efdeportes.com

Más allá de la psiquis del deportista. Principios del entrenamiento 

deportivo y su relación con la Psicología aplicada al Deporte

 

*Académico de Tiempo Completo de la Licenciatura en Educación

Física, Deporte y Recreación y de la Maestría en Ciencias Aplicadas

a la Actividad Física de la Universidad Veracruzana

**Asesor en Psicología del Deporte y la Actividad Física

del Instituto Veracruzano del Deporte

***Máster en Ciencias del Deporte y Alto Rendimiento, Subdirector

Académico de la Escuela Nacional de Entrenadores Deportivos

Julio Alejandro Gómez Figueroa*

Denis Ruiz Silva**

Pedro Gómez Castañeda***

alexjfking@hotmail.com

(México)

 

 

 

 

Resumen

          El estudio de la conducta del hombre, es el objeto de estudio de la Psicología, ciencia joven que alcanza este grado, gracias a los trabajos de teóricos e investigadores como Pavlov, Skinner, Thorndike, Freud, Maslow, entre muchos otros; los cuales fundamentaron las bases para el surgimiento de corrientes y teorías psicológicas, las cuales han sido aplicadas en el ámbito, clínico, social, laboral, político, y deportivo. Con el desarrollo del deporte como actividad científica, muchas otras ciencias que convergen en el campo de lo social y la salud, se fusionaron para el desarrollo del rendimiento deportivo; ya con la especialización de la psicología desde la década de los '60 hasta la fecha existen un sinfín de investigaciones que han aportado conocimientos, y nuevos esquemas de trabajo que han sido traducidos en el fortalecimiento integral de los actores principales en la actividad deportiva. De este modo relacionaremos la intervención de esta ciencia del deporte (llamada Psicología), con los principios del entrenamiento deportivo, logrando lo establecido por los teóricos en cuanto a un modelo de intervención basado en análisis de contenido y experiencia profesional de los autores; cabe señalar que la preparación psicológica se realiza en todas las etapas del entrenamiento deportivo y esto abarca los principios pedagógicos del mismo.

          Palabras clave: Principios del entrenamiento deportivo. Técnicas de preparación psicológica.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 16, Nº 163, Diciembre de 2011. http://www.efdeportes.com/

1 / 1

Desarrollo

    Retomaremos los principios del entrenamiento deportivos dados por González (2005) para fundamentar los aspectos teóricos:

    Valdés (2002, pp. 46). El entrenamiento significa un esfuerzo sostenido contra la inercia del organismo, cada día durante varias horas y así día tras día. Por tanto diariamente hay una alta dosis de cansancio, a veces se produce la monotonía y en ocasiones se generan lesiones molestas o incluso dolorosas, dado estas particularidades del entrenamiento. Si concebimos el entrenamiento deportivo moderno, como un proceso pedagógico en múltiples planos, se realiza sobre unos principios correspondientes que pueden reunirse en dos grupos básicos: generales y específicos.

    El primer grupo incluye los principios pedagógicos (didácticos) generales, típicos de todo proceso pedagógico: actitud consciente y activa, carácter ilustrativo, carácter sistemático y sucesión, accesibilidad, enfoque individual, etc. La aplicación creativa de dicho principio y su concretización en las condiciones específicas del entrenamiento y la competición son condición necesaria para la preparación racional del proceso de entrenamiento y el desarrollo armónico del individuo.

    Al segundo grupo pertenecen los principios específicos del entrenamiento deportivo que reflejan las características esenciales que le son inherentes. (Zhelyazkov, 2001)

    En este sentido, resaltaremos la importancia del entrenamiento deportivo como eje rector para el logro de los resultados planificados, tal como lo establece Gómez, (2011), al decir que el rendimiento deportivo está supeditado por: motivaciones, experiencia vital, fases de crecimiento y herencia genética, con lo que podemos darnos cuenta que en los aspectos mencionados se encuentra implícito el factor psicológico. Y si consideramos que la psicología aporta el conocimiento especializado del comportamiento humano, y la metodología específica para evaluarlo, estudiarlo, comprenderlo y modificarlo, pueden ser de enorme utilidad en el ámbito del deporte de competición, como señalan, habitualmente, numerosos entrenadores y deportistas. No en vano, el funcionamiento psicológico de los deportistas, puede influir, positiva o negativamente, en su funcionamiento físico, técnico y táctico/estratégico y, por tanto, en su rendimiento deportivo. (Buceta, 1998)

    Así, la preparación psicológica debe integrarse en el conjunto de la preparación global de los deportistas, como un elemento más que tiene que interactuar, apropiadamente, con las parcelas físicas, técnicas y táctico/estratégica.

    Por lo antes mencionado se establece lo siguiente:

a.     Principio de elevación progresiva de la carga

    Según Valdés (2002) el entrenamiento deportivo es un proceso que somete al organismo a elevadas cargas físicas y psíquicas con el objetivo de elevar su capacidad de trabajo hasta el punto de hacer posibles esfuerzos máximos.

    Durante el entrenamiento todas las funciones orgánicas son puestas en tensión con el objetivo de estabilizarse ante cargas de magnitud elevada. Las grandes y prolongadas tensiones físicas y psicológicas provocan reacciones psíquicas que son, con cierta frecuencia, negativas. Las vivencias que se producen ante la elevación de la tensión durante el entrenamiento deben ser generalmente transitorias, por ello debe aplicarse el principio de la elevación progresiva de la carga, permitiendo que el grado de fatiga sea óptimo y así, el organismo se encuentre al límite de soportar las cargas de trabajo físico.

    Esto significa que aquellas cargas capaces de provocar estados óptimos de fatiga serán recompensadas por el organismo mediante su adaptación a la misma.

    Dentro del uso de técnicas de preparación psicológica relacionadas con este principio y aplicadas en un programa de fortalecimiento y entrenamiento de variables psicológicas se encuentran: la motivación (establecimiento de metas de ejecución), relajación mediante la respiración, las cuales evitan la aparición de la apatía en el entrenamiento y la competencia, ya que consideremos que este principio opera tanto en la etapa general, especifica, y desentrenamiento.

    Zhelyazkov (2001) menciona que la aplicación de este principio en el entrenamiento no debe ser tomado en sentido estricto y lineal, sino como la tendencia de la carga del entrenamiento a aumentar progresivamente, conforme va mejorando la capacidad del organismo de soportar cargas, mediante una movilización más profunda de sus reservas. Considerando el carácter complejo y científico del entrenamiento, sus objetivos, y principios. Valdés (2002) propone que el entrenamiento psicológico se clasifique en Métodos y técnicas, para lo cual formula, que se dividan en Métodos de Intervención Psicológica de preparación general y Métodos de preparación específica.

b.     Principio de la continuidad de la carga

    La continuidad en la aplicación de las cargas de movimientos asegura en el entrenamiento una mejoría constante dentro de los límites que marca la genética, de los niveles de rendimiento y permite asimismo la consolidación de los fenómenos adaptativos. En ocasiones las enfermedades, faltas frecuentes del entrenamiento, periodos largos de transición, son todos factores que actúan de manera negativa sobre la capacidad del rendimiento corporal. Las interrupciones al proceso de entrenamiento actúan primero en detrimento de las cualidades físicas y luego sobre las destrezas técnicas y técnico – tácticas.

    Al existir una interrupción del entrenamiento, la velocidad de retroceso de una cualidad física o destreza física o destreza técnica es directamente proporcional al tiempo que se utilizo para su desarrollo.

    En este sentido la aplicación de técnicas de preparación psicológica puede fortalecer el desempeño deportivo, ya que como lo menciona Martínez y Pérez (2003), la preparación psicológica del deportista constituye una categoría central. Es el conjunto de procedimientos que tienden a formar y a desarrollar las cualidades, las capacidades, aptitudes y estados que demanda la actividad deportiva, para la obtención de rendimientos elevados. De este modo, si existe la interrupción del entrenamiento por enfermedades, lesiones, fenómenos meteorológicos, y cualquier otra que escape al control del deportista y entrenador, puede recurrir a métodos y técnicas psicológicas, siendo las más adecuadas para el fortalecimiento de este principio, las relacionadas con los proceso mentales, tales como: Imágenes y practica mental, sugestiones y estados alternativos de consciencia; algunos teóricos de la psicología han utilizado la hipnosis y técnicas de programación neurolingüística en caso de enfermedades (lesiones), o perfeccionamiento de detalles técnicos; por otro lado, fortalecer la motivación, mediante el establecimiento de metas es una intervención que optimiza el factor psicológico.

c.     Principio de multilateralidad

    Este principio es muy importante en el entrenamiento con principiantes, su aplicación asegura un desarrollo balanceado de las cualidades físicas a través de un amplio espectro de ejercitaciones provenientes de diferentes deportes. Por otra parte, un desarrollo multilateral de las cualidades físicas constituye la base sobre la cual se elaboran los grandes rendimientos en una disciplina deportiva. Las ejercitaciones para la realización de este principio se considera que:

  • Los ejercicios no deben ser unilaterales.

  • Los ejercicios deben utilizarse en la sección de entrenamiento en un orden lógico o sea:

  1. Ejercicios de coordinación

  2. Ejercicios de velocidad

  3. Ejercicios de fuerza

  4. Ejercicios de resistencia

    Los alcances de la psicología aplicada al deporte y la actividad física, y su aplicación en el desarrollo de talentos deportivos, no diverge en la aplicación de métodos y técnicas para el alto rendimiento, esta afirmación es realizada por el autor después de efectuar análisis de contenido, y de sus hallazgos en la práctica profesional; sino al contrario el uso de métodos y técnicas es adaptada a variables como: la edad, años de práctica deportiva y objetivos del deportista.

    Las técnicas relacionadas para el fortalecimiento de este principio son: el establecimiento de objetivos, técnicas de práctica imaginaria, y todos los juegos que fortalezcan las capacidades mencionadas con anterioridad. Podemos establecer un ejemplo, un corredor de 100 metros planos de categoría juvenil que necesita fortalecer las capacidades como la coordinación, velocidad, fuerza y resistencia, puede realizar una sesión de juegos como: mar y tierra, saltos con obstáculos, entre otros creados ex profeso para los objetivos de la sesión de entrenamiento, estos pueden ser proporcionados al entrenador o administrados por el psicólogo deportivo, o preparador físico.

d.     Principio de la variación de la carga

    La mejoría del nivel funcional del organismo se alcanza mediante una relación óptima entre carga y recuperación.

    El cambio constante entre la carga y la recuperación penetra toda la estructura del entrenamiento, desde su mínima expresión de entrenamiento, hasta los ciclos mayores de medio a un año de duración.

    El momento de recuperación del organismo (pausa, activa-pasiva) debe entenderse en toda su dimensión, ya que es precisamente allí donde se constituye un nuevo y más elevado estadio de entrenamiento.

    Por ello es necesario planificar detalladamente los volúmenes, intensidades y pausas óptimas para el desarrollo de cada cualidad física o el aprendizaje de las destrezas técnicas de movimiento.

    Así, por ejemplo, si se pretende desarrollar la velocidad máxima y utilizar pausas demasiado cortas (60”) entre repetición y repetición la intensidad del ejercicio descenderá y el efecto del entrenamiento será velocidad – resistencia.

    Un problema importante que surge como consecuencia de la estabilización de la estructura carga – recuperación, es lo que algunos científicos rusos Ozolin y Kuznetsov en González (2002) denominan “barrera de la velocidad” o “barrera de la fuerza”, lo cual significa la elaboración de un estereotipo de movimiento, o sea la estabilización de los parámetros determinantes del rendimiento de una cualidad determinada en una prueba específica.

    En relación con este principio, las variables psicológicas que el profesional de la psicología del deporte debe fortalecer se encuentra la comunicación entrenador-deportista, deportista-entrenador, ya que por ejemplo, en muchas ocasiones cuando el deportista se encuentra ante esta barrera que los teóricos rusos mencionan, puede experimentar variaciones en sus estados de ánimo, tales, como frustración por no dar el marcaje en una toma de tiempo, no levantar los pesos en un chequeo, o en cualquier situación donde se evalué su rendimiento y no sea dado, el deportista esta propenso a experimentar sentimientos de frustración y desagrado, pero si la variable comunicación se encuentra fortalecida adecuadamente, al establecer metas fundamentadas en la planificación del entrenamiento y están son manifestadas por parte del entrenador al deportista, este podrá manejar sus estados anímicos de manera más acertada.

    Valdés (2002) propone otras variables que pueden fortalecer este principio con uso de técnicas de preparación psicológica en la etapa específica del entrenamiento, las cuales se mencionan a continuación:

  1. Establecimiento de objetivos.

  2. Ejercicios de relajación.

  3. Supresión de pensamientos o emociones negativas.

  4. Cambios de atención y actividad.

  5. Descanso dirigido.

  6. Inducción de energía y estados de ánimo positivos.

  7. Automandatos.

e.     Principio de la adecuación de la carga

    La aplicación de este principio se expresa en la coincidencia de la carga, la capacidad biológica del rendimiento y la disposición psicológica para el rendimiento por edades. En otras palabras, la carga del entrenamiento debe estar planeada de tal manera que se adecue a las condiciones internas del organismo del deportista, ya que de lo contrario no será capaz de provocar una reacción positiva del mismo.

    En este principio, el conocimiento psicológico puede contribuir, decisivamente, a lograr los objetivos específicos del entrenamiento, multiplicando las opciones de rendimiento y éxito deportivos. Un entrenamiento productivo, parte de una planificación apropiada y, por ello, es conveniente que los entrenadores perfeccionen su forma de planificar, incorporando los conocimientos psicológicos pertinentes, evitando con ello una sobrecarga física y se traduzca en un carga mental, como lo encontrado en el estudio de Reynaga, Gómez, Paz y Ruiz (2009) denominado “Psicología de deportistas de Alto Rendimiento Veracruzanos”, donde encontraron una correlación entre la inadecuada planificación del entrenamiento y síndrome de Burnout en un 45% de los sujetos estudiados; por lo que en este apartado, debe considerarse la necesidad de una planificación preventiva que contribuya a evitar el agotamiento psicológico que podría producirse como consecuencia de las demandas y características del entrenamiento deportivo por una sobrecarga de entrenamiento.

    Y como otro factor a fortalecer se encuentra la adherencia de los deportistas, la cual se refiere a la asistencia regular y puntual a las sesiones de entrenamiento, (fortaleciendo sistemáticamente el principio de continuidad de la carga), y a las distintas actividades que lo complementan (sesiones de fisioterapia, reconocimientos médicos, tratamiento farmacológico, plan de alimentación, etc.), así, como al cumplimiento apropiado de las tareas concretas que los deportistas deben realizar.

    En este aspecto, el apoyo psicológico se basa en el “couching” al entrenador, fundamentado en las etapas del desarrollo del individuo desde aspectos psicológicos, motrices y psicofisiológicos. Y por otro lado, en el establecimiento de metas de ejecución y de resultado.

    Valdés (2002) y Thierry (1972, pp. 287) y Weineck (2005), establecen que otras de las variables psicofisiológicas relacionadas con las exigencias sobre la cantidad de activación del deportista en este principio, que pueden verse favorecidas con el uso de técnicas de preparación psicológicas son:

  • Determinación de objetivos.

  • Relajación progresiva de Jacobson.

  • Supresión de pensamientos o emociones negativas.

  • Cambios de atención y actividad.

  • Descanso dirigido.

  • Inducción de energía y estados de ánimo positivos.

  • Automandatos.

    Confirmando que la intervención psicológica está estrechamente relacionada en los principios del entrenamiento deportivo.

f.     Principio de la elaboración del entrenamiento a largo plazo

    En la actualidad ya nadie duda de la importancia de una preparación del deportista a largo plazo. El dominio de un deporte es una tarea ardua que puede llevar de 5 a 10 años de entrenamiento sistemático, comenzando mucho antes los 10 años de edad, de acuerdo a las características del deporte elegido.

    En el transcurso de este proceso de entrenamiento a largo plazo se diferencian: objetivos, ejercitaciones, métodos, formas organizativas del entrenamiento, etc. Por esta razón, y para favorecer su estudio, se presentan tres estadios (etapas de 3 a 5 años de duración):

1.     Estadio de Iniciación Deportiva

    Estadio de iniciación deportiva. Objetivo: sentar las bases para la futura especialización y los altos rendimientos deportivos.

    Bernhard en González (2005) establece los objetivos básicos de este estadio de la siguiente forma:

  1. Objetivo condicional: adiestramiento multilateral (variación de ejercitaciones) de las cualidades físicas.

  2. Objetivo técnico-táctico: aprendizaje de la forma rudimentaria de las destrezas técnico- tácticas básicas.

  3. Objetivo psíquico: educación de las capacidades psíquicas generales, como capacidad de contracción, disposición, para la competencia y alegría en el entrenamiento.

    Weineck (2005) establece en relación con este principio y el trabajo de la psicología, debe fundamentarse en varias vertientes, por un lado, se encuentra el desarrollo de ejercitaciones complementarias mediante métodos lúdicos, concebidos como una herramienta transformadora desde el ámbito perceptivo-motriz, y por otro lado, en el entrenamiento de técnicas psicológicas enfocadas al mantenimiento de la motivación, acompañado del entrenamiento imaginario (visualización), dando como resultado el apoyo en la adquisición y mejora de habilidades motoras, mejora del rendimiento de memorización de habilidades motrices, fortalece el reaprendizaje, medida de rehabilitación para impedir la atrofia muscular y en la superación de trastornos psicovegetativos.

2.     Estadio de especialización deportiva

    Estadio de especialización deportiva. Objetivo: realizar la especialización técnico- táctica- condicional en un deporte y continuar con el desarrollo de las bases generales.

    En este estadio, luego que el deportista ha pasado por sucesivos momentos de selección deportiva se canaliza el entrenamiento hacia un deporte en especial. Su iniciación depende de las particularidades de los deportes. Así, por ejemplo, en el patinaje artístico o en la natación, se puede comenzar entre los 12 y 13 años, mientras que en otros deportes como el levantamiento de pesas y el atletismo se inicia entre los 15 y 17 años.

Objetivo condicional

  1. Desarrollar las capacidades específicas que el deporte requiere.

  2. Mediante ejercitaciones técnicas y específicas, desarrollar las capacidades generales de la condición y estabilizarlas al final del estadio.

Objetivo técnico

  • Completar y ampliar los patrones técnicos de movimientos, así como disponer de estos en situaciones cambiantes. Es decir, elaborar los estereotipos dinámicos del movimiento.

Objetivo táctico

  • Hacer más complejas las situaciones tácticas elementales aprendidas en el estadio anterior.

    Desde el punto de vista del autor, en la realidad este principio es poco operable, ya que desafortunadamente, las edades del inicio de una actividad deportiva son antes de los ejemplos citados, tal pareciera que es una urgencia para directivos, padres, algunos entrenadores y mismas aspiraciones del deportista, ya que como lo vemos en Olimpiada Nacional Juvenil, hay categorías en algunos deportes a edades muy tempranas, sometiendo al menor a cargas de trabajo excesivas, que como los teóricos han establecido viola los principios vistos hasta este momento.

    En este sentido el trabajo del psicólogo, debe encaminarse al fortalecimiento de la comunicación entre entrenador-deportista, enfatizando dentro del aspecto psíquico los intereses, motivaciones y feedback en varios niveles: deportista-entrenador, entrenador-deportista, lo anterior relacionado con la sensibilización ante este principio del entrenamiento.

3.     Estadio de los altos rendimientos deportivos

    Estadio de los altos rendimientos deportivos. Objetivo: lograr altos rendimientos en el deporte elegido sobre una amplia base de preparación general y especial.

    Los objetivos de este estadio pueden resumirse en:

A.     Objetivo condicional

    En lo que respecta a las cualidades generales, el entrenamiento se dirigirá al logro de un nivel óptimo, mientras que para las cualidades especificas determinantes del rendimiento deportivo, se aspirará a un desarrollo máximo de las mismas.

B.     Objetivo técnico

    La maestría técnica es el estadio final en el proceso de perfeccionamiento de una destreza y su objetivo último, y expresa el dominio total de un movimiento o una secuencia de movimientos, caracterizándose por un alto grado de estabilidad y diferenciación en todos sus parámetros que permite al deportista utilizarla en situaciones muy variables.

C.     Objetivo táctico

    Las destrezas tácticas continúan su proceso de integración en estructuras más complejas de acción, que permiten al deportista realizar modificaciones de su conducta competitiva en forma instantánea y con una efectiva utilización de sus recursos técnicos y condicionales.

    Dado que en la aplicación de este principio, las exigencias físicas provocan cansancio extremo en los deportistas, el cual puede tornarse extenuante y con ello el incremento de la carga psíquica puede provocar problemáticas psicológicas asociadas a este factor; Valdés (2002), establece que los métodos de preparación psicológica especial son los considerados como aptos en esta temporada de preparación emocional, ya que el individuo vive en una constante carga física y mental, y deben fortalecerse los aspectos emocionales en el siguiente orden:

Por su influencia sobre la cantidad de activación

  • Determinación de objetivos.

  • Relajación.

  • Supresión de pensamientos o emociones negativas.

  • Cambios de atención y actividad.

  • Descanso dirigido.

  • Inducción de energía y estados de ánimo positivos.

  • Automandatos.

Por su influencia sobre los factores cognitivos de la regulación

  • Desensibilización sistemática.

  • Hipnotismo.

  • Visualización de situaciones de éxito.

  • Fijación de estados emocionales positivos.

  • Identificación con imágenes.

  • Autoprogramación.

Por su influencia sobre las estrategias de afrontamiento

  • Participación en competiciones.

  • Modelación de competiciones.

  • Inoculación de estrés.

  • Entrenamiento asertivo.

  • Juego de roles.

Por su influencia sobre elementos de la personalidad

  • Evaluación sistemática del rendimiento.

  • Regulación de la autovaloración.

  • Reforzamiento del esfuerzo y el resultado.

  • Dosificación de esfuerzos volitivos.

g.     Principio de la unidad de la preparación general y especial

    Zhelyazkov (2001) establece que los primeros éxitos en el deporte se alcanzan mediante la preparación general, que abarca todo el conjunto funcional del organismo. La estrecha especialización en esta etapa puede tener consecuencias negativas por las inevitables disparidades en el nivel de unas u otras capacidades motrices. En deportistas altamente cualificados un factor básico, para aumentar los resultados deportivos de la preparación especializada como resultado de la adaptación selectiva del organismo hacia la actividad motriz especifica. Esta es una de las principales causas para negar, subestimar o separar plenamente la preparación general de la especial.

    Preparación general: forma la base funcional necesaria para el desarrollo de la maestría deportiva en las etapas iniciales del entrenamiento y luego en el fundamento especializado de perfeccionamiento del complejo de funciones conductoras de un deporte determinado. Junto con esto, en las etapas superiores de la maestría deportiva la preparación general ha de asegurar la correlación necesaria entre la capacidad de trabajo especial y las posibilidades funcionales generales del organismo. Su papel es sumamente importante para acelerar los procesos de recuperación y la introducción del equilibrio necesario entre las funciones motrices y las vegetativas. (Ante todo en el período competitivo).

    La preparación especial: garantiza un régimen que pueda adaptar el organismo a una forma específica de capacidad de trabajo propia de la actividad deportiva concreta, así como también su papel conductor para el progreso de los resultados deportivos en los deportistas altamente calificados.

    Por consiguiente, la unidad de la preparación general y especial en el proceso del perfeccionamiento deportivo está condicionada por las regularidades objetivas de este mismo proceso, y ha de considerarse como uno de los principios más importantes de los sistemas modernos de entrenamiento deportivo en el que se reflejan de forma específica en la sociedad moderna las amplias funciones sociales del deporte.

    Al inicio del ejercicio de la psicología del deporte como profesión, al escuchar a metodólogos y entrenadores especializados hablar sobre etapa general y especifica, desconocía por completo estos términos, y lo más complejo era fusionar el trabajo de preparación psicológica con este principio fundamental; por muchos años fue abordado de manera empírica, hasta que psicólogos y especialistas del deporte se dieron a la tarea de construir conocimientos, mediante la investigación que aportaron bibliografía relacionada con el tema, por lo que Valdés, (2002), establece que en la intervención de técnicas y métodos psicológicos debían estar estrechamente vinculados con el ciclo de entrenamiento deportivo, así, encontramos que existen métodos psicológicos de preparación general y métodos de preparación específica o especial, a continuación se mencionan algunos de los métodos, los cuales se complementan con los mencionados en el “Principio de la elaboración del entrenamiento a largo plazo”:

Métodos de preparación psicológica general utilizados en el Principio de la unidad de la preparación General

Métodos de preparación psicológica especial, utilizados en el principio de la unidad de la preparación Especial

· Métodos que apelan a la variación del tono muscular

· Métodos de preparación emocional

· Relajación inducida mediante la palabra

· La determinación de objetivos

· Relajación inducida mediante la contracción muscular

· Cambios de atención y actividad

· Ejercicios respiratorios

· Descanso dirigido

· Ejercicios de concentración

· Introducción de energía y estados de ánimo positivos

· Concientización de procesos internos

· Automandatos, Desensibilización sistemática, Hipnotismo.

· Supresión de pensamientos negativos

· Visualización de situaciones de éxito, identificación de imágenes, Autoprogramación, Participación en competiciones.

· Inoculación de estrés, Entrenamiento asertivo, Juego de roles, Evaluación sistemática del rendimiento.

· Reforzamiento de esfuerzos y resultados, Regulación de la autovaloración.

· Dosificación de los esfuerzos volitivos.

Fortalecimiento de la comunicación entrenador – deportista

Gómez, Ruiz y Gómez (2010)

h.     Principio de la individualización

    Este principio se basa en el principio del reconocimiento de la naturaleza única e irreproducible del hombre, fenómeno que obliga independientemente del deporte, a considerar las características antropométricas, intelectuales, psíquicas, etc., del deportista al planificarse el entrenamiento. Esto quiere decir que no es posible entrenar a dos atletas con el mismo plan de entrenamiento o por lo menos con la misma dosificación de la carga. Siendo importante considerar los siguientes aspectos:

  • Conocer las capacidades e intereses individuales del atleta.

  • Por tanto no se puede trabajar en contra de estas capacidades e intereses.

  • Una especialización sólo tiene sentido con base a una amplia formación de la condición física. Es solo entonces cuando se podrá tolerar cargas máximas que en parte alcancen los límites de las posibilidades funcionales del organismo.

    Este principio es básico en la planificación del entrenamiento psicológico, ya que algunas variables sociodemográficas del deportista hacen la diferencia del uso de las técnicas hasta el momento mencionadas, otro factor que se considera de importancia, se relacionan con las demandas psicológicas de un deporte determinado y condiciones sociales especificas, por ejemplo, un maratonista joven que recorre hasta 200 km en una semana, tendrá especificidades y requerimientos psicológicos diferentes a un maratonista también joven con la condición de estar casado, en base a estas condiciones especificas como la edad, sexo, estado civil, religión, características de personalidad, apegos familiares entre otras, se planifica la preparación psicológica deportiva individualizada. En el caso de deportes en conjunto, dado los resultados de la aplicación de evaluaciones psicodeportivas individuales, se crea un programa que mitiga las variables psicológicas más vulnerables, tomando para ello un dato estadístico de frecuencia, es decir, si existe una mayor frecuencia en problemas de comunicación y desmotivación, entre la mayor parte del equipo, indica que estos factores deben ser fortalecidos.

i.     Principio de ciclicidad del proceso de entrenamiento deportivo

El perfeccionamiento deportivo se caracteriza por una circulación relativamente acabada de estadios con repetición parcial de los distintos ejercicios, sesiones, etapas y periodos enteros en el marco de determinados ciclos. Estos cambios están vinculados con el carácter fásico del desarrollo del estado de entrenamiento y de la forma deportiva: consecución, conservación (estabilización relativa) y pérdida temporal.

    Tipos de ciclo: De acuerdo con la duración de los ciclos Harre en González (2005) plantea tres tipos:

  • Macrociclo: Puede tener una duración de 3 a 12 meses y en la práctica es idéntico a la periodicidad que abarca un periodo de preparación, más un periodo de competencia, más un periodo de preparación de 3. De acuerdo con las características del deporte en un año, pueden a realizarse de 1 a 3 macrociclos.

  • Mesociclo: Tiene una duración de 3 a 6 semanas, son ciclos de duración media que abarcan de 3 a 6 microciclos de 3 a 7 días de duración. Los mesociclos se acortan conforme aumentan la intensidad de la carga. Así, es como los mesociclos competitivos son más cortos que los de preparación. Por ejemplo, un Mesociclo de preparación general puede abarcar de 28 a 42 días, mientras que un Mesociclo de preparación técnica puede durar entre 14 y 21 días.

  • Microciclo: Tiene una duración de 3 a 7 días, el microciclo abarca varias unidades de entrenamiento (también denominadas, “sesiones de entrenamiento”). Su objetivo es la conducción de la carga dentro de periodos cortos de tiempo de 3 a 7 días.

    Para igualar el proceso del entrenamiento deportivo con la preparación psicológica Valdés, (2002), Reynaga, Gómez y Ruiz (2010), proponen la formación de premisas psicológicas mediante la combinación de los ejercicios antes mencionados, en un intervalo de tiempo de acuerdo a los ciclos de trabajo, el uso de estas técnicas y métodos psicológicos pueden ser de cuatro a seis semanas, en cinco sesiones semanales de treinta a cuarenta minutos cada una, de este modo el principio establecido con anterioridad, permite la planificación de las intervenciones psicológicas, garantizando el apego de los otros principios.

    Por ejemplo:

Semana 1

Lunes

Martes

Miércoles

Jueves

Viernes

Intercambio de ideas sobre la importancia de la mente en la actividad física.

 

Sesión de relajación, mediante la sugestión de peso corporal en los distintos segmentos del cuerpo.

Sesión de la relajación igual a la anterior.

Enseñanza de las características de la respiración completa. Se enseña la respiración sedativa y de activación.

Respiración relajante, relajación sugestiva, contando del uno al cinco.

Demostración sugestiva

Diagnostico de algunas dificultades: por ej., dificultad para cerrar los ojos o para relajar otra parte del cuerpo.

Se enfatizan los grupos musculares o partes del cuerpo donde es difícil relajar.

Relajación sugestiva, contando del uno al diez, y al lograr la relajación se les pide controlar que su respiración sea completa.

Se les induce la imagen de una carrera y se les sugiere respirar cuando se sientan cansados. Se les sugiere que la respiración es energía que llevan al cuerpo

De este modo se van variando y adaptando los ejercicios que integran las sesiones diarias de acuerdo a la carga de trabajo, la etapa, y al ciclo donde se encuentre el macrociclo, mesociclo o microciclo.

j.     Principio de orientación hacia los máximos resultados

    Para Zhelyazkov (2001) el logro de los máximos resultados deportivos, como característica dominante del proceso de entrenamiento, se determina por las crecientes funciones sociales del deporte en la sociedad moderna: de prestigio, educativas, unificantes, etc. La valoración social de estos resultados estimula la ambición natural del individuo hacia una manifestación máxima de sus capacidades motrices, morales y volitivas, intelectuales, etc., en el proceso de la competición.

    El incremento brusco de la competencia en la esfera del gran deporte en los últimos años y de ahí las tendencias hacia los máximos resultados técnicos –deportivos están condicionados también por una serie de factores del desarrollo socioeconómico contemporáneo de los países:

  • Se ha ampliado bastante la base técnico-material del deporte, lo que crea las condiciones para practicar deporte de masas y seleccionar a deportistas talentosos.

  • La penetración del progreso científico-técnico en el deporte, crea premisas para un profundo estudio, revelación y perfeccionamiento de las posibilidades humanas;

  • Se ha creado un sistema armonioso de competiciones: olímpicas, mundiales, europeas, y otros campeonatos y torneos regionales, que posibilita planificar y regular objetivamente la preparación deportiva, así como un intercambio activo de información científico-metodológica, técnica, etc.;

  • Se ha elevado bastante la cualificación científico-metodológica y practica del personal pedagógico-deportivo y de otros especialistas que trabajan en el ámbito del deporte.

  • La influencia global de los factores señalados (y de otros) halla su expresión material en la elevada efectividad de la metodología de entrenamiento moderna en los altos resultados técnico-deportivos.

    Relacionado con este principio y después de realizar un análisis sobre el mismo, se establece que seria improbable el desarrollo de las Ciencias Aplicadas al Deporte, ya que desde la consecución de investigaciones y crecimiento de la especialización exigidas por los máximos resultados, el entrenamiento deportivo es rector en las ciencias que convergen en su desarrollo, y la Psicología no está ajena a esta situación, en el campo de aplicación el trabajo debe enfocarse en dos vertientes en el manejo de la comunicación interpersonal e intrapersonal tanto del deportista como del entrenador, y fortalecer la motivación mediante el establecimiento de objetivos, realizando más y mejores estudios que permitan que este principio siga siendo el eje rector del deporte en sus distintas expresiones.

Conclusiones

    Después de realizar un análisis de contenido desde el enfoque de distintos autores y considerando la experiencia profesional de los autores se llega a lo siguiente:

  1. La relación entre los principios del entrenamiento deportivo con el uso y aplicación de técnicas psicológicas es un “binomio indisoluble”, ya que la primera incluye permanentemente a la segunda en todo el proceso deportivo.

  2. Es prioritario que los Psicólogos Deportivos, cuenten con conocimientos de los principios del entrenamiento deportivo, ya que la planificación del entrenamiento psicológico debe ir acompañado con los métodos y técnicas psicológicas adecuadas en relación con mencionados principios.

  3. Los especialistas de la psicología del deporte, deben contar con una formación critica de corte científico – investigativo, ya que en ocasiones se cae o se identifica a este profesional como el “motivador”, proponiendo que si este cuenta con las características manifestadas con anterioridad, obtendrá un lugar de mayor credibilidad ante las ciencias aplicadas al deporte.

  4. El conocer los principios del entrenamiento deportivo, mejora los procesos de intervención psicológica, ya que optimiza tiempo en la planificación, y el trabajo esta focalizado a las necesidades físico-psíquicas del deportista demandadas por las cargas del entrenamiento.

  5. Existe poca documentación y bibliografía relacionada con los principios deportivos y el uso de programas y técnicas de preparación psicológica, por ello es necesario el desarrollo de investigaciones que permitan conocer los efectos del entrenamiento psicológico en relación con los principios del entrenamiento deportivo.

Bibliografía

  • Gómez Castañeda, Pedro E. (2011). “Apuntes de Máster en Ciencias del Deporte y Actividad Física”. Principios del entrenamiento deportivo, México

  • González, A. (2005), “Bases y principios del entrenamiento deportivo”. Stadium, 2ª, Ed. Argentina.

  • Martínez, V., Otero, P. (2003), “Destrezas Psicológicas en el Deporte: Análisis de una muestra de entrenadores”. Revista Educación y Futuro.

  • Reynaga P., Gómez J, Paz, V., Ruiz D., (2009), “Psicología de los Jóvenes Deportistas de Elite Veracruzanos”. Articulo de Investigación, Universidad Veracruzana, Instituto Veracruzano del Deporte, México.

  • Valdés Casal, Hiram (2002), “La preparación psicológica del deportista: Mente y rendimiento humano”. Inde, 3ª Ed. Barcelona.

  • Weineck, J. (2005) Entrenamiento Total. Ed. Paidotribo, 1ª Ed. Barcelona.

  • Zhelyazkov, T. (2001), “Bases del entrenamiento deportivo”. Ed. Paidotribo, 1ª Ed. Barcelona.

Otros artículos sobre Psicología del Deporte

  www.efdeportes.com/
Búsqueda personalizada

EFDeportes.com, Revista Digital · Año 16 · N° 163 | Buenos Aires, Diciembre de 2011
© 1997-2011 Derechos reservados