Lecturas: Educación Física y Deportes. Revista Digital

LOS INDICADORES ESTADISTICOS MAS DETERMINANTES EN EL RESULTADO FINAL EN LOS PARTIDOS DE BASQUETBOL
António Jaime Sampaio

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Porcentajes de eficacia en los lanzamientos de tres puntos
Los %L3 fueron identificados como uno de los dos indicadores que más contribuye para diferencias a los equipos, exclusivamente, en los juegos equilibrados.

En el presente estudio y en todas las categorías de análisis, los resultados expresan, claramente, una relación entre los equipos victoriosos y la mayor cantidad de puntos y cambios en la posesión de la pelota. En este sentido, la contribución relacionada de los %L3 en la construcción de la performance en el juego está expresada en un aumento de puntos por posesión de la pelota, lo que parece influir en el desarrollo de los partidos desequilibrados.

El equilibrio entre el juego interior y el juego exterior es un factor fundamental para el éxito de los sistemas ofensivos de los equipos (Turcoliver, 1997). Los %L3 asumen un rol fundamental en la regulación de este proceso, al "obligar" al equipo oponente el nivel de ayudas, hecho que se considera negativo toda vez que: (i) tiene que recuperar las posiciones de rebote defensivo desde zonas mas alejadas del cesto y (ii) aumenta el espacio disponible para los jugadores interiores que también van a estar sujetos a una menor presión defensiva.


Figura 3. Relación entre espacio y eficacia, frente a la utilización del juego exterior o del juego interior



Faltas cometidas
Las faltas cometidas fueron identificadas como uno de los indicadores que más contribuye para decidir el resultado final en los juegos normales. Como sería de esperar, los equipos que vencieron en más partidos cometieron menos faltas.

El número total de faltas cometidas por un equipo está directamente relacionado con las descalificaciones de los jugadores y el alto número de oportunidades de convertir puntos, a través de tiros libres, por parte del equipo oponente (ver Figura 4).


Figura 4. Relación que se establece entre las faltas cometidas y las victorias en los juegos


Desde otra perspectiva, las faltas cometidas pueden presentarse, salvo raras excepciones1 , como una referencia a los argumentos ofensivos de los jugadores y/o la deficiente preparación defensiva de los equipos. De hecho, uno de los criterios del éxito de la defensa es la capacidad de ejercer presión sobre los oponentes, sin cometer infracciones. Esta relación entre las faltas cometidas y las victorias en los juegos fue bien identificada y sostenida por la gran mayoría de los estudios consultados (Van Gundy, 1978; Pim, 1981; Marques 1990; Coelho, 1996; Mendes, 1996a; Sampaio & Janeira, 1997).

El trabajo de Sampaio & Janeira (1997) merece una mención particular en la discusión de estas cuestiones, ya que se presenta como único al estudiar, en simultáneo con las faltas cometidas, el número de jugadores descalificados. El análisis de los resultados de la fase regular 1995/1996 de la NBA identificó diferencias estadísticamente significativas entre los equipos con porcentajes de victorias por arriba y por debajo del 50%, frente al número de jugadores eliminados2 . Como conclusión principal de este estudio prevalece la idea de la necesidad de los jugadores de controlar cuidadosamente sus faltas personales en la tentativa de no comprometer el potencial defensivo del equipo y de no ser excluidos del juego por acumulación de faltas. Esta idea, a pesar de ser válida en la realidad exclusiva de la NBA, parece reflejar también, aunque desde un punto de vista subjetivo, una comprensión general del juego.

De las cuestiones anteriormente citadas parece claro que, en juegos normales, los equipos que cometen menos faltas vencen en más partidos. Las causas inherentes a este hecho, se dimensionan en torno a dos perspectivas fundamentales: (i) condicionan el número de tiros libres intentados por los equipos adversarios: (ii) mantiene el potencial defensivo, ya que los jugadores recargados con faltas pierden eficacia defensiva y/o son descalificados del juego.

En este sentido, los resultados obtenidos parecen expresar que los jugadores de los equipos que vencen en más juegos normales defienden cometiendo menos faltas y/o provocan más faltas a los jugadores del otro equipo, fruto de un mayor cuidado en la preparación de las estrategias ofensivas y defensivas.


Tiros libres
En el presente estudio, los %TL fueron identificados como uno de los indicadores que más contribuyó para determinar el resultado final en los juegos equilibrados. La bibliografía consultada nos permitió verificar que los equipos vencedores presentan niveles de eficacia superiores en los tiros libres (Hobson, 1955, Dohrer, 1974; Kozar et al., 1994).

La idea de considerar la victoria y la derrota en los partidos de Basquetbol en función de categorías de análisis centradas en diferencias puntuales es relativamente reciente. De esta manera, los estudios de Marques (1990) y Mendes (1996a) en Portugal y de Kozar et al. (1994) en los E.U.A. evidencian, de forma inequívoca, la contribución de este indicador en el resultado final de los partidos (en los últimos 5 minutos de los partidos equilibrados los equipos vencedores convirtieron 48,4% de los puntos totales a través de tiros libres, mientras que los equipos vencidos apenas convirtieron 23,3%; y el análisis individual de cada uno de los últimos 5 minutos reveló que los equipos vencedores convirtieron más tiros libres que los equipos vencidos, lo que correspondió a más de dos tercios del total de puntos).

De hecho, y de acuerdo con los resultados del presente estudio, la contribución relacionada de este indicador con las victorias/derrotas parece expresar el desarrollo de los momentos finales de los partidos equilibrados, caracterizados por un mayor número de tiros libres intentados. Estas oportunidades para convertir puntos parecen surgir más concentradas en los momentos finales de los partidos, a la vez que, por las reglas del Basquetbol, a partir de la séptima falta del equipo todas las faltas cometidas son penalizadas con dos tiros libres. De este modo, se vuelve evidente que durante un equilibrio en puntos en los momentos finales los %TL pueden determinar, de una manera indudable, el resultado final de los partidos.

Probablemente, los equipos que ganan más partidos equilibrados están constituidos por jugadores más eficaces desde la línea de tiros libres. Mientras tanto, en esta categoría de partidos el concepto de eficacia global toma otras características que parecen superar a los aspectos exclusivamente físicos y técnicos. Desde nuestro punto de vista, frente a la presión que los jugadores sufren al tener que decidir en pocos segundos el resultados final de los partidos, otros factores (probablemente ambientales) crean diferentes estados psicológicos en los jugadores y como tales, podrían considerarse como los más determinantes (Mikes, 1987).

En este sentido, parece evidente que los equipos que ganan más partidos equilibrados están constituidos por jugadores que no son sólo más eficaces en los tiros libres (más allá de su eficacia en los indicadores comunes) sino también son capaces de mantener esa eficacia independientemente de las presiones psicológicas que surgen habitualmente en los momentos finales de los partidos.


El azar
De los 484 partidos analizados, 53% fueron resueltos por diferencias de más de 10 puntos, 30,23% fueron resueltos por diferencias de entre 2 y 9 puntos y 16,77 fueron decididos por diferencias menores de 2 puntos. Las matrices de confusión reclasificaron correctamente 66,67% de los partidos equilibrados, 76,71% de partidos normales y 95,12% de partidos desequilibrados.

En este sentido, la precisión de los resultados obtenidos para los partidos equilibrados, relativamente a las restantes categorías de juegos, es más restringida. De hecho, esta ausencia de explicación más objetiva en los resultados del presente estudio, parece reforzar la idea presentada por Marques (1990) y Turcoliver (1996) subyacente a la noción del azar, i.e., en el sentido de que cuanto mayor fuera la diferencia en puntos en los partidos, menor es la influencia del azar y consecuentemente, mayor es la precisión en los análisis realizados.

Reforzando todavía más esta cuestión, parece claro que en un partido de Basquetbol, cada equipo al partir de una igualdad en cero puntos, intenta alejarse del equipo oponente lo más rápidamente posible, de modo tal de disminuir la influencia del azar en el resultado final (Marques, 1990). La aceptación de esta deducción, nos induce a sugerir que los partidos equilibrados se constituyen como la categoría más susceptible de ser perturbada por este factor.

El único estudio disponible en la literatura, que intenta cuantificar la influencia del azar en el resultado final de los partidos de Basquetbol, fue realizada recientemente por Turcoliver (1996) en 454 juegos de la NBA. Los resultados obtenidos evidenciaron que 8,5% de los partidos analizados fueron resueltos por el azar.

Luego de haber realizado un análisis profundo de los indicadores de juego que influencian en el resultado final, el autor considera que los equipos que vencen en gran porcentaje en los juegos equilibrados no son los mejores, ni los peores equipos y tampoco los equipos de nivel medio. Son sí, los equipos que no se "encajan" en ninguno de estos padrones ya sea transversal (durante el partido), ya sea longitudinalmente (durante la temporada). Esta idea no fue investigada, por lo que pensamos que merece ser objeto de estudio en futuros trabajos.


Los momentos críticos
En todas las categorías de juegos, la estructura de las matrices que definen los constructos responsables de la separación máxima de dos polos de criterio variable (victoria o derrota), relegó a segundo plano las asistencias, las intercepciones, los tapones en los lanzamientos y los turn-overs. Tal hecho, podría llevarnos a pensar que estos indicadores no contribuyen, con toda seguridad, en el resultado final de los partidos. Sin embargo, el conocimiento empírico expresado por diversos autores, les ha atribuido una importancia innegable (Araújo, 1992; Turcoliver 1995).

Como es de conocimiento general, la victoria o la derrota en un partido equilibrado puede ser determinada, en los momentos finales, por un turn-over o una tapa en un lanzamiento. Entonces, no sería absurdo afirmar que, de manera general, todos los indicadores contribuyen al resultado final de los partidos. Basta una vez más señalar el conocimiento generalizado y comúnmente aceptado de la performance en los JDC. Pero entonces a qué se debe atribuir esta ausencia de poder discriminatorio de algunos indicadores de juego, de cara a su "existencia" simultánea?. De hecho, lo que parece obvio es que, en el caso concreto de las asistencias, intercepciones, tapones de lanzamiento y turn-overs, estos, no suceden en el juego con una frecuencia tan elevada como los restantes indicadores.

Las cuestiones anteriores nos conducen, decididamente, a la discusión de los momentos críticos de juego, definidos por Newell & Knight (1986) como los períodos del partido que determinan la victoria o la derrota. Más específicamente, los autores considera a los 5 primeros minutos del partido y a los últimos 5 minutos de la segunda parte como los períodos que deciden el resultado final. En este sentido, sugieren la utilización de diferentes colores en los registros estadísticos como forma de diferencias los resultados parciales de los períodos críticos de los resultados totales. A pesar de las controversias, estas cuestiones nos despertaron alguna curiosidad. Sin embargo, no detectamos en la literatura consultada soporte sólido alguno para llevar a cabo este tipo de análisis.

Conclusiones
Luego de la aplicación de los procedimientos estadísticos enunciados, los resultados obtenidos nos permitieron verificar que las hipótesis experimentales enunciadas fueron demostradas. A partir de los análisis realizados pensamos que es posible destacar las siguientes conclusiones:

Sugerencias y recomendaciones para el entrenamiento
Como es de conocimiento general, a los entrenadores les cabe la tarea de, obligatoriamente, desarrollar todas las capacidades/habilidades que directa, o indirectamente, permiten aumentar la eficacia en el juego de los atletas/equipos. Por lo tanto, frente a los resultados obtenidos en el presente estudio, nos parece apropiado sugerir un interés especial por parte de los entrenadores, relacionado con los indicadores que determinan el resultado final en los partidos. O sea, el entrenamiento deberá contener, desde nuestro punto de vista, momentos particulares que aborden objetivamente el siguiente cuadro de acciones:

Por otro lado, nos parece importante remarcar la necesidad de los entrenadores de alertar a los atletas sobre la extrema importancia de estos indicadores en el resultado final de los partidos. El conocimiento de esta realidad permite no sólo un entrenamiento más conveniente a las características del Basquetbol actual, sino también una mayor solidez en la forma de jugar de los atletas y en el modo de gestión de las competiciones por parte de los entrenadores.

Bibliografía


Notas
1. En determinadas circunstancias las faltas son cometidas por decisión táctica.
2. El estudio señalado posee una validez de generalización limitada al universo de estudio, toda vez que en el campeonato profesional Norteamericano los jugadores son excluidos del juego recién cuando cometen la sexta falta, mientras que según los reglamentos de la Federación Portuguesa de Basquetbol y de la Liga Profesional Portuguesa los jugadors son excluidos del juego cuando cometen la quinta falta.

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Año 3. Nº 11. Buenos Aires, Octubre 1998.