteles de la tiranía en las ciudades. Pueden destacarse acciones como: el combate de la Guanábana, dos ataques a Jobabo, uno a Manatí, destrucción del puente sobre el río Jobabo, liberación de Bartle y como colofón, la liberación de la ciudad de Las Tunas el 1 de enero de 1959.

    La columna 32 tuvo su zona de operaciones fundamentalmente al norte y entre sus acciones se destacaron: el ataque a la ciudad de Bayamo, el combate de Arroyo el Muerto, emboscada en la Cadena, los enfrentamientos con Sosa Blanco en la entrada de San Andrés y en el río Cacoyogüin y la liberación de Puerto Padre el 25 de diciembre de 1958.

    Entre los caídos en este último período están: Calixto Sarduy, José Santiago Ercilla, Ador Baldonado, Ramón Mora, Reynaldo Rodríguez, Fernando Echenique, Manuel Olivé, Francisco Rivero, Luis Manuel Rodríguez, entre otros.

    El IV Frente y sus columnas hicieron un notable aporte a las batallas victoriosas del ejército Rebelde, considerado como el principal factor en la derrota de la tiranía batistiana.

Conclusiones

    Fomentar la ideología a través del trabajo con los estudiantes nos ayudará a estar preparándolos no solo para la defensa de la patria sino también para conocer su identidad, formar y rescatar valores y que sean el canal más eficaz para el trabajo en la comunidad con los diferentes grupos de edades

Bibliografía

Citas y notas Las Tunas colonial

  1. Los tres primeros historiadores de la isla de Cuba. Imprenta y librería de Andrés Pego. La Habana, 1876. Tomo II. Pág. 107

  2. Macaca era colindante con Cueybá, estaba enclavada en el actual territorio de Bayamo.

  3. Guerra Sánchez, Ramiro. Manual de Historia de Cuba. Editorial Cultural. S.A. La Habana, 1988.

  4. Archivo de la Casa de la Nacionalidad Cubana en Bayamo. Tomado del Archivo General de Indias. Audiencia de Santo Domingo, Legajo 361. Libro 10 pp. 25-65.

  5. Gobierno General. Legajo No. 4118

  6. Del actual territorio de Amancio Rodríguez

  7. La deposición de Céspedes a pesar de estar basada en la constitución, erigiéndose en acto legal, estuvo plagada de ilegalidades, pues asumió la Presidencia de la República el Presidente Interino de la Cámara, prohibido constitucionalmente, se verificó con ocho diputados, cuando el quórum requerido eran nueve y fue una falta de tacto la concentración de dos mil hombres armados en el lugar donde se desarrollaba una sesión cameral, de esa transferencia. (N.del A.)

  8. Dr. José Manuel Pérez Cabrera. Documentos para servir a la Historia de la Guerra Chiquita. Vol. 11. La Habana 1950. P. 179

  9. Archivo Nacional. Fondo donativos y remisiones. Leg. 280 No. 30

Citas y notas. La Revolución en el poder

  1. Datos del Archivo Provincial del MINAGRI. Dpto. Jurídico.

  2. El 6 de agosto de 1960 fueron nacionalizados además de Chaparra y Delicias los Centrales Francisco y Elia, pertenecientes a la The Francisco Sugar Company, el central Manatí propiedad de la Sugar Co. y el central Jobabo, propiedad de la compañía Cubana SA.

  3. Los Bancos Canadienses no se nacionalizaron por la vía de expropiación forzada sino que se compraron.

  4. Archivo provincial del MINAGRI. Dpto. Jurídico.

  5. T. Gobierno Provincial de Oriente. Informe resumen de la nacionalización en la provincia de Oriente. Pág. 1 28-32-46 y 100-107 F cajuela J. 1968 del 14 de marzo al 3 de abril de 1968. Archivo PCC Provincial, Santiago de Cuba.

  6. Comité estatal de Estadística. Delegación Provincial Las Tunas. Dpto. Estadística global.

  7. Informe de Rendición de Cuentas Asamblea Nacional del Poder Popular. Asamblea Provincial de Las Tunas.

  8. Anuario estadístico de Cuba, 1988.

  9. Comité Estatal de estadística. Caracterización general económico-social de la provincial

De los autores

  1. Pedro Fernández Rodríguez. (Las Tunas). Lic. Marxismo Leninismo,

  2. Juana María Cardosa Rafael. (Jobabo,).

  3. Ricardo Avalos Avilés, (Las Tunas) Lic. en Historia

  4. Jorge Rad Alonso

  5. Ramón Garrido Padilla, arqueólogo.

  6. Víctor Manuel Marrero Zaldívar, Lic. Historia.

  7. Clara Machado Osorio Lic. Historia y Ciencias Sociales

  8. Alberto Pupo Vázquez Lic. Historia y Ciencias Sociales.

  9. Humberto Quintero Hidalgo Lic. Historia y Ciencias Sociales.

  10. Maritza Díaz Cardona Lic. Filosofía

  11. Eduardo Garcés Fernández Lic. Historia.

  12. Raquel Cruz Betancourt Lic. Español, Literatura y Marxismo Leninismo

  13. René Pupo Peña, Lic. Ciencias Sociales

  14. Plácido Cruz Infante Lic. Historia y Ciencias Sociales

  15. Sara Aguilera Martínez

  16. Teresa de la Caridad Feria González graduada del Superior de Historia

Complementarias

  1. Guerra Sánchez, Ramiro. Manual de Historia de Cuba, edit. Cultural S. A. La Habana.

  2. Le Riverent, Julio. Historia económica de Cuba. Instituto Cubano del Libro. Pueblo y Educación. La Habana, 1971.

  3. Pezuela, Jacobo de la. Diccionario geográfico, estadístico e histórico de la Isla de Cuba. T. III.

Otros artículos sobre Historia

  www.efdeportes.com/
Búsqueda personalizada

EFDeportes.com, Revista Digital · Año 18 · N° 184 | Buenos Aires, Septiembre de 2013
© 1997-2013 Derechos reservados