Lecturas: Educación Física y Deportes
www.efdeportes.com/
Revista Digital


¿TAXONOMIA DE LAS ACTIVIDADES
O DE LAS SITUACIONES MOTRICES?

José Hernández Moreno, Ulises Castro Núñez, Heriberto Cruz Cabrera, Guillermo Gil Sánchez,
Luz Mª Hernández Melián, Miriam Quiroga Escudero, Juan Pedro Rodríguez Ribas
Grupo de Estudios e Investigaciones Praxiológicas (GEIP)
PMoreno@cief.eef.ulpgc.es

Departamento de Educacion Fisica
Universidad de las Palmas de Gran Canaria


Resumen
La Praxiología Motriz, en tanto que ciencia de la acción motriz cuyo ámbito de estudio son las situaciones motrices, en el proceso de construcción de los saberes que a partir de la misma se pueden generar, trata de hacer aportaciones elaboradas desde su propia especificidad.
En la construcción del conocimiento científico, uno de los aspectos que deben ser considerados es el de clasificar a las actividades y ámbitos propios de la ciencia que se elabora. Por ello hemos elaborado una clasificación de las situaciones motrices partiendo de criterio de especificidad y desde la lógica interna de dichas situaciones motrices.
Los criterios que hemos empleado para la elaboración de la clasificación de las situaciones motrices han sido los siguientes:
  • El objetivo motor prioritario de la tarea plateada,
  • El tipo de interacción motriz que se da entre los participantes y
  • Los aspectos espaciales referidos a su estandarización o no y la forma de uso del mismo por parte de los participantes ( común o separado).
Los objetivos motores de la tarea pueden ser de cinco tipos
  • Situar al móvil en un espacio y/o evitarlo
  • Efectuar y/o evitar traslaciones
  • Combatir cuerpo a cuerpo y/o evitarlo con o sin implemento
  • Reproducir modelos y/o evitarlo y
  • Efectuar actividades interoceptivas.
Los tipos de interacción motriz pueden ser las siguientes
- Presencia/ausencia de compañero/s y/o adversario/s
Los aspectos espaciales pueden ser como sigue:
- Utilización del espacio
* Común o separado
- Estandarización
* Estandarizado o no estandarizado
De la combinación de los tres criterios empleados se obtiene el cuadro final en el que se comprueba la ubicación de las diferentes situaciones motrices existentes en la actualidad ( juegos motores, deportes, expresión motriz), así como casillas vacías, dado que en la actualidad no existen situaciones motrices que puedan ser consideradas en las mismas, pero que es posible que puedan existir en un futuro.
Los objetivos motores no se corresponden de forma directa con un determinado deporte siempre y en todos los casos aunque puede ocurrir que algunos deportes sí se correspondan.
Debe tenerse en cuenta que la clasificación es de situaciones motrices y no de deportes como tales. Los deportes suelen tener un objetivo motor prioritario que es el que se puntúa, pero pueden tener otros objetivos motores que no se puntúan.

Palabras clave: Taxonomía. Objetivo motor. , Interacción motriz. Aspectos espaciales.


1. Planteamiento del problema
Uno de los momentos epistemológicos importantes en la elaboración del conocimiento científico es la realización de clasificaciones o taxonomías en el ámbito que se pretende estudiar. Con la pretensión de aportar una propuesta desde el ámbito de la Praxiología Motriz se ha elaborado el presente trabajo.

En la primera etapa se ha hecho una revisión bibliográfica en la que se han consultado diversos autores, que han tenido como criterio principal la estructura funcional de la actividad (Fitts, P. -1965-, Bouet, M. -1968-, Durand, G. -1969-, Tessie, J. -1971-, Matveivev, L. - 1975-, Knapp, B. -1979-, Parlebas, P. -1981-, Hernández, J. y Blázquez, D. -1983-, Largadera, F. y col. -1993-, Amador, F. -1994-).

El verdadero inconveniente, de estas taxonomías, radica en que se siguen unos criterios poco diferenciados a la hora de definir las ramas en las que se engloban las distintas actividades lúdicas, deportivas y expresivas. Esto trae como consecuencia encontrarnos determinadas prácticas con una lógica interna totalmente diferente en el mismo grupo, y viceversa, o peor aún, que pudieran aparecer en varias categorías diferentes. Este hecho supone un gran problema epistemológico y didáctico a la hora de plantear progresiones de aprendizaje si seguimos una metodología multisituacional.

En cuanto a este tema se refiere, nuestro grupo de trabajo (G.E.I.P.) siempre ha tenido cierta inquietud por modificar alguna de las taxonomías existentes o elaborar una nueva. Teniendo en cuenta como criterio de partida el objetivo motor prioritario de la práctica, pretendemos ordenar, de forma lógica y coherente, dichas actividades. Este precepto provocará que se ubiquen cada una de ellas en un lugar único y pertinente, dándole de esta forma sentido a la actividad.

Posteriormente, aparecerán otros que nos terminarán de categorizar, de forma más precisa, todas las actividades lúdicas, deportivas y expresivas posibles. Esto también nos permitirá crear nuevas tareas que, hoy por hoy, no encontramos, y que simplemente serán el resultado de la combinación de las distintas variables taxonómicas.

Por otro lado, hemos de enmarcar nuestro estudio dentro de un paradigma científico que nos delimite los razonamientos de partida ante el problema inicial planteado. En este sentido, tomaremos el campo de estudio de la Praxiología Motriz, es decir, el conjunto de situaciones motrices que se producen durante el desarrollo de prácticas lúdicas, deportivas y expresivas. Si tenemos en cuenta que desde este ámbito epistemológico se entiende por situación motriz a la estructura de datos que surge de la realización de una tarea motriz, nos define, claramente, la línea epistemológica a partir de la cual desarrollaremos posteriormente los criterios taxonómicos.


2. Objetivos
Teniendo en cuenta el marco epistemológico en el que nos estamos moviendo, el planteamiento de los objetivos de este estudio se han centrado en:


3. Metodología
La elaboración final de la clasificación ha pasado por varias fases. En primer lugar nos dedicamos a agrupar actividades lúdicas, deportivas y expresivas que, desde nuestro punto de vista, mostraban un cierto parecido en cuanto a desarrollo del juego se refiere, encontrándonos con grupos de actividades cuyas lógicas internas eran muy similares.

El siguiente paso consistió en estudiar la razón de dichas similitudes, llegando a la conclusión de que el eje principal, sobre el que rota la actividad, es el objetivo motor de la tarea.

A continuación, se desarrollaron criterios de segundo nivel con el fin de ir separando las prácticas que, aunque pertenecían a la misma categoría, mantenían ciertas diferencias.

En este sentido fuimos desglosando las actividades a partir de criterios espaciales y comunicacionales, surgiendo una estructura en cascada en la que cada categoría establecía diferencias significativas respecto a la anterior. De esta forma, quedaron grupos de deportes con lógicas internas semejantes y sin que ninguno de ellos apareciera en ninguna otra categoría.

Por ello, no siempre se establecían categorías ejemplificadas por una actividad determinada, ya que la combinación de los diferentes criterios utilizados (espaciales y comunicacionales) daban como resultado una determinada situación motriz, y no una actividad. Aún así, siguen existiendo combinaciones en las que no se puede ubicar ni actividades ni situaciones, lo cual crea grandes expectativas para la elaboración de nuevas prácticas.


3.1. Criterios utilizados
Para ir desarrollando la estructura que mencionamos anteriormente, definimos una serie de criterios que nos ayudaron a tal propósito, estos son:

  1. El Objetivo de la Tarea:
    • Situar el Móvil en un Espacio y/o Evitarlo:
      • Llevar el móvil a una meta y/o evitarlo.
      • Enviar y/o evitar el reenvío del móvil.
    • Efectuar y/o Evitar Traslaciones:
      • Efectuar y/o evitar superaciones espaciales.
      • Efectuar y/o evitar superaciones temporales.
      • Efectuar y/o evitar superaciones espacio/temporales.
      • Efectuar acciones de precisión y/o evitarlas.
    • Combatir cuerpo a cuerpo y/o evitarlo con o sin implemento:
      • Golpear y/o evitarlo.
      • Derribar y/o evitarlo.
      • Dominar y/o evitarlo.
      • Excluir y/o evitarlo.
    • Reproducir Modelos y/o evitarlo.
      • Efectuar Actividades Interoceptivas.

  2. La Interacción motriz:
    • Presencia/Ausencia de Compañero/s y/o Adversario/s.

  3. Aspectos Espaciales:
    • Utilización del Espacio:
      • Común.
      • Separado.
    • Estandarización del Medio:
      • Estandarizado.
      • No Estandarizado.


4. Propuesta Taxonómica
4.1 Objetivo de la tarea
El objetivo motor de la tarea lo definimos como el aspecto de la lógica interna que implica la demanda motriz prioritaria a conseguir por el/los participante/s y que da sentido a dicha práctica. Todo ello, independientemente, de la configuración de las condiciones del contexto motriz (modo de operar con el móvil, el/los material/es, el espacio, el tiempo, el individuo y los posibles compañeros y/o adversarios). Entre éstos tenemos:


4.2. Interacción Motriz
Parámetro por el cual podemos observar la posibilidad y características de la relación entre los elementos que mencionamos a continuación, teniendo en cuenta que siempre que haya presencia de dichos elementos esta debe ser esencial:


4.3. Apectos Espaciales
4.3.1. Utilización del Espacio
Este apartado hace referencia al uso de la/s zona/s de juego en las que se desarrollará la actividad.

4.3.2. Estandarización del Medio
Define la mayor o menor estabilidad del espacio en el que se desarrollan las acciones motrices. Esto incidirá en la toma de decisiones del participante. Hemos establecido dos subgrupos:

El cuadro final, incluyendo algunos ejemplos de actividades conocidas y otras creadas con los criterios taxonómicos de cada rama, quedaría de la forma que podemos observar en la siguiente pantalla, teniendo en cuenta que la leyenda de los subobjetivos que aparecen en dicho cuadro es la siguiente:

1. Llevar el móvil a una meta y/o evitarlo.
2. Enviar y/o evitar el reenvío del móvil.
3. Efectuar y/o evitar superaciones espaciales.
4. Efectuar y/o evitar superaciones temporales.
5. Efectuar y/o evitar superaciones espacio/temporales.
6. Efectuar acciones de precisión y/o evitarlas.
7. Golpear y/o evitarlo.
8. Derribar y/o evitarlo.
9. Dominar y/o evitarlo.
10. Excluir y/o evitarlo.
11. Reproducir modelos y/o evitarlo.
12. Efectuar actividades interoceptivas.


4. Conclusiones


En definitiva, creemos que con esta nueva propuesta taxonómica hemos conseguido agrupar las diferentes prácticas lúdicas, deportivas y expresivas según la semejanza de sus lógicas internas, centrándonos en los objetivos motores de éstas y, finalmente, posibilitándonos la creación de nuevas prácticas. No obstante, queda abierta a nuevas aportaciones o matizaciones y, sobre todo, estará en función del sentido u objetivo motor que cada uno le de a la práctica que esté realizando (el Footing puede tener, para algunos, un objetivo interoceptivo y, para otros, un objetivo de superación espacio-temporal, por lo que, evidentemente, dependerá del sentido que se le de a la actividad más que de la propia actividad).


5. Aplicaciones


6. Bibliografía


7. Anexo. Otras Taxonomías
Bouet, M. (1968):


Durand, G. (1969):

Fitts, P.M. (1965):

Knapp, B. (1979):

Matveivev, L. (1975):

Tessie, J. (1971):

Parlebas, P. (1981): Esta conocida clasificación considera toda situación motriz como un sistema de interacción global entre un sujeto actuante el entorno físico y el/los otro/s participante/s eventual/es.

Hernández, J. y Blázquez, D. (1983): Estos dos autores añaden a la taxonomía de Parlebas dos nuevos elementos:


Amador, F. (1994): Según el criterio de acción motriz luctatoria distingue entre:

Devís, J. (1993):
  1. Juegos de invasión (fútbol).
  2. Juegos de cancha dividida (tenis).
  3. Juegos de campo y bate (béisbol).
  4. Juegos de muro o pared (squash).
  5. Juegos de blanco-diana (golf, bolos).


Lecturas: Educación Física y Deportes
http://www.efdeportes.com/
Revista Digital
Año 4. Nº 13. Buenos Aires, Marzo 1999.