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¿Británicos ‘importados’ o ‘nacionales’? Políticas de identidad
y representaciones de los medios de prensa ingleses sobre el
‘Equipo GB’ durante los Juegos Olímpicos de Londres 2012

 

*Cursó su PhD en Sociología del Deporte en la Universidad de Loughborough y es disertante

en la Escuela de Ciencias Sociales Aplicadas de la Universidad de Durham. Su interés

investigador se centra en la representación de los medios de comunicación sobre deporte

e identidad nacional, cultura de los fanáticos del fútbol y violencia en el fútbol

**Cursó su PhD en Sociología en la Universidad de Leicester y es, actualmente, Profesor

de Sociología del Deporte en la Escuela de Deportes, Ejercicios y Ciencias de la Salud

de la Universidad de Loughborough y Profesor Invitado en la Universidad de Copenhague

y en la Universidad de Western Cape. Ha sido Presidente tanto de la Asociación Internacional

de Sociología del Deporte como del 27 Comité Internacional de la Asociación de Investigación

en Sociología (Sociología del Deporte). Recientemente ha recibido el "Premio a Servicios Distinguidos" 

de la Sociedad Norteamericana de Sociología del Deporte y el premio

"Miembro Honorario" de la Asociación Internacional de Sociología del Deporte

Emma Poulton*

Joseph Maguire**

J.A.Maguire@lboro.ac.uk

(Gran Bretaña)

 

 

 

 

Resumen

          Este artículo se centra en la relación dinámica entre los medios de comunicación del deporte y la identidad nacional en el contexto de los Juegos Olímpicos de verano en Londres 2012. Específicamente, la atención está fijada en la construcción y representación del "Equipo GB" por parte de la prensa inglesa durante el proceso previo a la realización de los juegos en Londres 2012 y con el fondo de las políticas de identidad británicas. Las pasiones del deporte pueden reflejar los ánimos prevalentes en el clima geopolítico amplio y, a menudo, también reforzar o generar dichas corrientes sociales. Se ha utilizado un análisis cualitativo de contenido para examinar las formas por las cuales la narrativa sobre los "Británicos importados" ha sido construida, reconstruida y representada por medio de imágenes y textos por parte de la prensa británica durante los Juegos de Londres 2012. Un análisis cruzado de 6 periódicos ingleses ha estado sujeto a este análisis interpretativo desde el 3 de agosto de 2012 (día de la ceremonia de apertura) hasta el 19 de agosto de 2012 (una semana después de la ceremonia de finalización). Ofrecemos tres líneas principales de hallazgos de nuestro análisis de la cobertura periodística: (1) aún cuando está presente en los momentos previos a la realización de los Juegos Olímpicos, la narrativa de los "Británicos importados" permaneció ausente durante el desarrollo mismo de los Juegos; (2) el rendimiento de los miembros "importados" del "Equipo GB" fue minimizado en los discursos correspondientes a las relaciones entre los extranjeros y los naturales: los éxitos de los "Británicos importados" fueron celebrados pero no tanto como los correspondientes a los "británicos nacionales", mientras que sus fracasos fueron relegados a comentarios secundarios; (3) el hecho de ser anfitrión de los Juegos Olímpicos y mostrar el país al mundo fomentó en periodistas y políticos por igual un intento de entender una Gran Bretaña más moderna, así como una reinterpretación del concepto.

          Palabras clave: Identidad nacional. Políticas de identidad. Relaciones entre naturales y extranjeros. Britanidad. Carácter británico. Patriotismo de los medios de comunicación.

 

Traducción: Rafael Bordabehere (Uruguay)

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 17, Nº 175, Diciembre de 2012. http://www.efdeportes.com/

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Introducción

    Este artículo se centra en la relación dinámica entre los medios de comunicación del deporte y la identidad nacional en el contexto de los Juegos Olímpicos de verano en Londres 2012. Específicamente, la atención está fijada en la construcción y representación del "Equipo GB" por parte de la prensa inglesa durante el proceso previo a la realización de los Juegos en Londres 2012 y con el fondo de las políticas de identidad británicas. Ello se encuentra marcado por la naturaleza contestataria que existe entre el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, con el Primer Ministro de Escocia, Alex Salmond, del Partido Nacionalista Escocés abogando por la independencia de la Unión, mientras que sectores del Reino Unido, escépticos de lo europeo, continúan la batalla para encontrar un estatus geopolítico posterior al Impero.

    Una característica adicional de esta concurrencia de políticas de identidad británica es el permanente debate sobre qué constituye "britanidad" en la Bretaña multicultural de hoy en día. A pesar de ello, la mayor proporción de la prensa analizada en este estudio representa la tensión existente entre quienes sostienen que los "recién llegados" deberían adherir a las tradiciones británicas y quienes ponen el énfasis en el respeto por la riqueza de la diversidad en la cultura británica moderna (para más información véase Fenton, 2007; Kumar, 2010; McCrone, 2002). Algunos de dichos sentimientos estuvieron reflejados en el tono de la información previa a los Juegos, mucha de la cual fue en general escéptica sobre la organización de los mismos debido a la escalada en costos y seguridad, al mismo tiempo que el Reino Unido intentaba capear la recesión global y las repercusiones de la crisis de la zona euro.

    Whannel (1998, p. 23) explica cómo “el sentido de pertenencia nacional se encuentra inscripto en las prácticas discursivas que persiguen movilizar las identidades nacionales como forma de captar nuestra atención con una hermenéutica narrativa. Deseamos saber quién va a ganar y "esperamos" que sea "nuestro competidor". Sin embargo, esto resultó complicado para Gran Bretaña durante los Juegos de Londres 2012 por la conformación del "Equipo GB". Algunos de sus miembros hubieron "adquirido" la ciudadanía británica en la forma de "doble nacionalidad" gracias a haber cumplido con el tiempo mínimo necesario de residencia o a gracias al matrimonio. Tanto los deportistas hombres como las atletas mujeres fueron catalogados de "británicos importados" por los críticos de los medios de comunicación ingleses, instigados por el periódico derechista Daily Mail, conocido por sus valores y temas conservadores tradicionalistas sobre multiculturalidad e inmigración. El rótulo, que pone en tela de juicio su autenticidad como "británicos", fue sostenido por la creencia que: “Los británicos importados están usando el Equipo GB para alcanzar sus propios sueños olímpicos” (Mail Online, 11 de junio 2011).1

    En el éxito o en la derrota, las pasiones del deporte, o como lo hemos definido en algún lugar "los sentimientos patrióticos cubiertos por los medios de comunicación" (Maguire y Poulton, 1999; Poulton, 2004), pueden reflejar los estados de ánimo prevalentes del clima geopolítico más amplio y, aún, pueden reforzar o engendrar dichas corrientes sociales. En consecuencia, es importante comprender el clima socio-cultural y político-económico, caracterizado en la actualidad por tendencias globalizadoras. La migración del trabajo de élite es una característica establecida del deporte de la "aldea global" (Maguire, 2008). Dicha inmigración involucra primariamente a atletas, pero también puede incluir a entrenadores, oficiales, administradores y científicos del deporte pertenecientes al complejo industrial más amplio del deporte. Mientras que Des Kelly, del Daily Mail (9 de marzo de 2012), hace referencia a ello como el "turismo atlético", este movimiento de trabajadores tiene lugar tanto dentro como entre naciones y continentes en términos globales, facilitado, en parte, por la creciente flexibilidad del mercado laboral transnacional (Maguire y Falcous, 2010). El trabajo atlético emigrante ha constituido una característica del deporte global desde hace algún tiempo, pero tanto su frecuencia como su dimensión han crecido en complejidad e intensidad en las décadas recientes (Maguire, 2008; Maguire y Falcous, 2010). Por tanto, este trabajo se presenta contextualizado teóricamente por dos conceptos interdependientes: políticas de identidad y procesos de globalización. Es con este marco sociológico y apoyado en el trabado de Norbert Elias (que también ha sido utilizado en otros estudios como Lee y Maguire, 2011; Maguire y Burrows, 2005; Maguire, Poulton y Possamai, 1999a, 1999b; Maguire y Poulton, 1999; Maguire y Tuck, 2005; Poulton, 2004; Vincent, Kian, Pedersen, Kuntz y Hill, 2010), este proceso es investigado por medio de la relación entre deporte e identidad nacional.

    Su objetivo principal es explorar el marco, la construcción y la representación de los miembros del "Equipo GB" en los niveles latente y manifiesto que están presentes en el discurso de los medios de prensa deportivos ingleses con relación a los Juegos de Londres 2012. Por medio de una variedad de técnicas y códigos de producción, en particular pronombres personales y referencias a rasgos nacionales y símbolos, el personal de los medios de comunicación del deporte contribuye a producir y reproducir las relaciones entre los nacionales y los extranjeros (Elias, 1991, 1994) por medio de la construcción y representación de una serie de identidades "yo/nosotros" y "nosotros/ellos" a nivel nacional (Whannel, 1992; Blain, Boyle y O’Donnell, 1993; Rowe, McKay y Miller, 1998; Crolley y Hand, 2002; Hills y Kennedy, 2009; Maguire y Poulton, 1999; Tuck, 2003; Poulton, 2004). Al examinar el uso de dichas prácticas periodísticas, es posible identificar precisamente quiénes son incluidos como miembros del "Equipo GB" por parte de la prensa inglesa o quiénes excluidos o rechazados como "británicos importados".

    Martin Samuel, columnista deportivo de Daily Mail, acuñó por primera vez el término "británicos importados" en junio de 2011 para designar a Tiffany Ofili-Porter, corredora de vallas norteamericana. En reacción al hecho que Ofili-Porter batió el récord de los 100 metros valla que ostentó durante 15 años la británica Angie Thorp’s, exclamó: "Hemos permitido que se lo haya robado una británica importada, quien aprovecha el Equipo GB para alcanzar sus propias ambiciones olímpicas" por medio de una "adopción personal" de la "bandera de Gran Bretaña, por conveniencia". La aflicción de Samuel estaba centrada en el entrenador en jefe del equipo de atletas del Reino Unido, el holandés Charles van Commenee, por su política y métodos de selección para construir un equipo más fuerte con miras a los Juegos de Londres 2012:

    Afortunadamente, él tenía un plan. Vamos a hacer trampa. No literalmente, obvio. Eso sería incorrecto. La trampa del Equipo GB es una manipulación más conveniente de las reglas, juntándose con nuestro pasado colonial, para crear la opción de asegurarse lo mejor de los deshechos de América y lo más curioso del medallero caribeño... [para llevar] la bandera de GB por conveniencia (Daily Mail, 13 de junio 2011).2

    Esto marcó el comienzo de un largo año de campaña del Daily Mail contra los "británicos importados", alegremente definidos como atletas nacidos en otro continente "que cambiaron su bandera" para competir por el "Equipo GB" (pero con algunas salvedades, tal como lo mostraremos), con rumbo a Londres 2012, lo cual se verá a continuación.

Métodos

    Whannel (1992, p. 121) advierte que “las estrellas están caracterizadas por un conjunto de narrativas" que son construidas y reconstruidas, producidas y reproducidas por la gente de los medios de comunicación. La base de las narrativas es rica, aunque un poco básica, dado que "el deporte ofrece todo lo que una buena historia puede ofrecer: héroes y villanos, triunfo y desastre, logros y desesperación, tensión y drama (Poulton y Roderick, 2008: XVIII). Whannel (2002) también identifica conjuntos de funciones de narrativa en la narrativización de las carreras de las estrellas deportivas, lo que contribuye a dar sentido a los momentos de sus vidas. Estas estructuras de narrativa pre-existentes incluyen: la "historia del éxito dorado", la "historia de los mejores y peores momentos" o la "narrativa de la ascensión y caída". Tal como lo sostienen Hills y Kennedy (2009: 113), "los códigos de narrativa existentes, utilizados para enmarcar los eventos de la carrera de una estrella deportiva," son útiles dado que "el análisis de las narrativas en los textos culturales puede iluminar los valores y discursos dentro de una cultura en particular".

    Aprovechamos el análisis de contenido cualitativo (Mayring, 2000) para explorar las formas en que la narrativa sobre los "británicos importados" fuera construida/reconstruida y representada por medio de textos e imágenes dentro de la prensa inglesa, antes y durante los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Previo a Londres 2012, adoptamos una visión directa por medio del motor de búsqueda Google para generar artículos de prensa pertinentes en relación a la construcción y reproducción de la campaña de Daily Mail contra los "británicos importados" utilizando claves combinadas como guía para identificar los códigos y unidades de análisis de partida. La aplicación de categorías deductivas nos ayudó a explorar el uso discursivo de temas y patrones pertinentes para comprender mejor la construcción/reconstrucción de la narrativa. Algunas palabras claves en el código incluyeron: "británicos importados", "Equipo GB", "bandera por conveniencia" y "nacionalidad doble/nacionalidad" junto a los nombres de los atletas identificados por el Daily Mail como "británicos importados".

    La búsqueda en línea también contribuyó a identificar los "momentos clave" en la campaña del periódico. Tal como fuera dicho anteriormente, todo comenzó en junio de 2011 (cuando la atleta nacida norteamericana Tiffany Porter compitió por primera vez en representación del "Equipo GB" y batió el récord de vallas británico) y se desarrolló previo a los Juegos, con su momento más álgido en marzo de 2012 cuando Porter fue designada capitana del equipo atlético de Gran Bretaña durante el Campeonato Mundial de Atletismo en Pista Cubierta. La narrativa se tornó interesante nuevamente para la prensa cuando la Asociación Olímpica Británica confirmó la integración del "Equipo GB" en julio de 2012. 156 periódicos en línea fueron analizados en los momentos previos a Londres 2012.

    Durante los Juegos mismos, un total de 6 periódicos ingleses fueron utilizados para este análisis interpretativo desde el 3 de agosto de 2012 (día de la ceremonia de inauguración) y hasta el 19 de agosto de 2012 (una semana posterior a la ceremonia de cierre). Ellos fueron: Daily Mail, de segmento medio; 2 tabloides: The Sun y Daily Mirror y tres periódicos de formato grande: The Times, The Guardian y Daily Telegraph (junto a sus equivalentes de los días domingo). Se accedió a la versión en línea cuando no fue posible obtener copias en papel. Las mismas palabras clave y nombres de atletas que fueran utilizados en el análisis cualitativo previo a Londres 2012, fueron aprovechados en el análisis de la prensa durante los Juegos. En total, se analizaron unos 573 artículos periodísticos.

    Considerando las restricciones en tiempo y espacio, incluimos aquí algunas lecturas iniciales y hallazgos: primero, sobre la construcción de la narrativa sobre el término "británicos importados"; luego, sobre la reproducción de la narrativa en la cobertura de prensa acerca del anuncio del "Equipo GB" para los Juegos Olímpicos; en tercer lugar, de la representación de algunos de los miembros reputados "británicos importados" del "Equipo GB" durante los Juegos de Londres 2012, por su nombre: Philip Hindes, Yamilé Aldama y Tiffany Porter, por las razones que se explicarán a continuación.

Construcción de la narrativa "británicos importados"

    Desde junio de 2011, los periodistas deportivos del Daily Mail construyeron de manera sistemática su narrativa en torno al concepto de "británicos importados", enmarcándolos como "extranjeros" a la noción colectiva del "Equipo GB". Algunos encabezados comunes fueron: “Los británicos importados están llegando (pero no hay plata de la Lotería para aquellos iguales a Kelly [Sotherton])”, se quejaba Neil Wilson porque la campaña olímpica de los "británicos importados" estaba solventada por la Lotería Nacional mientras que los nacidos en Gran Bretaña habían sido dejados de lado 10 meses antes (Daily Mail, 17 de octubre de 2011).

    El catalizador de la campaña del Daily Mail contra los "importados continentales" llegó con el nombramiento de la mercenaria Tiffany Porter como capitana del equipo atlético de Gran Bretaña durante el Campeonato Mundial de Atletismo en Pista Cubierta en marzo de 2012. "¡Ahora los británicos importados están asumiendo su lugar! Porter es una elección controversial como Capitana del Equipo GB” (Daily Mail, 8 de marzo de 2012). Wilson se quejaba: “No hay manera que yo entone el himno nacional cuando la "británica importada" Porter obtenga su medalla de oro” (Daily Mail, 9 de marzo de 2012). Al ella declarar que era "tan americana como la torta de manzana", él se lamentó: "Porter es una de las muchas atletas que se arropan por conveniencia bajo la bandera de los países, pero no del suyo propio".

    Jonathan McEvoy (Daily Mail, 8 de marzo de 2012), al reforzar la nacionalidad "real" de Porter, preguntó: "... durante el Día de la Independencia del año anterior... ¿Quién escribió este Tweet? Es el 4 de julio Deseo estar en los Estados Unidos para celebrar este día tan especial. Definitivamente, mi espíritu está ahí." McEvoy le dio la respuesta a los lectores: "Por supuesto que fue Porter, la arrivista auto declarada, que con la ayuda del entrenador en jefe holandés, que haría ingresar a un marciano si pudiera lograr todo el papeleo, utiliza a Gran Bretaña como un felpudo". Y con la trompeta patriótica en mano, McEvoy explicaba: "Los atletas británicos jugaron con liviandad con nuestra identidad nacional el jueves al designar capitana a una "británica importada" que no recitará (o no puede) las estrofas de Dios Salve a la Reina". Al cuestionar sus credenciales "británicas" durante una conferencia de prensa, McEvoy informó que había averiguado si ella sabía las estrofas del himno nacional: "El punto no es si ella conoce el himno nacional de memoria....sino si tiene alguna importancia real". Tal como lo indica el encabezado, McEvoy cree que: “Pudo haber sido Farah o Ennis pero nuestros atletas serán liderados por una británica importada” (Daily Mail, 3 de marzo de 2012). Su preferencia era para con quien él describió como "las dos grandezas modernas del deporte de terreno británico, Jessica Ennis y Mo Farah”.

    Esta última sugerencia resultó interesante considerando la narrativa del Daily Mail en relación a los "británicos importados". Mohamed Farah, un musulmán, llegó a Gran Bretaña desde muy joven luego de nacer en la conflictiva Somalia por lo que, bajo la óptica de Daily Mail, técnicamente era "importado". De hecho, no había consenso entre los colegas del Daily Mail acerca de si Farah debió haber sido aceptado como un "británico de ley" o excluido como "importado". Las relaciones entre los extranjeros y los nacionales eran el primer punto en la lista de los discursos mediáticos. Kelly hizo comentarios sobre la "controversia" que había generado el Daily Mail:

    Cuando la norteamericana Tiffany Porter hizo su primera y extraña reverencia como capitana del equipo atlético británico, todos fueron informados que ella no merecía el mote de "británica importada". ¿Quién dijo eso? El entrenador principal de Gran Bretaña, Charles van Commenee, al lado del campeón en 5000 metros Mo Farah, indicó que se sentía "disgustado" por todo lo que Porter debía enfrentar. Y, por tanto, un holandés que creció en Ámsterdam y el corredor somalí que vive en Portland, Oregon, vinieron de perillas para rechazar la acusación que Porter no era "suficientemente británica" (Daily Mail, 9 de marzo de 2012).

    A pesar de la negativa de Kelly en cuanto a la autenticidad de la britanidad de Farah, su colega Wilson acogió a Farah y lo separó de Porter y de su compañera americana Shana Cox, quienes clasificaron "por su afiliación parental con Gran Bretaña, la cual no habían optado por utilizar hasta que se volvió atractivo desde un punto de vista financiero y competitivo". Para Wilson, el caso de Farah era "muy diferente":

    Su cambio de nacionalidad no había tenido nada que ver con sus dotes atléticas o con buscar dinero o estatus. Farah llegó cuando estaba en edad escolar, traído por su padre, un residente de Gran Bretaña por ese entonces. Su carrera atlética completa había tenido lugar en Gran Bretaña bajo su sistema de entrenamiento y apoyo. Sus éxitos son éxitos de Gran Bretaña (Daily Mail, 8 de marzo de 2012).

    Aquí Wilson, a distinción de Kelly, decía que Farah "es uno de los nuestros", un "británico de ley", porque había estado inmerso en la cultura, educación y sistema de entrenamiento británicos desde su juventud, y no recientemente para obtener ganancias mercenarias. El desacuerdo entre los periodistas del Daily Mail se podía observar por todos lados. Por ejemplo, un encabezado en la revista New Statesman (13 de marzo de 2012) indicaba socarronamente: “‘Británicos importados’ y la lucha del Mail para decidir quién no es británico”. El columnista Suner Katwala escribió: "La polémica feroz de los periodistas deportivos de Mail contra algunos de los deportistas nacidos en el exterior que han clasificado para competir por Gran Bretaña ha puesto de manifiesto una inhabilidad cómica para ponerse de acuerdo sobre cuál es la identidad falsa de los británicos" (New Statesman, 13 March 2012). En otros lados, los comentarios de los otros medios de comunicación ayudaron a sostener la posición de la historia acerca de los "británicos importados" en la agenda de las noticias deportivas como forma de "mantener viva la noticia". La gran mayoría, dentro de la batalla de circulación, buscó mantener su distancia de la posición del Daily Mail. Desde el tabloide izquierdista Daily Mirror, Mike Walters escribió: "Ha llegado el momento de suspender el rótulo de 'británicos importados' a nuestros deportistas de nacionalidad dual." Al denunciar la ideología promovida por los sectores del ala derecha de los medios de comunicación y en un claro cambio de bando del Daily Mail en particular, declaró:

    De todos los rótulos maliciosos y peyorativos proferidos contra los deportistas de nacionalidad doble, "británicos importados" es el peor de todos por lejos. Por naturaleza, la frase divide y degrada. ¿Por qué no utilizar lo peor de todo y llamarlos buscadores falsos de asilo? Después de todo, eso es lo que quieren que creamos los soldados de la derecha, ¿no es cierto? (Daily Mirror, 15 de marzo de 2012)

    Algunos días después, Samuel del Daily Mail (instigador original del mote "británicos importados" durante el año previo), respondió reactivamente contra "el debate de los 'británicos importados', comenzando por esas páginas y llegando a todo otro periódico y, los sábados de noche, a la BBC News" sosteniendo:

    Hipócritas, xenófobos, patriotas importados; les hemos proferido algunos adjetivos esta semana para atrevernos a cuestionar la conveniencia de ser competidores de Gran Bretaña. El atletismo del Reino Unido dice que estamos prohibidos... De acuerdo a los periódicos, estamos desaforados. Tenemos el discurso de la derecha. Y todo por decir que sería mejor que el deporte internacional tuviera un sentido y que el equipo de Gran Bretaña fuera un reflejo real de los atletas y entrenadores británicos, despojados de falsos logros... Esto no es sobre patriotismo, pureza o temor de una invasión extranjera como les han hecho creer esos intelectos artificiales. En todo caso...va directo al espíritu y al sentido del deporte competitivo a nivel nacional y da cuenta de su decreciente valor en una época de oportunismos descarnados (Daily Mail, 12 de marzo de 2012).

    De esa manera, Samuel desafió al deporte británico y a la política extranjera: "Aún si los cuerpos del deporte internacional se niegan a adoptar el principio que indica que la nacionalidad sí importa, los eventos deberían contener a lo mejor de nosotros contra lo mejor de ellos. Si no: ¿cuál sería el propósito?".

    Las observaciones de Samuel ponen de manifiesto la naturaleza compleja y competitiva del deporte internacional (Maguire, 2012). Sin embargo, en un nivel de significación más latente (y a pesar de sus quejas en contra de ello) sus comentarios (y los de algunos de sus colegas del Daily Mail) pueden ser decodificados como una "política de inmigración" muy velada para la cual es necesario otorgar la ciudadanía británica (y, por lo tanto, permitir que nos representen) quienes fueran "extranjeros". La narrativa del "británico importado" puede ser leída como una visión de las percepciones de la derecha sobre Gran Bretaña y la "britanidad", subrayada por toda una anti-multiculturalidad que lucha para celebrar la nacionalidad doble como verdaderamente una de nosotros. Desarrollemos este debate un poco más.

Conceptualización de la narrativa del "británico importado": medios de comunicación, ciudadanía y políticas de identidad nacional

    La naturaleza controversial de la narrativa en torno a los "británicos importados" resalta temas complejos sobre ciudadanía, identidad nacional y políticas de identidad, así como también sobre las interconexiones entre logros deportivos, política de extranjería y migración de atletas de élite. Tal como lo advirtió Maguire (2008, p. 451): "Temas tales como el arraigo a un lugar, nociones de identidad auto determinada y lealtad a un país específico tienen su significación particular en este sentido." Para que estos temas tengan sentido, debemos considerar en primer lugar las relaciones entre los medios de comunicación del deporte y las políticas de identidad nacional antes de discutir sobre las políticas de identidad de Gran Bretaña, a pesar de las cuales tuvieron lugar los Juegos de Londres 2012.

    El deporte está ampliamente reconocido como una fuente importante de identificación colectiva y es, notoriamente, el símbolo de identidad nacional más potente y visible. Las confrontaciones deportivas internacionales actúan como una forma de batalla ritualizada que oficia de una representación simbólica de la competición entre estados (Elias, 1996). Sin embargo, es el entorno construido por los medios de comunicación para ese deporte el que crea vívidamente el significado ideológico y cultural del deporte. Por medio de la utilización de una variedad de códigos y técnicas de producción, los medios de comunicación del deporte contribuyen a la construcción y representación de las "relaciones entre extranjeros y nacionales" gracias a una serie de identidades "yo/nosotros" (Elias, 1991, 1994) y ‘nosotros/ellos’ a nivel nacional (Blain, et al. 1993; Crolley y Hand, 2002; Hills y Kennedy, 2009; Maguire y Poulton, 1999; Tuck, 2003; Poulton, 2004; Whannel, 1992).

    Es en este contexto en el cual el personal de los medios de comunicación juegan un rol principal al aprovechar los mitos de la colectividad y la unidad, poniendo énfasis en la nación como elemento incorporado a los atletas representantes (Rowe et al. 1998). De esta manera, el deporte de los medios de comunicación dispone del poder ideológico para representar y recrear la "comunidad imaginaria" de la nación (Anderson, 1993) a los niveles manifiesto y latente del sentido. "Nosotros" aprendemos sobre "nuestro" carácter nacional, "nuestra" historia y "nuestra" sociedad por medio de códigos nacionales de comportamiento (Lee y Maguire, 2011; Maguire y Burrows, 2005; Maguire et al. 1999a, 1999b; Maguire y Poulton, 1999; Maguire y Tuck, 2005; Poulton, 2004; Vincent, et al. 2010).

    Los megaeventos deportivos, como los Juegos Olímpicos, tienen una dimensión transnacional. De la misma forma, también ofician de vehículo para la expresión de identidades nacionales (Hilvoorde, Elling y Stokvis, 2010). La nación anfitriona, en particular, se encuentra en el centro mismo del espectáculo olímpico. Por oficio de la cobertura realizada por los medios de comunicación sobre las ceremonias de apertura y cierre y por la forma en que los atletas "nacionales" son cubiertos, se construye y representa la unidad nacional, la imagen propia y las percepciones externas. Estas ocasiones son propicias a los pueblos de las naciones anfitrionas para expresar tanto su propia esencia como su imagen colectiva (esto es: la identidad "yo/nosotros"). De esta forma, el personal de los medios de comunicación ayuda a los pueblos a inventar, imaginar e interpretar glorias pasadas y presentes y construir una imagen de lo que la nación es y de lo qué debería pensar y sentir su propio pueblo en el mundo contemporáneo. Desde una perspectiva del proceso sociológico, esos desarrollos y cambios de largo plazo en el comportamiento social de los pueblos, sus hábitos, están interrelacionados. Como observó Elias (1996: 151):

    El amor de uno por la nación no es nunca el amor a aquellas personas o grupos a los cuales llamamos "tú"; es siempre el amor a una colectividad a la cual nos referimos como "nosotros"... Sin embargo, la imagen de la nación que se siente como individuo que forma parte de esa nación, es también un elemento constitutivo de la propia imagen de la persona.

    La gente experimenta un sentido nacional de colectividad en la forma de representaciones personales de ellos mismos. Estas características personificadas en las memorias latentes y en los pensamientos conscientes encuentran su expresión, y son reforzados por, las instituciones nacionales, los símbolos y los sucesos colectivos de sentida importancia nacional tales como los eventos deportivos. Las memorias nacionales que resuenan en el inconsciente son despertadas con fuerza por la cobertura periodística de los medios de comunicación durante los eventos deportivos internacionales. En este contexto, la narrativa de quiénes "somos" y quiénes "son" ellos está siempre presente. Por medio del estudio del discurso de los medios de comunicación es posible explorar algunos de los procesos que enmarcan, construyen y representan a los hábitos nacionales. Es posible examinar cómo se forma y transforma la identidad nacional dentro y en relación a las representaciones que generan las nociones encontradas de identidad, lealtad y pertenencia. El estudio de los sucesos cubiertos por los medios de comunicación sobre los "británicos importados" destacan esas dinámicas de una forma muy vívida.

    Esto es: dichas "formas de ser" están construidas alrededor de un núcleo de significaciones que nos ayuda a saber quiénes somos, cómo pensar, cómo sentir y cómo comportarnos en nuestro carácter de ciudadanos de la nación (Maguire 2011; Maguire y Poulton, 1999). Como tal, los códigos de conducta a menudo encuentran su expresión en " sentimientos patrióticos cubiertos por los medios de comunicación" (Maguire y Poulton, 1999; Tuck, 2003; Poulton, 2004), que son construidos frecuentemente por personal de los medios de comunicación como contiendas vivas entre "nosotros" y "ellos". Por medio del estudio de los discursos de los medios de comunicación relacionados al deporte, es posible ver más vívidamente algunos de los procesos que enmarcan, construyen y representan a "nuestros" hábitos y caracteres nacionales y que, gracias a las prácticas discursivas, se vuelven más visibles.

    Esas prácticas discursivas del deporte, según es entendido por los medios de comunicación, por ejemplo, nos presentan un juego de imágenes, historias y símbolos generados conscientemente, que confieren sentido a lo que debe ser una parte de nuestra nación, en este caso el "Equipo GB". Para más información sobre la naturaleza compleja de Gran Bretaña, véase: Burdsey (2007), Falcous (2007), Hills y Kennedy (2009) y Reid (2010). Un hecho que ilustra este punto es conocer las estrofas de un himno nacional y entonarlas (activamente), tal como lo mostró la indignación del Daily Mail cuando Tiffany Porter rechazó una invitación para cantarlo.

La monarquía y la política de identidad británica en la Gran Bretaña moderna

    La narrativa del "británico importado" debe ser comprendida también bajo el contexto más amplio de un año en el cual el Reino Unido presenció el Jubileo de Diamante de Isabel II y los Juegos Olímpicos de Londres. De hecho, la construcción y reproducción de un "factor de bienestar" patriótico estuvo muy alto en la agenda de los medios de comunicación británicos desde la boda real del Príncipe William y Kate Middleton (Duque y Duquesa de Cambridge) en abril de 2011, con algunas pocas voces disidentes. Esto fue reforzado durante los Juegos Olímpicos mismos, por ejemplo, cuando los rostros de la familia real (en particular, los de los más jóvenes) tuvieron un papel protagónico tanto en los medios impresos como televisivos. Primero, la Reina y el Duque de Edimburgo participaron en la ceremonia de apertura, con la Reina misma protagonizando un papel estelar de un "momento televisivo" memorable al aparecer en un cuadro de James Bond, en una producción épica de Danny Boyle. Otros miembros de la familia real estuvieron presentes y mantuvieron su presencia a través de las actividades de los Juegos Olímpicos como "animadores" del "Equipo GB", liderados por los embajadores de la Asociación Olímpica Británica: el Duque y la Duquesa de Cambridge y el Príncipe Harry. El Príncipe William y Harry también fueron invitados de un estudio de televisión y entrevistados por Sue Barker durante la cobertura realizada por la BBC (3 de agosto de 2012). Su prima, Zara Phillips, integró el "Equipo GB" ecuestre y obtuvo la medalla de plata que le fue entregada por su madre, la Princesa Real (Presidente de la Asociación Olímpica Británica y atleta olímpica), quien también fue espectadora en varios eventos. Finalmente, el Príncipe Harry ofició de representante oficial de la Reina en la ceremonia de clausura.

    Los medios de comunicación ingleses fueron cómplices de este "ejercicio de RR.PP." de la familia real. Por ejemplo, una cobertura de página completa del Daily Mirror (9 de agosto de 2012;3) fue encabezada con un juego de palabras del himno nacional: "Dios salve al equipo" El artículo hacía referencia a un comunicado de prensa Real: "El Duque y la Duquesa y el Príncipe Harry están muy emocionados con los éxitos obtenidos por los atletas británicos." En referencia a algunos de los principios de la identidad nacional y los hábitos británicos, la prensa continuaba: "Ellos creen que los atletas y sus equipos de apoyo representan lo mejor de los británicos: dedicación, juego limpio, sentido del humor y amistad." El artículo finalizaba con un "tributo a los Reales por haber levantado el perfil de la nación, tanto en casa como en el exterior" realizado por el Ministro de Deportes y Olímpicos, miembro del Parlamento Hugh Robertson. Según sus palabras en referencia a los miembros reales jóvenes: "Su apoyo ha hecho la diferencia." El festejo conjunto de las celebraciones del Jubileo, los olímpicos y el rol de la familia real en el discurso de los medios de comunicación ingleses, reforzó las nociones tradicionales de "britanidad" y reinado que aparecían juntos (a pesar de los llamados a la independencia de los nacionalistas escoceses).

¿Cuántos "británicos importados" hay en el "Equipo GB"? Representaciones de la prensa inglesa previas a Londres 2012

    Seguidamente a la intensificación de la campaña del Daily Mail contra los "británicos importados" en su calidad de "extranjeros", con antelación al Campeonato Mundial de Atletismo en Pista Cubierta, la historia volvió a surgir nuevamente a medida que se acercaba la realización de los Juegos de Londres 2012. Esto no estaba liderado por el Daily Mail en primera instancia. En su lugar, otros periódicos pusieron la narrativa sobre los "británicos importados" en primera plana de la agenda de noticias deportivas realizando "reportajes" sobre la historia. Por ejemplo, la edición en línea de Daily Telegraph (10 de julio de 2012) mostraba una infografía detallando el origen externo al Reino Unido del 11% del "Equipo GB" y su procedencia. En artículo en línea tenía el encabezado: "Equipo GB": "Británicos importados" ¿de dónde vienen?" e indicaba que "60 de los 542 miembros del Equipo GB han nacido afuera". Simon Hart decía:

    Este es el tema que ha dividido a la opinión en el decurso previo hacia Londres 2012: si los atletas nacidos afuera (o "británicos importados" como se los denominó) tienen derecho o no a participar en lugar de un nacido en casa como competidor de los Juegos Olímpicos. Ahora el tema ha vuelto a refrescarse bajo la lupa atenta de una investigación realizada por el Daily Telegraph que reveló que de los 542 miembros del Equipo GB anunciados el lunes, 60 (el 11%) nacieron afuera. El número ha sido inflado con algunos atletas que han nacido afuera, de padres británicos, aunque la gran mayoría tiene dos nacionalidades y se ha unido a Gran Bretaña luego que Londres fuera elegido como el anfitrión 2012 siete años antes.

    Con la reproducción de la narrativa sobre los "británicos importados", Daily Telegraph (otro periódico conservador) pareció hacerse eco de la campaña del Daily Mail y de su posición ideológica. A manera de enfatizar la "controversia", Hart escribió:

    El asunto ha provocado un debate encendido en Gran Bretaña, en donde algunos críticos han catalogado a los recién llegados un poco menos que de mercenarios deportivos. Otros han argumentado que si un atleta tiene un pasaporte del Reino Unido, entonces tiene derecho a competir por la bandera de la unión.

    El artículo continuó con una cita de Andy Hunt, Ejecutivo en Jefe de la Asociación Olímpica Británica y jefe de misión del Equipo GB, quien defendió a las reglas de selección británicas como "claras y limpias".

    "No hay británicos importados" dijo. "En lo que a mí respecta, si usted es un ciudadano británico con pasaporte británico y es elegible para competir por este país, entonces ¡fantástico! Si gana un lugar en base al mérito, debe estar en el equipo... Si observa con detenimiento las reglas bajo las cuales se puede participar por este país, es muy muy difícil obtener la ciudadanía comparando con otros países. No negociamos con pasaportes, como lo hacen otras naciones. Sí, tenemos algunas personas en el equipo con doble pasaporte o que han obtenido su nacionalidad en años recientes, pero estoy muy contento con dónde hemos llegado y no hay británicos importados".

    La "investigación" del Daily Telegraph ayudó a aumentar la hoguera iniciada por Daily Mail. Un día antes que Daily Telegraph publicara sus propias conclusiones, Daily Mail (9 de julio de 2012) entregó a sus lectores la “Guía del Equipo GB”. Sin ninguna referencia explícita a los "británicos importados", el periódico presentó detalles de "fecha de nacimiento, lugar de nacimiento y lugar de residencia de los atletas". El sentido implícito era desacatar quién era un "británico de pura cepa" por medio de los detalles de su nacimiento y lugar de residencia por elección. Dos días después, las páginas deportivas de Daily Mail (11 de julio de 2012) fueron más explícitas con encabezados como "El Equipo GB tiene 61 'británicos importados' participando en los Juegos Olímpicos de Londres". Y el artículo declaraba: “La controversia sobre los 'británicos importados' se encendió nuevamente por la revelación que el Equipo GB tendrá 61 atletas nacidos en el extranjero competiendo este verano en los Juegos de Londres". Y explicaba cómo una “investigación del Daily Telegraph ha revelado que el 11% de los 542 atletas han nacido afuera”. Esta multiculturalidad británica contemporánea reflejada estadísticamente (12% de las personas de Gran Bretaña son nacidas en el exterior - New Statesman, 13 de marzo de 2012) fue inadvertida.

    De hecho, el mapa interactivo en línea de Telegraph Online destacaba cómo "8 de los atletas nacidos en el exterior habían representado a otros países" en instancias anteriores a su selección para el "Equipo GB". Ello incluía a las vallistas Yamilé Aldama, Shara Proctor y Tiffany Porter, quien había sido el comienzo original del debate del "británico importado" por parte de Daily Mail. Mientras que el atletismo recibió la mayor atención de los medios en las etapas previas a Londres 2012 en relación a los recién llegados del exterior, de hecho el equipo de atletismo de británico de 78 deportistas incluía relativamente pocos miembros del equipo nacidos en el exterior (8) comparado con otros deportes olímpicos. En handball, 9 de los 28 jugadores, contando hombres y mujeres, eran extranjeros, incluyendo a Yvonne Leuthold (Suiza) y Seb Prieto (Mónaco) mencionados por haber sido competidores por sus respectivas naciones con anterioridad. Entre los equipos de básquetbol femeninos y masculinos juntos, 8 de los 24 en total eran nacidos en el exterior, incluyendo uno de Australia, uno de Bermuda, uno de Sudán, dos de Canadá y tres de Estados Unidos (ver Falcous y Maguire, 2005 para leer sobre la "americanización" del básquetbol británico). La atleta ucraniana Olga Butkevych era el único miembro del equipo de lucha británico. Ella fue reclutada por el entrenador en jefe del equipo de lucha británico Nicolai Koryeyev (también de Ucrania) en 2007 como sparring del equipo británico y obtuvo su pasaporte unos meses antes de Londres 2012.

    Aunque estos detalles son dignos de mayor atención, nuestro foco aquí se centra en 3 de los 8 miembros del "Equipo GB" identificados por el Daily Telegraph como de haber intercambiado "fidelidad" y nos permite examinar cómo estaban representados la mayoría de los "británicos importados". Los olímpicos eran: Philip Hindes, Yamilé Aldama y Tiffany Porter. Su representación en la prensa inglesa nos permite ilustrar de manera más amplia la cuestión de las políticas británicas de identidad.

Representación del "Equipo GB" durante Londres 2012: ¿Británicos "importados" o "nacionales"?

    El éxito de los "británicos importados" mostró algunas de las corporaciones de prensa (en particular, aquellas surgidas del Daily Mail que han sostenido compañas contra ellos) que conllevan un desafío a las formas tradicionales de entender el heroísmo deportivo y la formación de la narrativa tradicional (Hills y Kennedy 2009). Los periodistas del Daily Mail se encontraron en el dilema de cómo enmarcar y "celebrar" las heroicidades y victorias de los atletas a los cuales se oponía su propio periódico, siendo estos atletas integrantes del "Equipo GB". ¿Deberían catalogarlos como "nacionales" o como "importados"?

    Aún desconocido para la prensa deportiva inglesa previa a los Juegos Olímpicos, Philip Hindes era parte integrante del equipo que obtuvo la medalla de oro en ciclismo en Londres 2012. Luego de su éxito, su compañero Sir Chris Hoy3 dominaba todas las primeras páginas (con excepción de The Times que contenía la medalla de Gran Bretaña del equipo masculino de slalom en canoa), y la prensa inglesa celebraba la quinta medalla de oro en jinetes (escocesa) que lo confirmaba como uno de los más exitosos olímpicos (junto con el ganador del Tour de France 2012, Bradley Wiggins, nacido en Bélgica y de padres británicos, un hecho pasado por alto por la prensa inglesa, y Sir Steve Redgrave cuyo récord fue batido por Hoy más tarde en los mismos Juegos al obtener su sexta medalla de oro). De hecho, hubo pocas menciones sobre los compañeros de equipo Hindes y Jason Kenny puesto que las heroicidades de Hoy se robaron los encabezados. Aunque no hubo menciones especiales a los "británicos importados", aún se pudo observar algo de política de identidades en la cobertura de Daily Mail dado que los periodistas mencionaron el hecho que Hindes era nacido en Alemania y pusieron de relieve su nacionalidad doble en una narrativa que sugería que Hindes era responsable de casi haber negado la medalla de oro de su equipo (y en especial Hoy)

    La historia se desarrolló aún más en la última página cuando Ivan Speck escribió: "Los ciclistas ganadores de la medalla de oro de Gran Bretaña se hundieron en una controversia la noche anterior luego que el compañero de equipo de Sir Chris Hoy declaró haberse caído intencionalmente luego de un inicio pobre. Philip Hindes de 19 años, nacido en Alemania, dijo que fue un ardid para forzar una salida nueva” (Daily Mail, 3 de agosto de 2012: 88). Esta narración no apareció en lugar destacado en otros periódicos. A pesar de ello, la nacionalidad doble de Hindes fue destacada, a veces poco, a veces mucho. Daily Telegraph (3 de agosto de 2012: 2) presentó “El heredero joven a la corona en Ciclismo" en un texto que explicaba cómo:

    Hindes, de 19 años, nacido en Alemania y participante en su equipo nacional hasta 2010, Hoy y Jason Kinner guiaron al Equipo GB a la conquista del récord en ciclismo... la madre de Hindes es alemana y él ingresó al programa de la academia británica de ciclismo recién en octubre de 2010 gracias a su padre, un aviador de la Fuerza Aérea Real, que sirvió en Alemania.

    Su parentesco también fue destacado por otros periódicos aunque es muy importante notar qué padre (y por tanto qué nacionalidad) figuraba primero y el énfasis puesto en que su padre había servido a las Fuerzas Armadas Británicas. Por ejemplo, The Sun (suplemento The Games, 3 de agosto de 2012: 4) se abstenía de utilizar su prefijo "alemán", describiendo al "joven Hindes, hijo de un soldado británico con base en el exterior y criado en Alemania" (británico primero, alemán después). De manera similar, Richard Williams escribiendo para The Guardian (3 de agosto de 2012: 3) nos contó cómo: "Hindes tiene un padre británico y una madre alemana y estuvo representando al país de su madre cuando niño hasta que el entrenador de Ciclismo británico lo sacó, en el último año, para integrar un trío en carácter de líder. La noche anterior, Alemania conquistó el bronce". The Sun (suplemento The Games, 3 de agosto de 2012: 4) también buscó enfatizar que Hindes representaba una "jugada maestra" para el "Equipo GB", destacando cómo hacía dos años antes él era un "joven alemán... nacido de padre británico... ansioso por cambiar de bando". Mientras tanto, Daily Telegraph (3 de agosto de 2012: 2) arrojaba luz aparente sobre la situación describiendo a Hindes como "un alemán con un padre británico que había aprendido inglés mirando los DVD de Inbetweeners.”

    La representación de Hindes indica que existía un sentimiento patriótico complejo en el discurso de los medios de comunicación dado que su contribución al éxito de la medalla de oro desafiaba el conocimiento convencional del heroísmo deportivo británico. Como hemos hecho notar en otros lados, los sentimientos anti-germánicos son una característica del discurso de los medios de comunicación ingleses (Maguire et al. 1999a, 1999b; Maguire y Poulton, 1999; Poulton, 2004; Maguire y Burrows, 2005). Mientras Daily Mail se abstenía de etiquetar a Hindes como "británico importado" en vistas de su éxito, el periódico se negaba a acogerlo como un "británico de pura cepa" o como miembro "nacional" del Equipo GB". En su lugar, Daily Mail, y otros periódicos en menor medida, reforzaban el hecho de ser un "nacido en Alemania" y que su error de juicio casi le cuesta a Gran Bretaña la victoria de su "tesoro nacional", Hoy.

    La atleta de salto largo Yamilé Aldama tuvo su cuarto de hora en los medios de comunicación en los momentos previos a los Juegos Olímpicos ridiculizada por algunos como la más atroz de los llamados "británicos importados" dado que había representado a otros dos países antes de obtener la ciudadanía británica y competir por el "Equipo GB". También había sido la más locuaz al defender su ciudadanía británica por haber contado su biografía, compleja y convincente, en varios artículos periodísticos. Por ejemplo, su historia fue descrita en una entrevista de página principal del Telegraph Magazine (16 de junio de 2012: pp. 26-33), denominada: "Tres pasos hacia el paraíso: La historia increíble de la saltadora trotamundos británica" un juego de palabras que refleja su vida pero también, quizás, el hecho que Aldama había representado anteriormente a su Cuba natal y a Sudán, previo a obtener su ciudadanía británica en 2010 (casi una década después de su solicitud inicial de ciudadanía británica cuando se casó con un escocés y se trasladó al Reino Unido) Aldama también contó su propia historia en The Guardian (14 de julio de 2012), desafiando directamente la etiqueta con la que se le había rotulado:

    Británica importada: He estado escuchando el mismo término una y otra vez en las semanas y meses previos a los Juegos. Al principio ni me molestó. He vivido en este país por 11 años, estoy casada con un hombre británico, tengo hijos británicos, entreno bajo la supervisión de un entrenador británico, en un club británico. Este es mi hogar. ¿De qué están hablando? Pero en las últimas semanas me ha molestado realmente. Es tan ofensivo.

    En el artículo destaca que no es "la única atleta en la historia que ha cambiado de nacionalidad." Como ejemplo, destacaba: La leyenda del tenis británico, Fred Perry; Zola Budd4 de Sudáfrica; la atleta británica Fiona May, quien también compitió por Italia; el jugador de cricket Kevin Pietersen de Sudáfrica; Mo Farah, somalí y miembro del "Equipo GB". También mencionó a Harold Abrahams (representado en el filme británico Carros de Fuego, que ganó 5 Óscar en 1981 y, de manera significativa, fue relanzado en los momentos previos a Londres 2012) quien “sufría mucho debido a que su padre era un judío inmigrante”.5 Al remarcar cómo "ella pensó que esos tiempos habían quedado atrás", Aldama se lamentaba: "Pero a veces pienso si realmente los hemos dejado suficientemente atrás". Hay tantos ejemplos... esta campaña contra mí es hipocresía". Aprovechando la oportunidad para adelantarse a su crítica, Aldama también comentó las razones complejas de su cambio de fidelidad:

    Esos periódicos dijeron que nunca debí competir en representación de Sudán, sino que debí esperar por el Ministerio del Interior Británico para que me otorgaran el pasaporte. En realidad esperé, esperé por dos años. Pero cuando mi solicitud fue rechazada (por la situación de mi esposo que fue enviado a prisión [por tráfico de heroína]) no pude darme el lujo de esperar más... en el momento en que estaba en el puesto número 1 del ranking mundial (guardian.co.uk, 14 de julio de 2012).

    Dado el interés en la historia de vida de Aldama, no es sorpresa que tanto The Guardian como Daily Telegraph fueran los únicos periódicos en cubrir en detalle su desempeño en la final de salto largo olímpico. En todos los demás, su quinto puesto en la final fue ampliamente ignorado. En el mismo día en que Andy Murray (escocés), ganador de la medalla de oro en tenis para el "Equipo GB", competía por la primera página en los medios de comunicación deportivos ingleses con Usain Bolt, el jamaiquino campeón de los 100 metros, Aldama obtenía una cobertura muy pobre en The Sun y tan solo un pequeño párrafo (perdido entre informes sobre la medalla de plata de la corredora británica de los 400 metros Christine Ohuruogu, quien también estaba relegada a las páginas interiores) en The Times, Daily Mirror y su detestable Daily Mail. Todo ello resaltaba el hecho que Aldama había representado previamente a Cuba y a Sudán antes que comentar sobre su desempeño deportivo real. Daily Mail (6 de agosto de 2012: 76) Wilson escribía sin mucha disciplina: "La atleta de salto largo Yamilé Aldama está fuera. Terminó cuarta para Cuba 2000, quinta por Sudán en 2004 y quinta ahora para Gran Bretaña."

    En contrapartida, The Guardian cubrió media página de información en su suplemento sobre los Juegos Olímpicos. Esther Addley, desafiando directamente las mal intencionadas acusaciones sobre Aldama acerca de su rótulo de "británica importada" escribió: “Los cambios importantes en la historia de Aldama han llevado a críticas sobre su condición de "británica importada" y a que no merece lucir la banda de [la diseñadora de ropa] Stella McCartney [para el ‘Equipo GB’]. Pero mientras ella solicitaba el estímulo con aplausos sobre su propia cabeza en momentos de su salto final, el Estadio Olímpico dio su propia respuesta." Addley agregó: "...no hay, en verdad, indicios de falta de autenticidad entre sus colegas del Equipo GB." y concluyó: "Su nacionalidad no era cuestionada la noche anterior". De manera similar, Oliver Brown le dio su apoyo desde el Daily Telegraph (6 de agosto de 2102: S7), con un informe que encabezó así: "La destacada Aldama ha logrado celebrar su éxito personal" y agregaba: "en vista de la confusión personal que ha soportado en su vida, esta final es un motivo de celebración." En apariencia, dichos periodistas aceptaron la legitimidad de Aldama, aunque no lo establecieran, como miembro del "Equipo GB".

    Aspectos similares sobre políticas de identidad afloraron en la prensa inglesa en relación a Tiffany Porter. Luego de haber nacido y ser criada en los Estados Unidos (por el que compitió en edades tempranas) por un padre nigeriano y una madre inglesa, Porter fue el primer miembro del "Equipo GB" en haber sido rotulado como "británico importado" por Martin Samuel del Daily Mail en junio de 2011, aún cuando ostentaba su pasaporte británico desde su nacimiento. Y atrajo toda la censura cuando fue designada capitana del equipo de atletismo en pista cubierta en marzo de 2012. Porter alcanzó las semifinales de los 100 metros con vallas pero no clasificó para la final. Consecuentemente, recibió el mismo tratamiento dispensado a Aldama de ser relegada a pequeños párrafos al final de los informes periodísticos, con un énfasis puesto en su lugar de nacimiento.

    Por ejemplo, en el Daily Mail (8 de agosto de 2012: 79) Laura Williamson escribió: "Hubo mucho más mala suerte para Tiffany Porter, la corredora de Gran Bretaña de 24 años, a pesar de haber nacido y criada en Michigan, Norteamérica." Al destacar su "nacionalidad" aún más, Williamson concluyó: "Porter, cuyo esposo Jeff alcanzó las semifinales de los 110 metros vallas hombres con los colores norteamericanos ayer, fue derrotado en las semifinales de los 100 metros vallas." The Guardian (8 de agosto de 2012: 7, suplemento sobre los Juegos Olímpicos) no hizo mención al lugar de nacimiento de Porter en su corto párrafo, pero hizo notar cómo: "Ella lo hubiera conseguido si no se hubiera resentido de una lesión antigua en la espalda." El Daily Mirror le otorgó a Porter una frase solitaria y no hubo mención alguna de ella en The Sun, The Times y Daily Telegraph. Parecería ser que Porter no fue reconocida por ninguno de esos editores deportivos como digna de mención o miembro "nacional" del "Equipo GB".

    Se podría decir que los éxitos del "Equipo GB" fueron los causantes de la aparente falta de interés en Porter. Los periódicos, el día previo a su intento fallido de calificar para la final, ubicaron al seis veces medalla de oro Hoy en lo más alto de la agenda mediática inglesa, junto al "Equipo GB" que igualó su mejor medallero desde 1908 dado que se aseguraron cuatro medallas de oro adicionales (incluyendo las victorias históricas en el triatlón de hombres y la doma clásica). Sin embargo, tal como lo hicieron notar Falcous y Maguire (2005) en relación a las identidades locales británicas, mientras los fanáticos están contentos con que los "extranjeros" jueguen en sus clubes y, en algunas ocasiones, para la nación (siempre y cuando sean exitosos) su preferencia es para los nacionales que se parecen, o al menor suenan, como ellos.

Conclusiones preliminares

    Este estudio ha examinado el marco, la construcción y la representación de los miembros del "Equipo GB" en el discurso de los medios de comunicación deportivos ingleses en relación a los Juegos de Londres 2012. En particular, el estudio (sostenido en los conceptos sociológicos de proceso de políticas de identidad, procesos de globalización y relaciones nacional-extranjero), exploró precisamente a quien eligió la prensa inglesa para incluir/excluir en calidad de miembro (auténtico) del "Equipo GB" y a quién optó por excluir/rechazar en el contexto de la campaña del Daily Mail contra los "británicos importados" que tuvo lugar previamente a los Juegos Olímpicos. Nuestro análisis preliminar indica que el discurso en los medios de comunicación deportivos encontrados en la cobertura de Londres 2012 cumplió la misma función que había sido detectada en otros espacios sobre las políticas de identidad nacional (Maguire y Poulton, 1999; Maguire et al. 1999a, 199b; Poulton, 2004). Esto es, dicho discurso reforzó el sentido intenso de una identidad nacional británica (y brindó la oportunidad de analizar nuevamente qué implica ello) al mismo tiempo que tuvieron lugar sentimientos patrióticos determinados por los medios de comunicación durante los Juegos Olímpicos y contra la decantación de corrientes sociales y geopolíticas más amplias.

    Ofrecemos tres líneas principales de hallazgos de nuestro análisis de la prensa inglesa cubierta: (1) aún cuando está presente en los momentos previos a la realización de los Juegos Olímpicos, la narrativa de los "británicos importados" permaneció ausente durante el desarrollo mismo de los Juegos; (2) el rendimiento de los miembros "importados" del "Equipo GB" fue minimizado en los discursos correspondientes a las relaciones entre los extranjeros y los naturales: los éxitos de los "británicos importados" fueron celebrados (como la medalla de oro de Hindes) pero no tanto como los de los "británicos de pura cepa". Las derrotas de los "británicos importados" (como, por ejemplo, las de Aldama y de Porter) fueron ignoradas y relegadas a últimas líneas; (3) albergar los Juegos Olímpicos y poner a la nación en la pantalla mundial dio coraje a periodistas y políticos por igual para interpretar/reinterpretar e intentar dar sentido a la Gran Bretaña contemporánea, con el cinismo previo a los Juegos sobre los costos de albergar y dar seguridad, aparente y temporalmente olvidados. Nuestro análisis contribuye a los debates socio-culturales y geopolíticos más amplios sobre los conceptos de identidad nacional y política extranjera y, en particular, sobre la noción de "britanidad". Permítasenos ampliar sobre ello.

    Mientras que la narrativa sobre los "británicos importados" estuvo presente durante todo el año previo a los Juegos, dicho rótulo permaneció ausente durante la cobertura de los juegos mismos. La historia resurgió ocasionalmente pero solo como respuesta a quienes utilizaron el epíteto. Sin embargo, el día posterior a la ceremonia de clausura, el instigador de la campaña del Daily Mail contra los "británicos importados", Martin Samuel, escribió: “Mis palabras finales sobre los británicos importados (por ahora)” (Daily Mail, 13 de agosto de 2012: 61). Él escribió:

    El debate sobre la calificación nacional deportiva se apagará por ahora, sin unos Juegos que sirvan de excusa para ocuparnos de ella en la agenda periodística, pero no se piense que ya no importa más. La mitad de las personas que hablaron pomposamente sobre los británicos importados, debo decir, no entendieron los parámetros. Siempre fue acerca del deporte, nunca acerca de la sociedad.

    Samuel fue crítico con “Yasmin Alibhai-Brown acerca de la relación pobre que orquestó The Independent para atacar al multiculturalismo y a la inmigración.” Samuel sostuvo que:

    Creo que el hecho que Tiffany Porter no haya logrado ganar en la final de los 100 metros vallas mientras que tres mujeres norteamericanas alcanzaron los cuatro primeros puestos, justifica las sospechas de sus motivos para abandonar los Estados Unidos y acercarse a Gran Bretaña y no constituye un ataque al multiculturalismo o la inmigración.

    Esta negación fue repetida en la editorial principal del Daily Mail:

    Inevitablemente, todos quieren arrogarse el notable éxito de los Juegos para ellos mismos y la izquierda los ha presentado como la victoria del multiculturalismo. De hecho, existe una victoria para el orgullo y el patriotismo británicos, las familias que apoyaron, las lealtades compartidas y los valores comunes, cualquiera sea nuestro pasado étnico (Daily Mail, 13 de agosto de 2012: 14).

    Esta retórica inclusivista del editor del Daily Mail, Paul Dacre, contribuye a explicar cómo Mo Farah (a pesar de sus credenciales potenciales de "importado") fue finalmente acogido por la prensa inglesa, incluyendo el Daily Mail. Samuel lo describe así: “Mo Farah representa lo mejor de la Gran Bretaña moderna y su historia no será eliminada de ese oportunismo que está siendo predominante en el deporte internacional moderno” (Daily Mail, 13 de agosto de 2012: 61).

    Un discurso similar fue evidente en todos los periódicos mientras el "Equipo GB", tercero en el medallero olímpico (con un récord de 65 medallas), aportaba a las corporaciones mediáticas el combustible para construir y reproducir un "sentimiento" patriótico en la forma de una extensión de las celebraciones del Jubileo de la Reina (ver Hilvoorde et al. 2012 para leer acerca de cómo el medallero olímpico es utilizado por las naciones como una narrativa unificadora) Esto fue evidente, tanto en los tabloides como en los periódicos de formato grande a mitad de los Juegos y luego del "Gran sábado" (como lo definió la prensa), cuando el "Equipo GB" obtuvo tres medallas históricas en atletismo: “Un Milton Keynes [Greg Rutherford], una belleza de Sheffield [Jessica Ennis] y un somalí [Mo Farah] que obtuvieron refugio de sus tierras, devastadas por la guerra, en estas costas” (The Sun, 6 de agosto de 2012: 6-7). Al celebrar este logro con el encabezado "La moderna y maravillosa Gran Bretaña a rienda suelta sobre el mundo", The Sun declaró "Así es Gran Bretaña hoy en día". En la editorial de The Sun (6 de agosto de 2012: 10), el tabloide observó con orgullo:

    Nos hemos convertido en un calidoscopio humano de un país en el que los integrantes de cada raza, fe y procedencia son una parte constitutiva de una familia enorme y feliz, unificada para estar orgullosa de Gran Bretaña... como aquellos que nos representaron en el Equipo GB en atletismo en el Estadio Olímpico durante el Súper Sábado y los 80.000 presentes en las gradas que mostraron la cara genuina y multicultural de estas tierras: Decente, deportiva, tolerante, justa y libre de intolerancia o racismo. Esto es por lo que la derecha extrema está perdiendo su tiempo. Ha perdido.

    Sentimientos similares se escucharon desde el Daily Telegraph (6 de agosto de 2012: 2), en donde Michael Deacon también puntualizó la diversidad de la sociedad británica y qué sentido podría tener para la identidad nacional británica:

    Mírese de esta manera: Mo Farah es un inmigrante. Jessica Ennis es de raza mezclada. La mayoría de los remeros ganadores de la medalla de oro son mujeres. Clare Balding, el mejor presentador olímpico y más popular de la BBC, es gay. En otras palabras: estos Juegos son un triunfo no solo para Gran Bretaña sino para la Gran Bretaña moderna.

    A pesar de las protestas que el éxito de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 era un testimonio del multiculturalismo británico, esta línea de pensamiento puede haber hecho resaltar la publicidad en la página principal del Daily Mail el día posterior a la ceremonia de clausura por un “afiche gigante del libre Mo” (en lugar de uno de Jessica Ennis o Sir Chris Hoy). El afiche mostraba a Farah durante su celebración con la pose de "Mobot", con la leyenda: "Dos semanas que convirtieron en grande a Gran Bretaña nuevamente." Parecería ser que la política de selección para la inclusión de los "británicos importados" contribuyó, por lo menos, a hacer que Gran Bretaña se sintiera grande nuevamente, aunque solo fuera por una memorable quincena durante Londres 2012. No está claro cuánto durará esta euforia "imaginaria" o "real", inventada o como parte de los hábitos de algunos bretones.

Notas

  1. Una versión de este texto apareció por primera vez en JOMEC Journalism, Media, Cultural Studies, 2012. "Team GB" (Equipo GB) es la marca adoptada por la Asociación Olímpica Británica (BOA) en 1999 para el equipo de Gran Bretaña que compitió durante los Juegos Olímpicos de verano e invierno. Está constituido por atletas del Reino Unido, más atletas provenientes de las dependencias de las tres Coronas (Jersey, Guernsey y la Isla de Man) y más 11 de los 14 territorios externos de Gran Bretaña. Esta jerga es un tanto controversial en virtud de su focalización sobre Gran Bretaña y con exclusión de otros estados-naciones participantes. De hecho, la historia gramatical de la marca "Team GB" puede ser considerada una invención "importada" de "Team USA" y de "Team Australia".

  2. Samuel identificó específicamente a Shara Proctor (de Anguila) y Shana Cox y Tiffany Ofili-Porter de Norteamérica como las "portadoras de la bandera de Gran Bretaña por conveniencia". Esta última atleta ha sido mencionada en los medios de comunicación como Tiffany Ofili (por su nombre de soltera), Tiffany Porter (por su nombre de casada desde mayo de 2011) y, a veces, con un doble apellido. Esto se refleja en este artículo.

  3. Aunque está fuera del alcance de este texto, el tema de la identidad de los olímpicos escoceses, tales como Hoy y Andy Murray, vis-á-vis su identidad británica, fue relacionada en algunos discursos de la prensa con el debate referido a los planes del Partido Nacional Escocés para un referéndum por la independencia.

  4. Al ser sudafricano, Zola Budd no pudo participar en las competencias internacionales en virtud de la política de apartheid de Sudáfrica. Irónicamente, y en virtud de la posición actual del Daily Mail, el periódico la ayudó a participar en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles de 1984 por Gran Bretaña, gracias a una campaña de "bandera por conveniencia" liderada por el Jefe de Deportes, Ian Wooldridge, y apoyado por el editor, Sir David English, para que el gobierno británico le extendiera rápidamente el pasaporte (su abuelo era británico). Los ejecutivos del Daily Mail realizaron la solicitud de pasaporte de Budd. Cuando fue cuestionado por su aparente inconsistencia, Samuel dijo: "Los tiempos cambian... la gente cambia. Los puntos de vista cambian... el cielo perdone pero, a 28 años de la controversia de Budd, un escritor puede tener una visión distinta de la de su predecesor. Es difícil ser inconsistente con opiniones que nunca fueron las mías, en primer lugar” (Daily Mail, 12 de marzo de 2012).

  5. Aldama no hizo mención a la biografía compleja similar del otro papel principal en Carrozas de Fuego, el corredor británico Eric Liddell, que nació en China de padres escoceses (ver Cashmore, 2008).

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EFDeportes.com, Revista Digital · Año 17 · N° 175 | Buenos Aires, Diciembre de 2012
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