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Estrategia para el tratamiento de la obesidad en los trabajadores de

la escuela ‘Carlos Manuel de Céspedes’ de la ciudad de Camagüey

 

ISCF Manuel Fajardo, Camagüey

(Cuba)

Lic. Reinier Heberto Victoria Cánovas

cienciaydeporte@fcf.camaguey.cu

 

 

 

 

Resumen

          Está claro que una vida sana es sumamente importante, y para apoyar esta idea surge el impulso de realizar este trabajo. Ya que en los últimos años el incremento de la obesidad se hace notable no solamente en Cuba sino en el mundo entero, y aunque muchas personas conocen que la obesidad es una enfermedad peligrosa que arrastra consigo otras enfermedades, no realizan ningún esfuerzo para combatirla. Es muy importante modificar el estilo de vida en lo concerniente al sedentarismo. La monitorización personalizada del ejercicio ofrece las ventajas de motivar y obligar al paciente haciéndolo consciente de sus posibilidades y evitando el rechazo inicial al ejercicio. Es necesario estudiar y valorar la eficacia del ejercicio físico. El caso que se encuentra en la escuela primaria situada en la calle Lugareño / Rosa la Bayamesa y San Clemente de la ciudad de Camagüey, Cuba (“Carlos Manuel de Céspedes”) es alarmante ya que el 50 % de sus trabajadores padecen de esta enfermedad y en este centro no constan con una estrategia para el tratamiento de la obesidad. Este objetivo se trata de lograr gracias a la aplicación del ejercicio físico y un cambio de sus costumbres alimentarias, planificado y orientado como una estrategia fuera del horario laboral donde los trabajadores del centro estuvieron de acuerdo en seguir todas las reglas, se tuvo en cuenta que esta profesión no lleva ninguna actividad física, dando paso al sedentarismo. Gracias a revisiones de bibliografías se confirmo que una estrategia puede funcionar satisfactoriamente y devolverles una vida más sana a estos trabajadores. Por lo que procedimos a realizar una estrategia después de analizar la situación de estos 9 pacientes en los cuales predominaba la obesidad de grado I y II. Después de aplicar la estrategia se observo que un 100% de los pacientes perdieron peso corporal y algunos pasaron de obesos grado II a grado I y uno de grado I paso a sobre peso grado II, por lo que se afirma que una buena estrategia para combatir la obesidad es importante para devolverles a estas personas una vida más sana.

          Palabras clave: Estrategia. Obesidad. Ejercicio físico. Tratamiento. Calidad de vida.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 16, Nº 161, Octubre de 2011. http://www.efdeportes.com/

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Introducción

    La obesidad se considera un problema de salud, en muchos países desarrollados, y en vías de desarrollo como el nuestro. Alrededor del 20-30% de nuestra población presenta algún grado de obesidad lo que es realmente alarmante. Se le reconoce como un factor de riesgo para la aparición de otras enfermedades como es el caso de las cardiovasculares, diabetes mellitus, hipertensión arterial, algunas formas de cáncer, osteoartritis, litiasis vesicular y gota, también incrementa el riesgo de infecciones postoperatorias y el porcentaje de daños accidental. Pero además el obeso es antiestético, lento, físicamente inhábil y propenso a los accidentes. (1)

    El depósito de grasa, cuya capacidad energética es dos veces superior a la de proteínas o carbohidratos, es una forma de almacenamiento energético para necesidades futuras. Sin embargo, cuando estas reservas grasas son excesivas representan un problema de salud. Los datos de las compañías de seguros demuestran que las personas cuyo peso sobrepasa en un 30% el peso ideal tienen mayor riesgo de padecer enfermedades, y de manera especial diabetes, enfermedades de la vesícula, trastornos cardiovasculares, hipertensión, algunas formas de cáncer y artritis; asimismo, las intervenciones quirúrgicas suponen un mayor riesgo en este grupo de pacientes.

    Por lo general la obesidad es un problema de difícil manejo médico, lograr resultados favorables en su tratamiento requiere medidas higiénico-dietéticos e higiénico sanitarias que incluyen la modificación de hábitos y la adopción de un nuevo “Estilo de vida”. Su prevención es cada vez más importante y se debe hacer todos los esfuerzos necesarios en ese sentido. (2)

    Se suele utilizar el índice de masa corporal (IMC) para determinar si existe o no un exceso de peso. Este índice es el cociente entre el peso expresado en kilogramos y el cuadrado de la altura de la persona expresada en metros. Teniendo en cuenta esta relación, se considera sobrepeso una cifra del IMC por encima de los 25 kg/m2 y se hablaría de obesidad cuando el IMC estuviera por encima de los 30 kg/m2. El IMC, es decir la relación entre el peso y la talla, es una buena referencia aunque no determina con total exactitud el peso ideal de una persona ya que, como muchos especialistas reconocen, también hay que tener en cuenta otra serie de factores. Así, por ejemplo, un atleta puede tener un IMC elevado debido a que presenta una gran masa muscular, lo que a su vez se traduce en un peso elevado, sin que eso signifique que esté obeso.

    La obesidad sólo es debida a trastornos del sistema endocrino en contadas ocasiones. En la mayor parte de los casos, la obesidad es la consecuencia de un aporte de energía a través de los alimentos que supera al consumo de energía a través de la actividad; este exceso de calorías se almacena en el cuerpo en forma de grasa. Sin embargo, el metabolismo basal, la mínima cantidad de energía necesaria para mantener las actividades corporales, varía de una persona a otra, de manera que hay personas que utilizan, de manera natural, más calorías para mantener la actividad corporal normal. La obesidad puede también deberse a la falta de actividad, como sucede en las personas sedentarias o postradas en cama.

    Se ha creído hasta ahora que la regulación del peso corporal en el humano es constante, sin embargo, se sabe que cambia de día a día, de mes a mes y de año a año. Incluso el peso aumenta imperceptiblemente de año en año.

    Es universalmente aceptado el hecho de que el ejercicio físico dosificado proporciona un estímulo fisiológico potente para disminuir el peso corporal de las personas a partir de la realización de este de forma prolongada ya que está demostrado que la utilización de los lípidos como fuente de energía ocurre solo en los casos de un esfuerzo muscular prolongado y moderado. (3)

    La obesidad no suele deberse a una sola causa, generalmente está asociada a varios factores, aunque hoy en día no se sabe a ciencia cierta porque una persona llega a volverse obesa, ya que muchas veces ese individuo muestra conductas similares a otros con iguales condiciones de alimentación , que tienen un peso normal. No obstante, como regla general se puede decir que la causa fundamental de la obesidad está dado por el hecho de una ingestión superior al gasto o sea, que lo cotidiano es que el obeso coma más de lo que necesita.

    En el caso de los trabajadores de la escuela primaria Carlos M. de Céspedes se pone de manifiesto en varias de las persona una alimentación excesiva comparado con el gasto de energía que tienen estos durante todo el día, ya que ellos están inmersos en el sedentarismo. Es por esto que tenemos en el presente trabajo el objetivo de diseñar un programa fuera del horario de clases para el tratamiento de la obesidad en los trabajadores de la escuela Carlos Manuel de Céspedes de la ciudad de Camagüey.

Métodos

Selección de la muestra

    La selección de la muestra se realizo de una forma intencional, ya que de los 9 trabajadores obesos que laboran en la escuela Carlos Manuel de Céspedes se obtuvo como muestra a todos estos obesos, representando esto un 100% de la población.

Criterios de inclusión

  • Laborar en la escuela Carlos Manuel de Céspedes.

  • Ser obeso.

  • Estar dispuesto a realizar parte del grupo que cumplirá con la estrategia planificada.

  • No tener contraindicaciones de realizar ejercicios físicos según sus médicos de familia.

Estudio de los pacientes. Procedimiento de la investigación

    Se realizo una investigación a cada paciente, la cual recoge la siguiente información:

    Se logro conocer que todas las personas con esta enfermedad fueron del sexo femenino y están en un rango de edad de 37 a 50 años de edad, ninguna de ellas practica la cultura física terapéutica, ni realizan actividad física consciente, pero las 9 o sea el 100% está de acuerdo en realizar la estrategia que ayudara a bajar su peso corporal, donde esta se llevara a cavo fuera del horario de clases, y se acordó por decisión de todos comenzar a las 5:00 pm. Teniendo disponible de 60 a 90 min un total de 6 trabajadoras, de 90 a 120 min 3 trabajadoras. También se obtuvo que 5 son hipertensas, 4 presentan diabetes y 4 padecen de asma. Todas estas personas coinciden en que padecen de esta enfermedad hace menos de 15 años menos una que lo padece desde hace aproximadamente 20 años

    Después de conocer los anteriores datos se realizo una medición que permitió determinar el tipo de obesidad que padecían las 9 trabajadoras de la muestra.

    La medición que se realizo fue el método del índice de masa corporal (IMC) el cual consiste en aplicar la siguiente fórmula utilizando el peso en kilogramos y la talla, determinada de la siguiente manera:

IMC = peso en kilogramos / talla en metros al cuadrado. (4)

Tipo de obesidad Edad

    Después de utilizar la fórmula anterior se pudo obtener el tipo de obesidad que padecía cada paciente como se muestra a continuación:

  • Con grado I, 3 mujeres representando el 33,3%

  • Con grado II, 5 mujeres representando el 55,6%

  • Con grado III, 1 mujer representando el 11,1%

  • Con grado IV, no se presento ningún caso.

    Desde hace algunos años se recomienda cada vez más la práctica del ejercicio de forma regular. Esto es debido a que el cuerpo humano ha sido diseñado para moverse y requiere por tanto realizar ejercicio físico de forma regular para mantenerse funcional y evitar enfermar.

    Se ha comprobado que el llevar una vida físicamente activa produce numerosos beneficios tanto físicos como psicológicos para la salud.

Etiopatogenia de la obesidad y la influencia del ejercicio físico sobre las manifestaciones de esta enfermedad

  • Disminuye el riesgo de mortalidad por enfermedades cardiovasculares.

  • Reduce el riesgo de muerte prematura.

  • Previene y o retrasa el desarrollo de hipertensión arterial, y disminuye los valores de tensión arterial en hipertensos.

  • Mejora el perfil de los lípidos en sangre (reduce los triglicéridos y aumenta el colesterol HDL).

  • Disminuye el riesgo de padecer diabetes no insulina dependiente.

  • Disminuye el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer (colon, mama).

  • Ayuda a controlar el peso corporal disminuyendo el riesgo de obesidad hasta un 50%.

  • Ayuda a mantener y mejorar la fuerza y la resistencia muscular, incrementando la capacidad funcional para realizar otras actividades físicas de la vida diaria.

  • Ayuda a mantener la estructura y función de las articulaciones, por lo que puede ser beneficiosa para la artrosis.

  • Ayuda a conciliar y mejorar la calidad el sueño.

  • Mejora la imagen personal.

  • Ayuda a liberar tensiones, mejora el manejo del estrés, la ansiedad, la depresión y los sentimientos de soledad.

  • Ayuda a combatir, mejorar los síntomas de la ansiedad, la depresión, aumenta el entusiasmo y el optimismo.

  • En adultos de edad avanzada, disminuye el riesgo de caídas, ayuda a retrasar o prevenir las enfermedades crónicas y aquellas asociadas con el envejecimiento. De esta forma mejora su calidad de vida y aumenta su capacidad para vivir de forma independiente.

  • Disminuye el riesgo de padecer dolores lumbares y de espalda.

  • Incrementa el funcionamiento del sistema cardiovascular y respiratorio para mejorar la perfusión tisular y por ende el aporte de oxígeno y nutrientes a los tejidos.

  • Opera cambios en la mente del hombre hacia direcciones más positivas independientemente de cualquier efecto curativo. Un programa de ejercicio adecuado fortalece la psiquis humana.

  • Aumenta la circulación cerebral, lo que hace al individuo más despierto, alerta, y mejora los procesos del pensamiento.

  • Prolonga el tiempo socialmente útil del hombre así como al mejorar su capacidad física muscular eleva sus niveles productivos, por lo que retarda los cambios de la vejez. Asegura una mayor capacidad de trabajo y ayuda al aseguramiento de la longevidad.

    El ejercicio físico se ha convertido hoy en día en un fármaco natural para la medicina preventiva; tiene gran incidencia, especialmente en enfermedades de tipo metabólicas, y se prescribe la práctica de este para mejorar la calidad de vida.

    Los ejercicios más recomendados para ser realizados por los obesos son los aeróbicos, por consumir mayor cantidad de energía y crear menos productos de desecho nocivos al organismo (como el ácido láctico), así como por utilizar como fuente de energía, además de los carbohidratos, los lípidos.

    Estos procesos aeróbicos se logran con ejercicios de larga duración, sin ser excesivamente prolongados, efectuados con un ritmo lento o medio y la participación de grandes grupos musculares con esfuerzos dinámicos.

    Aunque hoy en día el ejercicio con pesas, es un componente importante en el entrenamiento de los obesos ya que hace aumentar el volumen muscular y esto contribuye a mantener un metabolismo basal elevado. Como podemos ver el tratamiento del obeso es multifactorial, aunque fundamentalmente está sustentado sobre la combinación de los dos últimos pilares (dieta – ejercicio).

    Se observa que existe una prevalencia en los tipos de obesidad de grado I y II lo que se tendrá en cuenta para planificar el sistema de ejercicios físicos.

    El tratamiento de la obesidad se apoya en cuatros pilares fundamentales:

  • Educación para la salud: El obeso debe conocer todo lo relacionado con la obesidad, por lo que la información constituye un pilar fundamental. Lo ayudará a comprender su problema y/o erradicarlo adecuadamente.

  • El apoyo psicológico: Es un aspecto de mucha importancia en el tratamiento de estos pacientes, ya que una gran parte de los obesos son muy ansiosos, y le da más apetito, además es importante descubrir las motivaciones que puede llevar a cada paciente a interesarse por el tratamiento de reducción del peso corporal.

  • Dieta: Sin ella no hay reducción de peso. La dieta debe ser hipocalórica, calculada para las 24 horas del día, fraccionada en seis comidas, individual, en dependencia del gusto del paciente y su familia, ya que surge de lo que come la familia, solo que reducida en cantidad. Debe ser calculada a razón de 20 calorías por kilogramos de peso ideal.

Estructura del programa para obesos

    Para la mejor aplicación del entrenamiento rehabilitador en este tipo de pacientes, es recomendable dividir el mismo en tres etapas, adaptación, intervención y mantenimiento, esto con el fin de que estos pacientes primero se adapten, aprendan poco a poco los ejercicios, de ahí en adelante una continuación.

Datos generales de la I etapa

  • Duración: 1 mes.

  • Frecuencia: 3 veces / semana.

  • Intensidad: 50 a 55 % de la FC máx.

  • Capacidades físicas a desarrollar: Resistencia general, coordinación y amplitud articular.

  • Duración de la sesión de ejercicios: 30 a 45 minutos.

Datos generales de la II etapa

  • Duración: 2 – 3 meses.

  • Frecuencia: 5 veces / semana.

  • Intensidad: 55 a 70 % de la FC máx.

  • Capacidades físicas a desarrollar: Resistencia general, fuerza a la resistencia, coordinación y amplitud articular.

  • Duración de la sesión de ejercicios: 60 a 90 minutos.

Datos generales de la III etapa

  • Duración: Toda la vida.

  • Frecuencia: 4 veces / semana.

  • Intensidad: 70 a 80 % de la FC máx.

  • Capacidades físicas a desarrollar: Resistencia general, fuerza a la resistencia, coordinación y amplitud articular.

  • Duración de la sesión de ejercicios: 50 a 60 minutos.

Descripción de la propuesta

Objetivo general

  • Contribuir a la disminución del peso corporal en grasa y aumentar la condición física, posibilitando el mejoramiento de la calidad de vida de las pacientes.

Contenido del programa

Tipos de ejercicios

  • Calentamiento (estiramiento y movilidad articular)

  • Desarrollo de la resistencia aeróbica.

  • Desarrollo de la fuerza muscular

  • Juegos adaptados

  • Técnicas de relajación

Contenido primera

Etapa

Segunda

Etapa

Calentamiento

30 min / sem

50 min / sem

40 min / sem

Desarrollo de la resistencia aeróbica.

60 min /sem

20-140 min /sem

90-120 min / sem

Desarrollo de la fuerza muscular

 

50-60 min / sem

15-20 min / sem

Juegos adaptados

 

30- 90 min / sem

30-40 min/ sem

Técnicas de relajación y respiración

30 min / sem

50 min / sem

40 min / sem

  • Ejercicios de calentamiento: Se realizarán ejercicios de acondicionamiento general con movimiento de todas las articulaciones y que sean de fácil asimilación por parte de las mujeres obesas. Se debe utilizar como forma de calentamiento el activo general.

  • Ejercicios fortalecedores: Para el desarrollo de la fuerza proponemos ejercicios sencillos sin implementos y ejercicios con implementos, que se pueden combinar.

  • Ejercicios aeróbicos: En relación con las categorías y manifestaciones de la resistencia, pensamos que se debe desarrollar la resistencia general, también llamada resistencia de base, que es la recomendada para mantener o recuperar la salud.

  • Juegos adaptados con pelotas y otras actividades: Se pueden incluir juegos con pelotas que no tengan carácter competitivo y de mediana a larga duración, con modificación de la regla para evitar que la intensidad del juego esté por encima de las posibilidades de los pacientes.

  • Ejercicios de relajación muscular: Son utilizados en la parte final de la clase con el objetivo de lograr una total recuperación de los signos vitales (presión arterial, frecuencia cardiaca y frecuencia respiratoria) y de la musculatura que intervino en la actividad. Generalmente son combinados con los ejercicios respiratorios, desde la posición decúbito supino o sentado.

  • Ejercicios respiratorios: Juegan un importante papel dentro de los programas de ejercicios físicos para pacientes obesos, ya que contribuyen a una mejor oxigenación por parte del paciente, ayudando a la asimilación de las cargas de trabajo y a una más rápida recuperación.

    Después de efectuar los procedimientos antes descritos se realizó una segunda medición en la cual se puede ver las diferencia en comparación con la primera medición, también tenemos que decir que para esto tuvimos que trabajar diez meses sin descanso ni fallos para poder obtener estos resultados, que permitió determinar el tipo de obesidad que padecían las 9 trabajadoras de la muestra. La medición que se realizó fue el método del índice de masa corporal (IMC)

Tipo de obesidad Edad

  • Sobrepeso grado II (pre-obesidad), 1 mujer representando el 11.1%

  • Con grado I, 4 mujeres representando el 44,4%

  • Con grado II, 3 mujeres representando el 33,3%

  • Con grado III, 1 mujer representando el 11,1%

    Después de analizar la tabla y los datos obtenidos podemos decir que de las obesas de grado I se logró que pasara a la clasificación de sobre peso grado II, también podemos ver como las obesas de grado II pasan dos a ser obesas de grado I, y las que se mantuvieron se observo una pérdida de peso considerable. Y la de 43 años, obesa de grado III pierde peso corporal también aunque no logra pasar al grado II.

Conclusiones

  1. Las teorías estudiadas acerca del tratamiento de la obesidad permiten fundamentar la utilización de los ejercicios físicos como medio eficaz para su eliminación en los trabajadores con este padecimiento.

  2. En los trabajadores de la escuela Carlos Manuel de Céspedes, predominan la obesidad grado uno y dos, las causas predominantes en el desarrollo de esta enfermedad son la actividad física reducida y la alimentación inadecuada

  3. Se diseñó un sistema de ejercicios físicos terapéuticos a partir de las características de las mujeres obesas, que contiene los elementos necesarios para el tratamiento de la obesidad en las personas estudiadas. Y se obtuvo un efecto positivo ya que todas rebajaron su peso corporal. Y disminuyo la obesidad grado II pasando a ser de grado I y otra a sobre peso grado II.

Notas

  1. Hernández, G. CD Universalización. Cultura Física terapéutica, 90p.

  2. Álvarez Cambra, R. Programa para las áreas terapéuticas de la Cultura Física, 143p.

  3. Colectivo de autores. Material mimeografiado, Manual de Apoyo de Enfermedades Crónicas no trasmisibles. 17p. (Obesidad)

  4. Colectivo de autores. Programa Cultura física terapéutica en el paciente obeso.135p.

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