efdeportes.com
El voley-pala: una forma de jugar entre equipos

   
*Licenciado en Educación Física. Profesor de Secundaria.
**Licenciada en Educación Física. Profesora de Secundaria.
(España)
 
 
Julio César Rodríguez de la Cruz*
juliocesarrodri@mixmail.com  
Marta González Pascual**
martaglez71@wanadoo.es
 

 

 

 

 
Resumen
     Con motivo de la festividad de Santo Tomás de Aquino, nuestro Instituto de Enseñanza Secundaria celebra una jornada lúdico-educativa. Para que nuestros alumnos de 1º y 2º de E.S.O. participasen en alguna actividad deportiva diferente a las que hasta el momento se habían propuesto y desarrollado, se nos ocurrió investigar sobre nuevas posibilidades recreativas. Surgió así la idea de aprovechar las reglas del voleibol, que favorecen la participación de todos los componentes de un equipo, e incorporarlas al juego de palas. De esta forma creamos un nuevo juego de pala cooperativo: el voley-pala.
    Palabras clave: Juego cooperativo. Juego de pala. Educación Física. Voley-pala.
 

 
http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 11 - N° 106 - Marzo de 2007

1 / 1

Introducción

Punto de partida: el Juego de Palas

"Podemos afirmar que la pelota o bola, (…) empujada con el pie, con la mano o con la ayuda de algún tipo de instrumento, ha dado lugar siempre a una gran diversidad de juegos que a lo largo de los siglos se han ido influenciando unos a otros, hasta llegar al momento actual del deporte moderno." (Hernández, 1996: 61. Énfasis nuestro)

    Podemos decir que su origen es común a muchos otros deportes de raqueta e incluso de pelota-mano. Del Jeu de Paume (juego de la pelota del que hay documentación que atestigua su existencia en la Edad Media en Francia), la modalidad más extendida era la que se jugaba golpeando la pelota con la palma de la mano; eso sí, se enfrentaban dos equipos situados uno frente a otro.

    El juego de pelota encontró su máximo apogeo durante los siglos XVI y XVII. Tanto es así, que Cristóbal Méndez en 1553 (cfr. Álvarez y cols., 1997) le dedica gran parte del Tratado tercero de su obra, llegando a afirmar que la práctica de la pelota es el mejor y más completo de los ejercicios.

    Sin embargo, mientras que en algunos lugares empezó a decaer rápidamente, en otros, como en Francia, se fue transformando siendo el origen de juegos modernos. En nuestro país poco a poco iría adquiriendo gran auge, sobre todo en tierras vascas, cuna de una gran variedad de modalidades de juego de pelota, ya sea con la mano o con diferentes instrumentos de contacto con la bola.

    Sin movernos de España, además de la versión vasca, hay otras dos variantes que destacan: la pelota valenciana o trinquete y la pelota castellana (Martín, 1987: 40). En otras comunidades autónomas también tienen sus propios juegos de pelota con y sin implemento, como por ejemplo la pelota a mano canaria o pelota de aire.

    En otros países, el juego de la palma evolucionó a deportes como squash, padle, tenis, o a otros juegos de los conocidos como recreativos, tal como ocurre con el tamburello.

    Además, es el que más admiración levanta entre las gentes de medios rurales, a la vez que despierta pasiones y polémicas (Sanz, 1987: 31). Para otros (Martín, 1987: 35), la modalidad de pelota en frontón abierto se ha convertido en un deporte tradicional por antonomasia. Por lo tanto, podemos concluir diciendo que el juego de la pala es un juego tradicional, siendo el más popular tanto en difusión como en número de participantes (Hernández, 1996:63).

    A pesar de todo ese auge y popularidad, nos resulta curioso comprobar que en nuestra comunidad, Castilla y León, no hay ninguna modalidad de pelota que sea reconocida institucionalmente como deporte autóctono y tradicional (ley 2/2003).

    Como muchas de las modalidades más extendidas requieren de un frontón, y de todos es conocido que en los centros escolares no suele haber esta instalación, la forma de jugar empleada habitualmente en las clases de Educación Física se asemeja a la practicada en las playas, versión parecida a la pala cántabra, la cual no está exenta de cierta dificultad, y la pala elástica, mucho más fácil y asequible para su aplicación en el medio escolar (para ampliar información sobre estas modalidades ver Hernández, 1996).


Nuestra realidad

    Como es lógico pensar, con la propuesta de contenidos trabajados en las clases de Educación Física -y en el resto de áreas- tratamos de adaptarnos y acercarnos lo máximo posible a las necesidades de la realidad social de Íscar, localidad vallisoletana en la que se ubica el IES "Santo Tomás de Aquino".

    Por este motivo, puesto que el juego de pala, en cualquiera de las posibilidades que nos brinda -sobre todo la de frontenis-, tiene un gran auge y tradición en dicha localidad, acordamos incluirlo en nuestra Programación Didáctica de los cursos de 1º y 2º de E.S.O.

    El punto de partida de la Unidad Didáctica desarrollada en 2º de E.S.O. se encuentra en la realizada en 1º de E.S.O. sobre el uso de la pala con mero carácter recreativo. De ella se sigue conservando la esencia del juego de adversario en cada una de las sesiones, ya fueran con o sin red, con o sin pared, o con diferentes de bolas (volante de bádminton, bola de papel de periódico comprimido, bola de tenis...). Además, tanto en los ejercicios y planteamientos jugados individualmente como por parejas o tríos, se realizaban golpeos alternativos.

    En unos casos la semejanza era con el juego recreativo que podemos ver en las playas (sin red y sin posibilidad de bote) en los que utilizábamos bolas de papel de periódico comprimido. En otros casos la similitud era con el padle (la bola empleada era la de tenis pudiendo utilizar la pared), o con el bádminton (red por medio y volante de plumas o nylon). Pero en definitiva, en todas ellas existía un golpeo alternativo y una ausencia de cooperación entre los jugadores de un mismo equipo.

    Del juego de palas podemos decir que se encuentra entre "juego alternativo" y "juego con implemento"; entre "juego recreativo" y "juego popular".

    La pala (implemento) utilizada en 1º de E.S.O. era de madera, pero la utilizada en 2º de E.S.O. fue de plástico duro (shuttleball). El móvil en 1º de E.S.O., como se ha indicado anteriormente, fue el volante de bádminton, una bola de papel de periódico comprimido forrada con papel celofán y una pelota de tenis; en 2º de E.S.O. empleamos principalmente la pelota cometa y el balón-globo (Fotografías 1 y 2).

    No obstante, también nos hemos planteado que cabría la posibilidad de que fuera una pelota hinchable de playa de tamaño mediano, un pompón..., o cualquier otra opción que cumpliera las características de poca velocidad de vuelo y tacto blando.


Cooperamos en el Juego de Palas

    Sin desestimar los objetivos que cumplen los juegos de adversario -en este caso concreto el de la pala-, pretendemos añadir los propios de un juego de equipo en el que se requiere de la cooperación entre sus integrantes para elaborar una jugada ganadora o, al menos, eficaz.

    Podríamos calificar a nuestro juego como "colectivo de raqueta, de cooperación-oposición", en el cual existen tanto adversarios como compañeros, y al tiempo podemos decir que se enmarca dentro del juego de golpeo con red de participación alternativa y en espacio de juego separado. En definitiva, se trata ahora de un enfrentamiento de 3 contra 3 que resulta de la unión del juego de palas y el voleibol (Diagrama 1).

    Como juego, ya sea de adversario como de equipo, permite el conocimiento de las posibilidades y limitaciones de uno mismo y del contrincante, afianzando una educación cívica, y la aceptación de las normas y reglas, tanto en los ejercicios como en los planteamientos más competitivos o "partidillos", por lo que también se crea un ambiente de educación en la convivencia. Existe por tanto un enfrentamiento de equipo contra equipo en una "oposición inteligente" (propia de un deporte de adversario).

    Pero además, si lo transformamos o hacemos evolucionar hacia un deporte que requiera jugadas de equipo antes de pasar el móvil al equipo contrario, estaremos añadiendo objetivos del tipo: trabajar en, por y para el equipo; de cooperar; de compenetrar acciones y de dialogar, todo ello necesario para elaborar jugadas más efectivas en beneficio del grupo al cual se pertenece y, por tanto, disfrutar de esa sensación de compañerismo. Se beneficia la evolución de incluir la idea de "equipo deportivo" fundamentado en la existencia de una cohesión de personas con objetivos comunes que les exige un ajuste, una coordinación y una complementariedad entre los componentes, no siempre fácil de conseguir (idea de Cagigal, 1981). En este sentido habría un enfrentamiento "equipo deportivo de 3" contra "equipo deportivo de 3". La comunicación exclusiva entre adversarios se convierte ahora en una comunicación intra e inter equipo.

    Al mismo tiempo, al no ser asociada como contenido de Educación Física a ninguno de los dos sexos, favorecemos el juego mixto incorporando así la educación para la igualdad de oportunidades.

    Y si se trata de integrar al alumnado con dificultades motrices también permite realizar pequeñas modificaciones en el juego en función de las características específicas de dicho alumnado. En caso de un alumno/a en silla de ruedas no plantearía problemas mayores que el "tenis en silla de ruedas". Sher (1996) recoge el juego del Globo colgante para alumnado en silla de ruedas consistente en golpear un globo con palas. Esta autora incluso nos da ideas de cómo elaborar unas palas con material barato: perchas y medias de nailon para los pacientes con una capacidad limitada.

    Igualmente, Olayo y cols. (1996:196) plantean el voley-globo como juego recreativo dentro de sus propuestas para trabajar integrando alumnado con discapacidades motoras ofreciendo una opción de jugar en la que todos se sientan en el suelo utilizando una red o una cinta a poca altura, o la de jugar en sillas (bien de ruedas o bien normales), pero todos los alumnos/as jugarían en sillas, es decir, asumen el rol del discapacitado.

    Siguiendo con estos autores (ibidem: 196) plantean el juego de palas con alguna modificación para el alumnado con discapacidad motora con problemas para sujetarla, como adaptar cintas de velcro a las palas. De cualquier forma, estos autores recomiendan emparejamientos equilibrados (alumnado con más posibilidades motrices con quienes tengan menos recursos) para mejorar el peloteo y mantenerlo el mayor tiempo posible la duración del juego.

    En caso de tener un brazo escayolado (supuesto que se nos dio en la realidad), se podría jugar con el brazo sin escayolar -aunque no fuese el dominante-.

    Las cualidades físicas y motrices, en cualquier modalidad, son las mismas: la velocidad de reacción y gestual de brazos, la velocidad de desplazamiento necesaria en distancias cortas aunque con constantes paradas y arrancadas; la resistencia mixta y la fuerza-explosiva. Por su parte, la coordinación es claramente de tipo segmentario (ojo-implemento/ojo-mano) con máxima intervención del miembro superior dominante, aunque es evidente que existe también una coordinación dinámica general que, a su vez, demanda una constante intervención del equilibrio, tanto dinámico como estático.

    De lo que no cabe ninguna duda es que sí que variarían las capacidades de estrategia, pues se añade a las tácticas del deporte de adversario con red las propias del voleibol (colocación en la situación de ataque y defensa, orden de golpeo, recolocación e incluso un código interno conocido únicamente por los componentes de un mismo equipo).

    Las reglas irán variando del golpeo alternativo, tanto en el 1:1 como en el 2:2, a prácticamente la imposibilidad de un golpeo directo, siendo la mejor opción de golpeo la jugada grupal , sobre todo en nuestro voley-pala 3:3.

    En esta progresión hacia la necesidad de hacer jugadas entre todos los miembros del equipo tendrá un papel fundamental el móvil utilizado, aunque no menor que los planteamientos de los ejercicios previos que deberán fomentar la participación de todos en la consecución del punto. Algunas de estos planteamientos serán:

  • Puntuar más si en la jugada ganadora han participado todos los miembros del equipo

  • Establecer la secuencia de golpeo previamente (miembro 1, 2 y 3) antes de pasar el móvil al otro lado de la red.


Normativa del Voley-Pala

    Las reglas aplicadas, previamente aceptadas por los participantes, son:

  • Equipos de 4 jugadores/as: 3 en pista y uno/a reserva (este último no estrictamente obligatorio).

  • Sorteo inicial para elegir saque, recepción o campo (si hubiera que disputar el último set se haría nuevamente un sorteo).

  • Se juega al mejor de tres sets de 15 puntos cada uno (aunque podría ser a 25 puntos como en el voleibol actual).

  • Establecimiento del orden de saque cada vez que se recupere la posesión de la pelota.

  • Se consigue punto independientemente de la posesión del saque (puntos directos).

  • Máximo de 3 toques en cada jugada, pudiendo un jugador/a dar dos veces seguidas a la bola.

  • La altura de la red será de unos dos metros aproximadamente.

  • La línea de campo se considera buena.

  • Si la pelota toca la red se sigue el juego (tanto en el saque como durante el juego).


Bibliografía

  • AA.VV. (1990). La Educación Física en las Enseñanzas Medias. Barcelona: Paidotribo.

  • AA.VV. (1998). Secundaria 2000. Educación Física curso 3º. Madrid: Santillana.

  • Álvarez, E., García, C., Zapico, J.M. (1997). Cristóbal Méndez y su obra -1553. Trascripción moderna y comentarios. Málaga: Instituto Andaluz del Deporte.

  • Cagigal, JMª (1981). ¡Oh deporte! (Anatomía de un gigante) . Valladolid: Miñón.

  • Hernández, M. (1994). "La pala como deporte recreativo" , en Colección: Juegos y Deportes Alternativos, 9. Madrid: INEF.

  • Hernández, M. (1996). Deportes de raqueta. Madrid: Ministerio de Educación y Cultura.

  • Hernández, M. (1997). Juegos y deportes alternativos. Madrid: Ministerio de Educación y Cultura.

  • Ley 2/2003, de 28 de marzo, del Deporte de Castilla y León (BOCyL 4-4-03).

  • Martín, F.A. (1987). Juegos y Deportes Autóctonos. Salamanca: Centro Cultural Tradicional.

  • Morán, O. (Coord.) (2002). Educación Física. Sesiones. Primer Ciclo E.S.O. Madrid: Pila Teleña.

  • Olayo, J.Mª, Vázquez, J., Alapont, A. (1996). El alumnado con discapacidad. Una propuesta de Integración (I). Madrid: MEC.

  • Ríos, M. y cols. (1998). El juego y los alumnos con discapacidad. Barcelona: Paidotribo.

  • Ruiz, G. (1991). Juegos y deportes alternativos. Lérida: Agonós.

  • Sanz, I. (1987). Juegos populares de Castilla y León. Valladolid: Nueva Castilla.

  • Sher, B. (1996). Juegos estupendos con juguetes improvisados. Barcelona: Martínez Roca.

Otros artículos sobre Unidades Didácticas

  www.efdeportes.com/
Google
Web EFDeportes.com

revista digital · Año 11 · N° 106 | Buenos Aires, Marzo 2007  
© 1997-2007 Derechos reservados