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Inventando un héroe nacional. Jorge 'El Mágico' González
y la identidad nacional salvadoreña

   
Lic. en Historia
(Costa Rica)
 
 
Chester Urbina Gaitán
chesterurbina@yahoo.com
 

 

 

 

 
    En El Salvador se le conocía como "Mago". Posteriormente, cuando jugaba en España se le modificó a "Mágico". Sus genialidades sirvieron para clasificar a la Selección salvadoreña para el mundial 82. En aquel mundial Jorge dejó destellos de su clase a pesar de las goleadas que sufrió el conjunto salvadoreño. No en vano Mágico formó parte del mejor once del Mundial, pese a que su selección perdió los tres partidos, marcando sólo un gol. Eso fue suficiente para que tanto el Atlético de Madrid como el Cádiz se interesaran por sus servicios, siendo el Cádiz quien consiguió traérselo a sus filas.
 

 
http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 12 - N° 114 - Noviembre de 2007

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Jorge 'El Mágico' González

Introducción

    A fines del siglo XIX los intelectuales salvadoreños que trabajaban para el Estado trataron de promover un proyecto de nación sustentado en el pensamiento europeo de la época, que los llevó a compartir la fe en el progreso, así como el rechazo a la tradición cultural indígena, considerada como muestra de atraso y, en consecuencia, un freno al desarrollo1.

    Unos de los más destacados intelectuales de esta época fue Francisco Gavidia quien se encargo de realizar una reelaboración literaria del pasado precolombino2. Pese a la formulación de esta mitología indígena los liberales salvadoreños prefirieron elaborar otros mitos más acordes con sus ideales. En realidad, el discurso dominante fue aquel que propugnaba por la modernización y el progreso. Los mitos indígenas a lo sumo podrían ser aceptados como accesorios, pero no iban a ser incorporados como parte fundamental de la cultura.

    Debieron pasar varios años para que se tuviese una concepción diferente del indio y de las posibilidades que este ofrecía para enriquecer la cultura salvadoreña. Este cambio se dio en la década de 1920, cuando un grupo de intelectuales intentaron reformular la idea de nación liberal. Esta vez se trató de construir una imagen individualizada de El Salvador, recurriendo a elementos culturales. Para ello se reelaboró la imagen del indio, principalmente por medio del rescate y mitificación del cacique Atlacatl3.

"El Mágico" y el arquetipo salvadoreño

    Jorge Alberto González Barillas, "El Mágico" González nació en San Salvador el 13 de marzo de 1957. Comenzó su carrera de futbolista en el ANTEL (Administración Nacional de Telecomunicaciones) donde permaneció durante dos temporadas para luego pasar al FAS (Futbolistas Asociados Santanecos) de Santa Ana, de la Primera división salvadoreña.

    En El Salvador se le conocía como "Mago". Posteriormente, cuando jugaba en España se le modificó a "Mágico". Sus genialidades sirvieron para clasificar a la Selección salvadoreña para el mundial 82. En aquel mundial Jorge dejó destellos de su clase a pesar de las goleadas que sufrió el conjunto salvadoreño. No en vano Mágico formó parte del mejor once del Mundial, pese a que su selección perdió los tres partidos, marcando sólo un gol. Eso fue suficiente para que tanto el Atlético de Madrid como el Cádiz se interesaran por sus servicios, siendo el Cádiz quien consiguió traérselo a sus filas.

    Su debut con el Cádiz se produjo en un amistoso ante La Barca de la Florida en Vejer (Cádiz) y su debut oficial fue el 11 de septiembre del 1982, en un Cádiz-Murcia que finalizó 1-3. En el Cádiz, Mágico no tardó en deslumbrar a la afición española con sus golazos. En cuatro temporadas se metió a la afición cadista en el bolsillo y se le permitió todo tipo de indisciplinas. Su excéntrica forma de ser, su afición a la noche y a dormir eran motivo de todo tipo de anécdotas y comentarios pero cuando llegaba el partido y los pañuelos poblaban las gradas de Carranza se le perdonaba todo, ya que la afición cadista era consciente de que si no hubiera sido un bohemio habría sido fichado por uno de los grandes del fútbol mundial.

    Tras el descenso del Cádiz a Segunda en la temporada 1983-1984 Paris Saint Germain y Fiorentina se interesaron por "El Mágico" pero Jorge dijo que no se marchaba ni por todo el oro del mundo. En enero de la temporada 84/85 y tras sus juergas nocturnas y desavenencias con Benito Joanet, su entrenador, autoriza su traspaso al Real Valladolid donde el club vallisoletano le hace un estrecho marcaje a su vida privada pero Jorge demuestra que es incorregible y el equipo de Pucela lo deja marchar.

    Tras una temporada en blanco en América y con la firme promesa del por entonces presidente del Cádiz, Manuel de Irigoyen, de que no volvería a jugar en el Cádiz regresa a su Cádiz en 1986 con un contrato muy particular: 700 dólares por partido jugado. El Cádiz se guardaba así las espaldas ante sus conocidas salidas nocturnas. Tras otro intento del club italiano Atalanta por ficharlo, permanece en el Cádiz hasta el 6 de junio de 1991. Posteriormente, regresa a El Salvador y se enrola en las filas del FAS, donde estuvo jugando hasta 19964.

    Debido a sus triunfos deportivos como la obtención del Campeonato Nacional de Fútbol de El Salvador en 1995 con el FAS, en el Acuerdo No. 44 del miércoles 1 de octubre de 2003 se establece que el Estadio Nacional "Flor Blanca" se llamaría como Estadio Nacional "Jorge el Mágico González"5. Pese a este reconocimiento el deportista cuestionó el nombramiento del estadio: "Es que a mí me encanta el nombre de Flor Blanca, porque me gustan las flores y la madre naturaleza"6.

    Luego de todo lo anterior cabe formular la siguiente inquietud: ¿Qué tanto se siente identificado "El Mágico" con su identidad nacional? Su posición ante esto se puede constatar en una entrevista que le hiciera "La Prensa Gráfica":

- ¿Qué tan orgullosos de ser salvadoreño se siente usted? ¿Mucho, algo, poco o nada?
- Todo eso resumido.
- ¿Cuál es la principal característica positiva de los salvadoreños?
- La bondad.
- ¿Cuál, a su juicio, es la principal característica negativa?
- La irresponsabilidad.
- ¿Qué personaje de la historia del país lo hace sentir orgullo de ser salvadoreño?
- Los de plumas y arcos, tipo Atlacatl y los pipiles.
- ¿Qué lugar turístico de El Salvador le gusta?
- Me gustan los matorrales y los ríos. Es alucinante. Me alucina ser terráqueo.
- ¿Cuál es el símbolo o emblema que más identifica a los salvadoreños?
- La bandera con el escudo.
- Si tuviera que escoger una nacionalidad distinta a la salvadoreña, ¿la de qué país tomaría?
- La del mundo que llamamos Tierra.
- ¿Cuál nacionalidad nunca tomaría?
- Tomaría cualquiera, porque la que desprecie podría necesitar de mí en ese momento7.

    De la entrevista anterior se desprende la identificación de este deportista con su identidad indígena. Esto lo reafirma cuando declara lo siguiente: "Claro que no me molesta que me digan indio. Me gusta ser feo, es parte de la belleza del indio"8. Esto es interesante, pese a que en El Salvador luego de la matanza de 1932 se inicia un proceso de mestizaje9 y de negación10 o invisibilización11 de lo indígena por parte del Estado.

    Sin embargo, en la segunda mitad del siglo XX, algunos intelectuales militantes de izquierda, como Pedro Geoffroy Rivas y Oswaldo Escobar Velado, desde la poesía, y Jorge Arias Gámez, incorporaron a los sectores subalternos, especialmente a los indígenas en la historia nacional salvadoreña, como una forma de rechazo a la tradicional historia liberal que daba todo el protagonismo a los próceres independentistas y a los caudillos12.

    Asimismo, el poco sentimiento de identificación nacional de este "héroe" deportivo era de esperarse. A partir de los años setenta, y sobre todo en la década de los ochentas El Salvador experimenta los trastornos de la guerra civil, poniendo en crisis el sistema político de este país. Se desarticulan las estructuras sociales y los sistemas de normas y valores de gran número de poblados, favoreciendo la migración interna y externa - principalmente hacia Estados Unidos - de grandes contingentes de personas. La identidad nacional, en este sentido se define en virtud de las relaciones de oposición y conflicto al menos con tres identidades socioculturales diferentes: las oposiciones salvadoreño/angloamericano, salvadoreño/mexicano y salvadoreño/centroamericanos. Es por esto que la identidad nacional salvadoreña constituye una identidad de tipo conflictiva13.

    Dada la inexistencia de un proyecto integral de nación en El Salvador, la invención de "El Mágico" como héroe deportivo nacional es tomada por el Estado como una medida paliativa a esta seria deficiencia política. Según una publicación de una universidad salvadoreña la figura de "El Mágico" ha sido sobredimensionada: "... los medios han trabajado denodadamente por convertir al "Mágico" González en un referente para los salvadoreños. Para ello, han sobrevaluado sus capacidades como futbolista: lo han convertido en un genio, sino el más grande de la historia, sí en uno que está, con todo derecho, a la par de otros grandes como Pelé, Di Stéfano y Diego Maradona. Los medios nunca cesan de recordar su grandeza; las anécdotas de quienes los conocieron en España siempre hablan de su genialidad. Se trata de un genio que, pese a surgir de abajo, llegó a acariciar el éxito en España, donde lo tuvo todo -dinero, bienes de lujo, viajes, reconocimiento- al alcance de la mano. Pero, nos dicen los medios, para acceder a ese mundo tenía que renunciar a ser él mismo, tenía que renunciar a su indisciplina, su vida desordenada, sus juergas y sus desvelos"14.

    Según Claudio Tamburrini los deportistas comunes son más frecuentemente cuestionados por los aficionados que los ídolos populares, y en términos más fuertes. El reconocimiento y la admiración que pueden llegar a cosechar en las ocasiones favorables son rápidamente retirados en la derrota. Empero, esta crítica subestima la capacidad de un atleta para elaborar un fracaso laboral15. En el caso de "El Mágico" su forma de reinventarse radicó en su prioridad por la diversión, incluso por encima del fútbol16.

    La figura de "El Mágico" es similar a la del pibe argentino. Para Sergio Villena el pibe es un personaje rebelde, pícaro, malicioso, poco respetuoso del orden establecido y que, en esa medida, hilvana genialidades con los pies y hace declaraciones que resquebrajan la mitología nacionalista oficial. El pibe es un verdadero niño sólo cuando juega; su espíritu juguetón, indisciplinado, rebelde, le otorga la libertad necesaria para la creación y la genialidad. En él no se admira su fortaleza física (por el contrario, ésta es con frecuencia caricaturizada), sino su "maña", su capacidad para el dribbling, para la gambeta. Para él la cancha no es un campo de batalla, sino un lugar para jugar; no hace la guerra, se divierte; no derrama sudor, ríe17.

    Pese a que la figura de "El Mágico" no constituye un referente moralizador, su admiración como sujeto popular que triunfó en el extranjero hace que se le dediquen varios poemas siendo unos de ellos el que se expone a continuación:

"Tristemente Mago" (Pedro Valle)

De la raíz de la noche
surgió con paso seguro,
desequilibrando al tiempo
con la finta del talento.
Fiesta que nace en los pies,
balada del único hombre que trasciende geografías
con el sol de la nostalgia.
Artista entre multitudes,
regalando hermosas tardes
junto con flores nuevas en la garganta del viento.
Van Gogh de los amarillos,
entre la luz y la sombra siempre ganas el partido
en el estadio de la vida.
Regresa de los mares, singular conquistador,
con tu generosa estrella en lo alto de los sueños,
para todos los que tienen una patria de dolor18.

    Con respecto a la última estrofa del poema anterior sobresale la admiración que se tiene por el "triunfo" de "El Mágico". Para Jorge Colorado los migrantes salvadoreños que viven en Estados Unidos en sus visitas al país, traen consigo una serie de artículos, que son distribuidos entre sus familiares y amigos. La actitud del migrante cuando regresa es la de demostrar a sus familiares "Lo bien que está", en dichos encuentros es casi una necesidad expresar que ya ha logrado prosperar, ahora representa a un nuevo hombre, más moderno, más de mundo y por ende diferente cualitativamente al resto, con deseos de manifestar su categoría cosmopolita frente a todos los demás19.


Conclusión

    La erección de Jorge "El Mágico" González en héroe deportivo nacional evidencia la falta de claridad del Estado salvadoreño en la búsqueda de un referente identitario para la juventud, ya que no se ha comprometido en luchar por el cambio de las estructuras que generan la pobreza en el país. "El Mágico" con su vida indisciplinada, bohemia y de poca identificación con la identidad nacional demuestra el fracaso por disciplinar y morigerar las costumbres de los sectores populares salvadoreños. Más que fortalecer un sentimiento de pertenencia colectiva "El Mágico" constituye un icono del salvadoreño que triunfa individualmente fuera de El Salvador. Asimismo, este deportista manifiesta que no siempre la identidad nacional es la principal identidad sociocultural de la persona, principalmente en sociedades donde el Estado no ha sido históricamente hegemónico.


Notas

  1. Algunos de los más destacados intelectuales de la época fueron los siguientes: Darío González, Jorge Lardé, Santiago I. Barberena, Alberto Sánchez, David J. Guzmán, Pedro Fonseca, Rafael Reyes, Antonio Cevallos, Vicente Acosta y Francisco Gavidia.

  2. Hernández Aguirre, Mario. Gavidia. Poesía, literatura y humanismo. San Salvador: Dirección de Publicaciones, Ministerio de Educación, 1968. p.389.

  3. López Bernal, Carlos Gregorio. Tradiciones inventadas y discursos nacionalistas: El imaginario nacional de la época liberal en El Salvador, 1876-1932. San Salvador: Editorial e Imprenta Universitaria, 2007. pp.163-169.

  4. Información tomada de: es.wikipedia.org/wiki/Mágico_González - 28k -

  5. Diario Oficial. Miércoles 1 de octubre de 2003. Tomo No.361. No.181. En: www.imprentanacional.gob.sv/Sumof/sumarios2003/octubre/011003.pdf -

  6. www.laprensagrafica.com/especiales/2003/magicogonzalez/parte1/default.asp - 16k -

  7. archive.laprensa.com.sv/20050911/enfoques/296988.asp - 48k -

  8. www.laprensagrafica.com/especiales/2003/magicogonzalez/parte1/default.asp - 16k - Parte 11.

  9. Gould, Jeffrey L. "Nacionalismo revolucionario y memoria local en El Salvador". En: Euraque, Darío E., Gould, Jeffrey L y Hale, Charles R. editores. Memorias del mestizaje. Cultura política en Centroamérica de 1920 al presente. Guatemala: CIRMA, 2004. pp.395-429.

  10. Marroquín, Alejandro Dagoberto. El problema indígena en El Salvador. En: "América indígena". Vol. 35. Nº 4. 1975.

  11. Chapin, Mac. La población indígena de El Salvador. San Salvador: Ministerio de Educación, 1995.

  12. Arias Gómez, Jorge. Anastasio Aquino, recuerdo, valoración y presencia. San Salvador: Editorial Universitaria, 1963; y del mismo autor: Farabundo Martí. Esbozo biográfico. San José: EDUCA, 1972.

  13. Lara Martínez, Carlos Benjamín. "Las identidades socioculturales de los salvadoreños". En: "Anuario de Investigaciones 2". San Salvador: Universidad Dr. José Matías Delgado, 2002. pp.183-203.

  14. "Proceso". Informativo Semanal. Universidad Centroamericana José Simeón Cañas. Año 25. No.1133. En: www.uca.edu.sv/publica/proceso/proc1133.html - 27k

  15. Tamburrini, Claudio M. "Deporte, Nazismo y Mercado". En: http://www.efdeportes.com Año 2, Nº 7. Buenos Aires. Octubre 1997.

  16. www.univision.com/content/content.jhtml?cid=167830&pagenum=4 - 61k -

  17. Villena Fiengo, Sergio. "Con manos de tierra y corazón de león. Imaginario nacionalista y fútbol en la prensa costarricense". En: http://www.efdeportes.com/ Año 4. Nº 13. Buenos Aires, Marzo 1999.

  18. www.elfaro.net/secciones/el_agora/20060612/ElAgora5_20060612.asp - 41k -

  19. Colorado Berríos, Jorge Arturo. "Etnografía de salvadoreños migrantes en Brentwood y Hepstead, Nueva York". Tesis de Licenciatura en Antropología. Universidad Tecnológica de El Salvador. 2006. p. 49.

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